𝐅𝐄𝐀𝐑𝐋𝐄𝐒𝐒 | " 𝐓𝐖𝐈𝐋𝐈𝐆𝐇𝐓 "

𝟏 - 𝑭𝑶𝑹𝑲𝑺

« Tú puedes, Circe, sólo entra como toda una diva y no dejes que nadie te haga sentir más rara de lo que ya eres. Elena Gilbert/Salvatore si te dejas. »

Sin perder más tiempo dejó un tronado beso sobre la mejilla de su mamá a modo de despedida, era su primer día en la preparatoria del pueblo y llegar tarde a clases no le hacía gracia. Ignorando las miradas de curiosidad que recibía por parte de sus ahora compañeros, caminó con desición a la entrada del edificio mientras jugueteaba con los collares y pulseras que traía, aunque se entretuvo más con el cuarzo blanco de colgaba de uno de sus tantos collares, regalo de "despedida" de su hermana.

— ¡Hola! Tú debes ser Circe, tengo entendido que tu hermana Saoirse llega mañana. Bienvenida a Forks, mi nombre es Eric, soy los ojos y oídos de este lugar. Puedo ser tu guía, confidente y consejero emocional. —  Decir que aquél chico no le había sacado un buen susto sería mentir. Es más, ¿De dónde había salido? Si la sonrisa de Eric no fuera tan contagiosa probablemente le habría soltado uno que otro insulto en su idioma natal por asustarla de esa forma.

— Un gusto, Eric. Sí, yo soy Circe aunque eso ya lo sabes y creo que me vendría bien saber dónde recoger mi horario, ¿Podrías ayudarme con eso? —  La sonrisa que le devolvió fue suficiente para dejar al pobre chico completamente embobado, y es que la combinación de su cálida mirada con su radiante sonrisa podía hacer sonreír hasta al más inexpresivo de los hombres.

Soltando un pequeño balbuceo a modo de afirmación Eric se encargó de llevar a la pálida chida por su horario, encargándose de hacerle saber los nombres de casi todos en la escuela y su "relevancia" en ese lugar. Circe podía ser reservada pero nunca maleducada, por lo que escuchó con atención a su animado guía asintiendo de vez en cuando para hacerle saber que lo estaba escuchando.

Una vez estuvieron frente a la secretaria tuvieron que parar con su pequeña charla para que la secretaria le entregara lo necesario a la joven, la cuál al ver que su primera clase no coincidía con la de su nuevo amigo decidió ir por su propia cuenta sin olvidarse de agradecerle nuevamente por su amabilidad.

Con sus botines marrones resonando en el pasillo logró llegar justo a tiempo a su clase, lo único que le incomodó fue tener que presentarse frente a todos.

— Hola, mi nombre es Circe Byrne y me acabo de mudar recientemente de Irlanda.

Dicho esto caminó apresuradamente al lugar que su profesor le había indicado, el cuál era junto a un chico demasiado alto y musculoso, aunque no le prestó mucha atención.

Ignorando los comentarios por parte de sus compañeros hacia su apariencia comenzó a sacar la libreta que utilizaría para esa materia y su pequeña pero útil estuchera.

— Hey, ¿Qué tal? Soy Emmett Cullen. —  Una voz la sacó de sus pensamientos y con una pequeña sonrisa aceptó la mano del chico que se acababa de presentar como Emmett, la frialdad de esta le descolocó pero no lo demostró. Antes de que pudiera contestar el chico siguió hablando.  — Vaya, tienes unos ojos preciosos, ¿Son naturales?