Capítulo 8.

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-Es un cliente de la agencia, bueno, no él, su asistente, un día platicamos y me dio su tarjeta, la encontré el día de mi cumpleaños y como estaba solo, lo llamé y terminamos en un hotel y me lo hizo de una forma que...que ayer me orilló a volver a verlo.

-¿Tan bien estuvo?

-Bien es poco para describirlo, magnífico, Mikasa, me hizo gritar, me hizo ver luces, lo juro, sabía exactamente que partes de mi cuerpo tocar y como hacerlo

-Felicidades amigo, pocos hombres llegan a conocer y disfrutar del buen sexo.

-Si, pero me asusta.

-¿Porqué?

-Porque me está creando una especie de necesidad que no es adecuada, entró muy fácil en mi vida y esa misma facilidad puede salir de ella, y ¿qué haré después?

-Eren, si vas a seguir con esto, te debe quedar muy claro algo, disfruta del momento sin pensar en el después, no te enganches, entiendo como te sientes después de experimentar lo que viviste y sientes esas ansias, a mi me pasó con Annie y fue lo que me orilló a casarme con ella, pero, a veces me pregunto si eso es suficiente, si es lo único que tenemos en común, la verdad hablamos poco, así que metalízate que es sexo y nada más, que durará lo que tenga que durar y que después podrás seguir con tu vida.

-Tienes razón, además, creo que es casado, me dijo que no podíamos vernos el fin de semana.

-Seguramente, te repito, disfruta los momentos con él y ya.

-Pero, me siento mal por Erwin, él no se merece algo así.

-No es cuestión de merecer o no, reconozcamos que él tiene descuidada su relación no es por intrigar, sabes que no me gusta pero, ¿no tendrá él a alguien más también?, eso de trabajar casi 24 por 7 está medio raro.

-No lo sé, no lo creo, él no es así...si Armin te escuchara ya se hubiera infartado.

-Pero yo no lo tengo en un pedestal como él y, a todo esto, ¿cómo se llama el susodicho con el que te estás viendo?

-Derek- dije al leer ese nombre en la solapa de uno de los meseros que pasó.

Entonces pensé que era una mejor forma de llamarlo en lugar de haber guardado su número con las letras CD, siglas de completo desconocido.

Mikasa me sonrió sincera, mientras movía la cabeza y los ojos, había sido una buena confiar en ella, me ayudó a liberarme de la carga que traía sobre mis hombros y creo que hasta mis ansias de estar con él disminuyeron un poco.

-Un consejo, metete a un gimnasio, te ayudará a liberar energía.

-No te burles.

-No es burla, es en serio, podrás mitigar las ganas cuando no puedas verlo.

Me quedé más tiempo de lo necesario en mi oficina, ya que Erwin había ido a Chicago a cerrar un negocio y regresaría hasta el domingo, entonces recordé las palabras de Mikasa. ¿Cabrá la posibilidad de que él tuviera un amante?, ¿acaso por eso no quería tener relaciones conmigo?, ¿qué estaba pensando con nuestra relación?, ¿debía dejarlo?, no, yo conocía a Erwin mejor que eso y sabía que no sería capaz, claro que yo tampoco era capaz de enredarme con otro y justo era lo que estaba haciendo.


Llegué a mi departamento como a las nueve, me puse la pijama y me senté a ver la televisión mientras me comía un plato de cereal. Estaba caminando de canal en canal y en uno había un escena erótica, parecía que todo estaba confabulando en mi contra o quizá sería que ahora prestaba más atención a esas cosas por lo alterado que traía la testosterona.

Ardiente Tentación. [Riren]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora