La última luz (Jack Frost y _____)

V E I N T I D Ó S

Oscuridad, no había nada más que eso, Jack se sentía inmóvil, miro a sus lados y noto que estaba solo ¿cómo era eso? No tenía sentido, recordaba la vez que él vio sus recuerdos, pero esto era diferente.

Una luz brillante apareció lo que parecía ser el final de todo eso, no tuvo más opción que ir hacia ella.

Una dulce casa apareció frente a él, era invierno por lo que la nieve decoraba el lugar de manera preciosa.

Una pequeña niña paso por su lado llamando su atención, Jack no tardó en descubrir que era ______. Pudo deducir que no pasaba de los cinco años, al verla tan alegre no pudo evitar sonreír.

Hasta que vio como ella derretía la nieve entre sus manos.

La pequeña parecía familiarizada con aquella acción ¿cómo era posible?

Su madre la llamo y ella corrió hacia la casa sin dejar de reír, Jack por instinto la siguió.

Ya dentro noto que en el sofá estaba sentado aquel hombre que vio hace poco.

La niña quiso acercarse pero el hombre solo la esquivo de la manera mas fría posible. Aun así ella no dejo de sonreír.

La pequeña corrió por la casa hasta llegar a la habitación de sus padres, allí su madre miraba como la luna subía de manera majestuosa.

--¡Mamá!--saludo la pequeña mientras se sentaba junto a su madre--¿La luna te dice algo?--

--¿La luna decir algo?--

--Sí, aveces me dice que no debo hacerte enojar--

La mujer soltó una leve risa y abrazo a su hija

--¿Me cuentas cómo la luna te hablo?--

--Claro que sí, mi pequeña--la madre volvió a mirar a la luna--Yo realmente  quería un hijo, pero poco tiempo después de casarme con tu padre descubrí que seria muy difícil--

--¿Por que mami?--

--Mi cuerpo simplemente no podía, cada noche miraba a la luna muy triste, pues pensé que estaba rota. Hasta que recordé que tu abuela me dijo que la Luna era muy generosa con las personas de buen corazón, así que cada noche le hablaba en silencio--

--¿Y te hablo?--

--Algo así, cuando dormía escuche una voz muy dulce que me consolaba, me dijo que mi sueño se cumpliría, pero con la condición de que ella me daría algo extraordinario--

--¡Y nací yo!--

La mujer abrazo a la pequeña con una sonrisa

--Así es, mi niña, así es...--

Ambas se abrazaron con ternura mientras la pequeña miraba a la Luna.

--No se por que dices cosas sin sentido--hablo el hombre con furia mientras entraba a la habitación--Escucha, ______, tú no naciste gracias a esa cosa, simplemente que tu madre se fue con otro hombre