Estúpido Amor (Terminada)

Capítulo 23

- Buenos días dormilona – canto Daniela cuando vio que la peliazulada abrió los ojos.

- ¿Que hora es?

- Poco más de las 9 – contesto sonriéndole – llamaron del hospital hace rato. ¡Mi pequeña despertó, le quitaron el respirador y lo primero que dijo fue que tenía hambre! – dijo riendo - Esta tarde le darán el alta.

- ¡Eso es grandioso!

- Si, me hubiese gustado estar ahí cuando abra los ojitos.

- Hey – la llamó acariciando su mano- Va a estar bien.

- Lo sé, ella es fuerte. Hable algunas palabras, prometí ir a verla.

- Supongo que luego de esto me pides que te acompañe al centro por algunos regalos, ¿verdad?

- Puede que haya encargado algunas cosas para ella...

- ¿Como no quererte si tienes ese corazón tan noble? – pregunto Poché.

Antes de poder pensarlo las palabras ya habían salido de su boca.

No era tonta, Daniela había confesado su amor por ella, y María José no le había dicho nada.

Pensó que quizá, estaba sensible por la situación y eso la había impulsado a hacerlo.

- Tu y Elena me hacen mejor persona – se sincero.

Poché nuevamente no supo que responder, así que opto por lanzarse hacia sus labios.

Un beso lento, explorándose mutuamente pero de una forma poco sexual.

Solo transmitiéndose esos sentimientos que aun no estaban completamente listas para asumir.

Pronto el beso se convirtió en más pasional.

Poché se moría de ganas de hacer el amor con ella, pero no la quería presionar, sabía que Daniela aun no estaba tranquila.

- ¿Porque te frenas? – pregunta Calle clavando sus ojos en ella.

- No creí que estuvieses lista... - susurró mirando sus labios.

Dani sonrió y la tumbo lentamente de espaldas sobre la cama.

- Siempre voy a estar lista cuando se trate de ti, gorda – dijo mientras quedaba sobre ella rosando sus narices un par de veces hasta volver a besarse.

María José la tentó, pasando la lengua por sus labios y volvió a alejarse. Daniela impaciente quiso ir hacia su boca, Poché se movio de modo que la boca fue directo a su cuello.

Calle se detuvo el tiempo necesario para besar, morder y chupar el cuello de la más pequeña hasta que estuvo satisfecha, pero en cuanto quiso volver a su boca, la peliazulada volvió a evitarla.

- ¿Qué carajo? – pregunto exasperada.

Poché solo sonrío ante lo irritada que la castaña se veía.

Volvió a intentarlo pero no consiguió llegar a sus labios.

Intentando no dejarse vencer, y bajo su mano acariciando pecho y vientre hasta llegar a su destino robándose un leve gemido de su chica.

Sonrío creyendo que se había salido con la suya, pero en cuanto fue en busca de su boca, Poché volvió a frenarla.

- De repente tengo ganas de una ducha – sonrío.

Y sin esperar respuesta, salió a paso rápido para el baño.

Daniela tardo solo 2 segundo más en seguirla.

Pero nada la preparo para lo que la iba a recibir: Poché de espaldas a ella, quitándose prenda por prenda, lentamente y con un leve vaivén de caderas.

Claramente Dani la había visto desnuda en varias ocasiones, pero cada una de ellas era capaz de quitarle el aire al ver su cuerpo.

No mentía cuando decía que María José era la mujer más hermosa que sus ojos hayan visto.

Poché salto hacia la ducha y prendió todos los grifos que tenia, Calle sin poder esperar mucho más, se metió tras ella, sin siquiera quitarse su pijama, y la pego de espalda a ella contra la fría pared.

La peliazul soltó un grito de sorpresa ganándose que la castaña pegue su pelvis contra ella una vez más pasando la palma abierta por su abdomen.