Capítulo 7

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Los exámenes terminaron, por esta vez, y los chicos podían respirar aliviados. No es que las pruebas fueran muy difíciles, aunque a algunos les parecía todo lo contrario, pero tener que estudiar era agotador.

Ahora el variopinto grupo de cinco estudiantes se dirigía a la cafetería. Tanjirou, Zenitsu y Kanao seguían hablando de los exámenes y las notas que esperaban obtener. Genya simplemente no quería entrar en la conversación, había tenido suficiente de los exámenes como para hablar de ellos. E Inosuke estaba pensando en que se compraría y después, que le robaría a Zenitsu de su almuerzo.

Pero a veces, sólo a veces, el destino va en contra tuya.

-Oye, ¡Zenitsu!-una voz familiar llamó al rubio. Desde un aula, un muchacho azabache salió de su escondite. Sus ojos eran de un suave color turquesa, al igual que el amuleto que tenía al cuello, semejante al yin y el yang, atado en una gargantilla. Kaigaku, el hermanastro mayor de Zenitsu.

Al mencionado le vino un sudor frío, todo el buen ánimo de la mañana fue disipado con esas simples palabras. Su hermanastro tenía una habilidad natural para cambiarle el humor muy drásticamente. Aún así, el rubio se acercó a la puerta donde estaba reposando el zarco, dejando atrás a sus amigos, los cuales le miraban con curiosidad.

-¿Qué quieres ahora?-Zenitsu intentó sonar borde pero su mirada estaba fija en el suelo, tampoco ayudaba su temblor en los hombros.

-Nada especial, sólo que me des tu dinero.-contestó el otro hombre, mirando despreocupadamente al grupo que acompañaba a su hermanastro.

-¿Qué? ¡Pero si te lo doy yo...!-no pudo continuar hablando cuando fue agarrado por el cuello de su camisa.

-Me da igual lo que te pase a ti, ¿todavía no lo has entendido?-las palabras del azabache eran dichas en un tono bajo pero estaban cargadas de odio.

Genya, Tanjirou, Kanao e Inosuke se quedaron impresionados cuando el rubio fue cogido por el cuello de esa manera tan agresiva. Sin embargo, el último mencionado no necesitó nada más para que la sangre le empezase a hervir. Agarró el brazo que sujetaba a Zenitsu y lo apretó con mucha fuerza.

-Suelta a Zenitsu.-La autoridad y la fiereza de sus palabras hizo dudar por un breve instante al zarco. Aceptó su derrota y soltó al chico dorado. El chico ese, que tenía cara de mujer, parecía que estaba más que dispuesto para pelear y a juzgar por su musculatura a la vista, era un chico fuerte. Pensó Kaigaku.

-Tú.-Kaigaku señaló con un índice respectivo a Inosuke, el mencionado le devolvió la mirada agresiva y se interpuso entre Zenitsu y su hermanastro-.No deberías juntarte con él, acabarás convirtiéndote en otra basura.

-¡¿Qué has dicho, desgraciado?!-El de orbes esmeraldas levantó su puño en dirección a la cara contraria pero Genya fue lo suficientemente rápido para agarrarle del brazo a su amigo.

-¡Idiota, ¿qué haces?!-El ojimorado agarró de la cintura a Inosuke, Tanjirou fue corriendo también a detener al azabache, aferró su brazo libre y empujó hacia atrás.

Kaigaku simplemente miraba la escena con una mezcla de asco e indiferencia. Unos pasos apresurados fueron escuchados alejarse. Después de ellos, otros que se dirigían en la misma dirección.

Zenitsu corrió todo lo rápido que sus piernas le dejaron, abrió la puerta de uno de los cubiles azules y se vació el estómago. Kanao le había seguido y se había detenido al ver el cartel de madera que indicaba el género de los baños. Sin embargo, no dudo en entrar cuando escuchó a su amigo vomitando. Le encontró en el primer baño, agachado en el suelo y con la cara apoyada en sus brazos, los cuales reposaban sobre el frío mármol blanco.

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⏰ Última actualización: Jul 02, 2020 ⏰

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~En otra vida te haré feliz~GenTan/InoZenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora