Can't forget you.

Capítulo 7.🌙

—Oh, demonios —Jin se murmuró a sí mismo cuando se dio cuenta de lo que había hecho.
Hundiéndose en una de las sillas del salón, que se alineaban en el aislado balcón, colocó su cara en sus palmas.

Podía sentir como sus mejillas se estaban calentando con vergüenza por lo que acababa de hacer. Pensó que ya había superado a Jungkook, de verdad lo creía. O tal vez se había estado engañando a sí mismo todo este tiempo.

Especialmente cuando se había mantenido informado con la carrera de Jungkook durante los años e incluso compró la última película lanzada en DVD, solamente para que pudiera ver esa escena donde Jungkook caminaba fuera del océano usando solamente unos pantalones cortos, su ligeramente musculoso cuerpo todo mojado y…

—¿Ahora qué fue eso? —preguntó Taehyung silenciosamente mientras se sentaba en la silla al lado de Jin.

—Nada —dijo Jin en un tono que transmitía que quería que la conversación terminara.

Pero por supuesto, Taehyung siendo Taehyung …

—Es algo. Dime.

—Te dije, no es nada. Estaba solamente enojado porque fuimos todos ataviados y desfilados como si fuéramos malditas vacas para este estúpido evento.

—Ganado de primera. Somos ganado de primera calidad. Si fuéramos a ser vacas, por lo menos déjanos ser las mejores —dijo Taehyung secamente.

—¿De qué jodidos estás hablando?

—Pero no importa —siguió Taehyung como si Jin no hubiera hablado—, ese no es el punto. Algo está pasando.
Y tú vas a decirme que es—. Taehyung estudió a Jin intensamente.

Y esa era otra cosa acerca de Taehyung. Se negaba a dejar las cosas hasta que estaba satisfecho, como un maldito perro con un hueso. Jin suspiró, pero aun así no dijo nada.

—Bien. No me digas. Pero te voy a fastidiar hasta que lo hagas. Sabes que lo haré —Taehyung se detuvo antes de decir—, ¿no soy yo verdad?

—¿Qué? —pregunto Jin, perplejo.

—Quiero decir, hemos terminado ¿verdad? Nunca has estado celoso de mis otras aventuras. —dijo Taehyung pensativo.

Jin no pudo evitar reírse. —¡Hombre! Oh, Dios mío. ¿Eso es lo que pensaste que era? ¡No, hombre! Nunca estuvimos juntos como pareja, Tae. Bien, si dormimos juntos un par de veces, pero…

—¿Así que es Jungkook? —Taehyung miró fijamente a Jin, y Jin trató duro de no encogerse con lo que había revelado.

A veces olvidaba que su buen amigo no era solamente un cantante talentoso con bonita apariencia, aunque los años con el hombre le habían enseñado a no subestimar a Taehyung nunca.

—Mira, Tae, ¿podemos solamente dejarlo, por favor? —imploró Jin.

—Uh huh. Está bien. Mira, Jin, no voy a ligar con él, ¿está bien? No mientras tengas este enamoramiento con el chico. Podría coquetear con él…

—¡No tengo un enamoramiento con el chico!

—Está bien. Claro, tú no lo tienes, Jin. Compras revistas sensacionalistas con él en la portada y has visto su ultimo DVD como, oh, no sé, ¡tres malditas veces a la semana por un mes! Tienes un enamoramiento con el chico. ¡Y ahora tú podrías tener una oportunidad con él! —Taehyung aplaudió con júbilo.

Oh, querido Dios!! Jin pensó para sí mismo mientras un casi maniático destello aparecía en los ojos de Taehyung.

—¡No! ¡Nada de casamentero, por favor, Tae! —Jin regresó al tiempo donde Taehyung trató de juntarlo con una mujer que resultó ser lesbiana; o al tiempo donde le presentó a un jovencito que en realidad era un Dom dentro de juegos de sangre.

Jin se estremeció con el pensamiento de su cita con el Sr. Quiero-cortar-rayas-de-sangre-en-tu-piel-y-luego-lamerlas—. Sé que tienes buenas intenciones —dijo—, pero no… espera, ¿Qué quieres decir con una oportunidad?

—Bien, si te hubieras quedado, te hubieras enterado que el Sr. Jeon Jungkook quiere que nuestra banda ideé una canción para la próxima película que está produciendo.

Los ojos de Jin se ampliaron con horror.

—¿Aceptaron?

—Por supuesto que lo hicimos, Jin. Lisa dijo que sería una buena exhibición y Namjoon estaba muy excitado.
¿Sabías que era un fan de closet de Jeon Jungkook? Deberías haberlo visto después de que te fuiste. Él…

La voz de Taehyung se desvaneció mientras lo que le dijo a Jin finalmente se hundía en él. Jeon Jungkook quería una canción de la banda, de Jin. E iba a pasar tiempo con ellos para discutir exactamente lo que quería.

La cara de Jin palideció con el pensamiento. ¿Cómo iba a ser capaz de esconder su continua atracción por el hombre?

—Hey, Jin, ¿estás escuchándome? Hey…

—Taehyung tocó su hombro—. ¿Estás bien? ¿Es Jungkook? ¿No quieres trabajar con él?

—No. No. Todo está bien, Tae, de verdad. —Jin forzó una sonrisa en su cara. Sabía que era una gran oportunidad para la banda para forjarse dentro del mercado mundial. Ahora si tan solo pudiera superar sus problemas con Jungkook. Podía, ¿verdad?