Se busca [BNHA, Shoto & OC]

12

Para ser un libro sencillo, le estaba tomando mucho tiempo, pero claro era entendible, nunca se había podido realmente dar el tiempo de leer, saboreaba cada palabra que sus ojos veían como si no fuera a leer un libro nunca más en su vida, porque en aquel momento no podía estar segura de que podría volver a hacerlo. Claro habían sido amables, habían dicho cosas buenas, la habían tratado bien, pero generalmente la vida no iba simplemente bien para ella.

Cuando terminó de leer el libro lo cerro y observó su portada por un largo rato, grabando cada detalle de los dibujos que en ellos había, quería buscar otro libro para leer, por lo que se levanto del sofá y camino nuevamente hacía el librero, dejando en su lugar el libro de ricitos de oro y buscando uno nuevo.

No alcanzó a decidirse cuando escuchó la puerta de entrada abrirse.

- Ya estamos aquí – escuchó las voces familiares de Todoroki y Aizawa, se asomó a observarlos y vio a ambos con bandejas de comida, dirigiéndose a la mesa del comedor para dejar ambas bandejas en ella.

- Traemos comida -dijo Aizawa con una media sonrisa – Debes de tener hambre

Ella la verdad no había notado que ya tenía el estómago vacío, había tenido un desayuno abundante por lo que con eso aguantaba bien por un largo rato, aunque aquí no tendría que hacerlo. Sentía que si se quedaba mucho tiempo en ese lugar jamás podría volver a las calles, a comer cada par de días.

- Muchas gracias -dijo en un susurro sonrojándose ligeramente al ver la mirada de ambos en ella, se sentó frente a Todoroki quien le animó a comenzar a comer.

Aizawa la observó por unos segundos para asegurarse de que comiera y luego se alejó.

- Debo reunirme con los maestros en unos minutos – observó su reloj con atención – volveré en un rato. – Se alejo despacio y salió por la puerta principal dejando a ambos chicos comiendo en silencio.

Para ninguno de ellos el silencio era algo desconocido, se podía decir que ambos se sentían bastante cómodos con no decir una palabra, pero Todoroki estaba realmente nervioso, sentía que tenía que llenar ese silencio con algo, hacerla sentir bienvenida, hacerla sentir bien.

- ¿Te gusta la comida? – dijo en un susurro sin dirigirle la mirada directamente

- Está delicioso -dijo ella con una sonrisa mirándolo y buscando su mirada- Muchas gracias, de verdad, por todo lo que han hecho...

- Yo lo siento... -dijo Todoroki bajando aún más su mirada- no sabía que él iba a hacerte daño, si lo hubiese sabido no lo habría ayudado a encontrarte – dijo de forma apresurada, casi arrastrando las palabras – si no hubiese sido por mi jamás te habrían encontrado, yo...

- No es tu culpa – de la misma forma en que él había interrumpido sus palabras, ella interrumpió las de él- No tienes que disculparte, tu mismo lo has dicho, si hubieses sabido, pero no lo sabías -agachó su cabeza buscando los ojos bicolor del muchacho, jamás había visto unos ojos como esos- De una forma u otra tú me salvaste – Shoto subió su mirada cuando la escuchó decir esto y observó su ligera sonrisa.

Él observó sus platos ya vacíos y comenzó a recoger para lavar.

- Déjame, yo lo haré -dijo tomando las bandejas de sus manos y llevándolas a la cocina, él la siguió para hacerle compañía mientras lavaba. Para ella se sentía reconfortante sentir el agua corriendo sobre sus manos, era revitalizante. Cuando terminó se volteó a ver a Shoto,

- Yo, creo que no sé tu nombre – dijo con una media sonrisa y ladeando su cabeza para mirarlo-

- Pues no, no lo sabes -medio sonrió Shoto – Todoroki Shoto -dijo estirando su mano hacía ella, ella ladeó su cabeza sorprendida.

- Pues creo que no debería tomar tu mano -Mostró sus manos desnudas, pues se había quitado los guantes cuando estaba leyendo – dejé mis guantes especiales en la mesita del salón, pero mi nombre es Mey Akiyama

Shoto rio cuando ella le recordó el detalle de sus guantes, no se había percatado de ellos.

- ¿Sólo son tus manos? – preguntó realmente intrigado, mientras caminaban fuera de la cocina hacía el salón donde ella busco sus guantes y se los puso.

- Pues sí, son solo mis manos, ambas, da igual si es solo con un dedo. Si te toco con mis manos se activa – Iba a decir que se activaba la maldición como siempre llamaba a su don, pero se lo guardó. Estiro su mano ahora enguantada hacía Todoroki y le sonrió. – Es un placer conocerte Shoto Todoroki.