Gun Phunsawat es un tierno y hermoso chico de veinte años que llega a Bangkok desde Corea, luego de que a su madre la ascedieran y la trasladen en la fábrica de coches donde trabajaba.
Off Adulkittiporn por su parte, es un chico de veintidós años mu...
Gun estaba fuera de la casa de su amigo New, el cual muy sorprendido bajó tras verle por la ventana de su habitación.
—Hey, oye, ¿Por qué no has llamado al timbre?, ¿Qué haces aquí fuera?
El más bajo rompió a llorar y se abrazó a este.
—Oh New, soy tan desgraciado.
El chico no entendía nada por lo que en un principio correspondió gratamente al abrazo pero luego de unos minutos lo apartó.
—¿Por qué dices eso, Gun?, ¿Qué es lo que te ocurre?.
—No sabía con quién más hablar, Krist y tú son los únicos amigos que tengo, lo siento—dijo el más bajo muy apenado.
—Hey, tranquilo...puedes venir cuando quieras, somos mejores amigos ¿No es cierto?.
Gun asintió entre lágrimas.
—Anda ven, entremos a mi casa y allí, si quieres me cuentas que ha pasado ¿ok?.
Al llegar a la habitación de su amigo, Gun agarró el osito de peluche que este tenía sobre la cama y tras emitir una leve sonrisa se sentó abrazandolo con fuerza.
—Es un regalo de Tay...es muy ñoño ¿no crees?—habló New sonriendo y sentándose sobre su cama también.
El más bajo negó.
—No, para nada...creo que es un hermoso regalo.
Tras unos minutos de silencio en el que New quiso darle un tiempo a su amigo, aprovechó para mandarle un mensaje a Krist, el cual llegó rápidamente pues su casa estaba tan solo a unos pocos metros de allí.
—Hey Gun, ¿Qué pasa?, ¿Por qué estás así?—preguntó este nada más entrar en el dormitorio y ver el triste estado de su pequeño amigo.
Este aspiró profundamente y luego soltó el aire de sus pulmones con una ligera lentitud.
—Es que no sé que hacer chicos, estoy muy confuso y asustado.
Ambos amigos se miraron con preocupación y acto seguido lo miraron a él.
—¿Qué tienes Gun?, Cuéntanoslo—habló New tocándole el hombro—… confía en nosotros.
Gun lo pensó por unos segundos más pues no sabía como explicarse, ya que su mente era un total caos.
—Es que bueno...yo...es que no sé que hacer con Off—Comenzó diciendo—… es que su padre y mi madre se han casado y yo tengo que seguir viviendo unos días más junto a él.
Sus amigos fruncieron sus ceños pues estaban algo confusos.
—Creí que ahora os llevabais bien—dijo Krist—...¿Qué ha pasado?.
Gun suspiró nervioso.
—Bueno, es que ahora todo a cambiado porque somos hermanos.
New lo miró aún confuso.
—Pero eso es bueno, Gun...ahora sois familia y no volverá a molestarte.
Gun negó.
—No, no es bueno para nada, porque yo....es que yo...
—Tú ¿¿¿Qué???—preguntaron sus amigos al unísono.
—E-Es que yo ....y-yo me enamoré de él.
—¡Oh mierda!—exclamó Krist.
—¡Joder!—lo hizo a continuación un boquiabierto New.
—Lo sé, chicos...esto es terrible y no sé que hacer—añadió Gun justo antes de soltar el oso, abrazarse fuertemente a la almohada y romper a llorar nuevamente.
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Rápidamente sus amigos se abrazaron al más bajó mientras acariciaban su cabeza y espalda, tratando de darle apoyo y consuelo.
Luego de un rato, el teléfono de Krist sonó.
—Oh mierda, es Singto—dijo con preocupación mirando la pantalla.
Entonces Gun lo sujetó del brazo.
—Por favor no le digas nada de esto...prometermelo chicos... prometerme que no le diréis nada a vuestros novios, ni a Off.
Ambos se miraron.
—Está bien Gun, lo prometemos—dijeron finalmente.
Tras descolgar la llamada y emitir una serie de varios monosílabos, Krist colgó.
—Siento tener que dejaros pero tengo que irme... olvidé que le prometí a Singto acompañarlo a la tienda de música.
—Tranquilo—dijeron Gun y New enseguida.
—Os llamaré luego, ¿Ok?.
—Ok.
Luego de irse su amigo, los otros dos chicos se miraron y volvieron a abrazarse.
—No sé que decirte Gun.
—Tranquilo New, te entiendo.
—Solo se me ocurre pensar en tu novio, ¿Seguirás con él a pesar de que ya no lo amas?.
—E-En parte por eso estoy así... la verdad es que lo quiero mucho y él no se merece que lo engañe de esta manera pero también tengo mucho miedo de perderle si le digo...¿qué tal si me odia por dejarle por alguien con el cual nunca estaré? pues resulta que además de que es un tonto hetero homófobo, el hombre a quién amo es también es mi hermano.
—Oh joder, Gun...menuda encrucijada...la verdad es que tu destino es bastante incierto y no quisiera estar en tu pellejo.
