Capítulo 26.

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[Errores de dedo se corrigen después]

[IMPORTANTE LEER LA NOTA DEL FINAL]

Me dio un pequeño beso en los labios y con dificultad se levantó de la cama, mientras yo le sonreía

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Me dio un pequeño beso en los labios y con dificultad se levantó de la cama, mientras yo le sonreía. Me levanté después que él y caminé hacia el baño, cuando puse la mano en el picaporte sentí que me jaló, me volteó y volvió a besarme apasionadamente, le correspondí unos instantes y después rompí el beso.

—Levi, por favor, detente—dije serio poniendo mis manos sobre su pecho alejándolo.

—No puedo evitarlo, me encantas Eren—dijo mirándome a los ojos—pero, ganas otra vez, ya me debes dos.

—Anoche te cobraste una, ¿ya se te olvidó tu amenaza?, me hiciste entrar en pánico.

—Perdón, estaba cegado y fue lo único que se me ocurrió para verte a solas.

—Lo pensaré, claro que si te vas ahora ayudará a aclarar mi mente.

—Chantajista.

—¿Yo?, el león cree que todos son de su condición.

Me sonrió me dio otro pequeño beso en los labios, me quedé ahí parado para asegurarme que salía de la recámara, cuando lo hizo y cerró la puerta, entré al baño. Me metí a bañar y cuando terminé de vestirme, Erwin entró a la habitación, me saludo a lo lejos y me dijo que se daría un baño.

Bajé a la cocina para preparar algo de desayunar y Hanji estaba ahí tomando café y ojeando una revista.

—Buenos días Hanji.

—Buenos días Eren—respondió y se levantó para saludarme de beso en la mejilla—justo estaba pensando en ti, estoy viendo un anuncio de la ropa de Isa—agregó enseñándome la revista y la miré unos segundos.

—Por cierto, ahora que lo mencionas, tengo duda de algo que me dijiste el día de la presentación—dije sirviéndome una taza de café.

—Adelante, con confianza.

—Cuando te dije que Erwin estaba de viaje, me dijiste que él no cambiaba, ¿porqué?

—Es que el día que firmó el contrato con Levi, yo fui a la cena y estuvieron hablando de negocios toda la noche y mencionó que viajaba mucho, luego Levi me ha contado que lo llama y siempre está en juntas, por eso lo dije, ¿pensaste que él y yo nos veíamos clandestinamente?

—No, para nada, no te creo capaz de engañar a Levi—dije para ver su reacción.

—Jamás lo haría, lo adoro—aseguró.

—Buenos días señoritos—exclamó Levi entrando a la cocina.

—Hola Livai, buenos días—respondió Hanji y lo abrazó efusivamente.

Yo no respondí y le corrí la mirada con enfadado, que amigos tan cariñosos eran, alguno de los me estaba mintiendo y dudaba que Hanji tuviera alguna razón para hacerlo. Abrí el refrigerador para no mirarlos y escuché que Erwin los saludaba, me abrazó por la cintura, yo volteé y nos dimos un beso en los labios.

Ardiente Tentación. [Riren]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora