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Narra Pilar

- Llegaste bien?
Después de todo el dia desconectada y atareada por los exámenes, finalmente pude contactarme con Purre a traves del Skype.
- Lo hice.
Sonrío.
- Como te fue en tu primer examen?
- Mejor de lo que esperaba. Suspiro. - Creo que si pase.
O eso espero, con un buen promedio me conformo, es lo que necesito para pasar.
- Lo hiciste. Purre intenta animarme. - Te esforzaste mucho.
La verdad es que si, no tuvimos sexo y eso me ayudo, no estaba aqui para darme placer, de haberlo estado me hubiera distraido muy rápido.
Después de que Purre me dijera que se iria solo tuvimos salidas como ir a cenar o almorzar juntos, incluso el que el me trajera a casa, pero no pasábamos esa barrera y aunque sus cosas se mantienen en mi departamento Purre se estuvo. quedando en un hotel.
No hubo ni siquiera un roce entre los dos.
Así que tuve que buscar otros métodos.
Me quedo en blanco recordando mi ducha antes de salir hoy temprano por la mañana, mi mente nublada por Purre y mis dedos tocando por todo mi cuerpo mientras el agua helada recorría mi cuerpo.
Llegue al placer con facilidad, repitiendo su nombre hasta dañarme las cuerdas vocales.
- En que piensas?
Su pregunta me toma desprevenida.
- Qué?
Purre sonríe y niego sonrojada.
- En que piensas, Peach?
En como me masturbe esta mañana pensando en ti.
Me sonrojo mucho más y siento que él
puede leerme la mente con esos gestos que me da.
- Ya me extrañas?
Cambia su pregunta, una muy facil de responder.
Enseguida le respondo.
- Lo hago.
Veo una sonrisa cruza sus labios poco a poco.
- Desde que te despediste lo hago.
Purre traga saliva y su mirada baja por mi cuerpo, se pasa la lengua por los labios.
- Llevas...
- Pijama, Purre.
Pronuncio con una sonrisa.
Él baja la cabeza y sus ojos lujuriosos me recorren desde la cintura hasta mi rostro.
- Crees que estoy echando a perder nuestro acuerdo si te pido que me dejes ver algo de piel?
Me echo a reír.
- Creo que si no puedes tocarme, no puedes romper nuestro acuerdo..
Purre sonríe.
- Entonces dejame verte, Pilar.
Mi corazón se acelera y hago lo que me pide, Purre se levanta de la cama donde se encuentra y mi interrogante a saber donde va es respondida cuando escucho que le echa seguro a la puerta de su habitación.
Aparece en la pantalla otra vez y se acomoda sobre la cama.
Me rio por este momento nada incomodo y me llevo las manos al elástico en las esquinas y al lado de mis pechos, tiro muy despacio hacia arriba y me lo quito con cuidado hasta quedar en toples, mis pechos rebotan al salir de su escondite y al retirar toda la parte superior del pijama, me acomodo el cabello hacia adelante para darle mejor vista de mis pechos.
Sonrío.
- Qué te parecen?
Purre me responde con la misma sonrisa.
- Hermosa, como siempre.
Me muerdo el lábio.
- Qué mas quieres que haga, Purre? Juego con él.
- Sabes lo que quiero.
Me llevo las manos a mis pechos y él contiene el aliento cuando comienzo a pellizcar los pezones.
- Mierda, Pilar..
- Te gusta esto, Purre?
Le pregunto con un tono pervertido, mis manos dejan mis pechos para bajar por mi abdomen.
Esto me excita mucho.
Que este mirándome mientras me toco, rayos, es mucho mejor que haberme tocado yo misma esta mañana y mi short pijama ya esta húmedo a pesar de que mis dedos ni han llegado ahí.
- Lo quieres mas abajo?
Continuo provocando, mi estomago se aprieta, necesito llegar abajo.
Purre contiene el aliento.
- Sabes donde los quiero.
Mi entrepierna se estremece con su voz sexy y ronca, le cuesta hablar lo cual me indica el nivel de excitación que tiene y que se asemeja mucho a mi.
- Dime... Pilar.. Pronuncia y nuestras miradas se encuentran. - Que has hecho para darte placer mientras no estaba?
Jadeo.
- Me toque.
- Donde, peach?
Trago saliva.
- Enséñame donde.
No espero más, ambos necesitamos estoy luego de un suave camino de mis manos, estiro la tira del short y meto mis dedos dentro, al hacerlo puedo ver como él ya tiene la mano derecha dentro del pantalón de dormir y el bulto se hace notar mientras comienza a masturbarse.
Me acaricio el clitoris y mi interior vibra de tal forma que siento que doy un brinco, eso no me detiene, introduzco mis dos dedos y mis labios se separan.
- Purre...
- Lo sientes, Pilar? Sientes mi gruesa polla dentro de ti? Me pregunta, su voz cargada de deseo. - Joder, Pilar, dime.. que lo sientes.
- Lo siento.
Me atrevo a mirarlo y su mano comienza a moverse rapido, adelante hacia atras.
La cabeza de su polla se escapa de sus
pantalones de dormir y me la muestra completa.
- Sientes lo duro que te penetro?
- Joder, sí...
Me toco lo mas profundo que puedo llegar y mi cuerpo termina por recostarse sobre el colchón mientras los ojos de Purre no me dejan, me pide estar desnuda por completo y con una mano retiro el short pijama.
- Desnúdate tu también.
Le pido.
Me sonríe antes de proceder a hacerlo.
Esta vez los dos completamente desnudos nos tocamos hasta llegar al
orgasmo, repletos del sudor recorriendo nuestros cuerpos como si hubieramos corrido una maratón.
Purre es el primero en llegar y yo me corro enseguida, doy giro en la cama con una sonrisa me acerco a la pantalla de la laptop.
- Mierda.. Pilar. has estado maravillosa... estuvo..
- Estuvo muy rico.
Completo por él y sonríe.
Purre mira la esquina de la pantalla y regresa sus ojos a los mios.
- Creo que lo hemos hecho durante mucho tiempo.
Me dice y me paso la lengua por los labios.
Ha valido la pena.
- Si, tengo que ir a dormir Me cubro la boca cuando bostezo. - Mañana es el ultimo examen, deséame suerte.
- Suerte, mi amor.
Mi sonrisa crece.
- Esa es una gran suerte. Mi sonrisa se cae un poco. - Cuando regresa?
Purre hace una mueca.
- Me ha salido algo de ultimo minuto.
Frunzo el ceño.
- Algo?
- No te preocupes, valdra la pena.
- No entiendo, Purre.
Él no responde mi duda.
- Cuando acabe con eso.. volveré, unos dos dias mas quizás, pero si me extrañas tanto..
Se lo que va a decir.
- Podemos hacer esto todas las noches.
- Me encantaria.
Le respondo honesta.
- Me tengo que ir.
Me anuncia.
Y yo que queria una nueva ronda.
Definitivamente Purre es una gran distracción para mi.
- Te amo!
Le prometo.
- También te amo, Pilar.

Dime cuantas veces? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora