Dime cuantas veces?

41.

Narra Pilar

- Ya no estoy en el programa?
Repito las palabras del fotografo
- No debe haber un error.
Dice Nicole a mi lado.
- Pilar no puede irse. Menciona Lara. -Esto esta mal.
- Lo lamento, chicas, pero tengo mis ordenes ya no van a fotografiarte aqui, Pilar. Continua él observando a ambas y luego a mi. - Escuchen, yo tampoco entiendo que paso.
Yo si se que paso.
Antes de darme cuenta mis pies ya están cruzado el vestíbulo, tomo el primer ascensor y cuelgo mi bolsa bien al hombro bajo en el piso de su oficina y ingreso a su oficina sin tocar.
Ojalá hubiera tocado.
Ojalá..
Malena esta aqui, por no decir encima de Purre.
Y la imagen frente a mi no solo parte
mi corazón a la mitad sino me recuerda a aquel Purre, él que no tenia filtro al lastimarme con palabras frías.
Él esta aqui otra vez y este no es mi Purre, no es el Purre que yo amo.
Desde que fui a verlo, él no responde mis llamadas y a la mínima proximidad que tengo con él, se marcha y sigue sin dejarme explicar lo que sucedió.
- No sabes tocar?
Dice agotado, el labial de Malena se refleja en su camisa abierta.
No llores, Pili.
No lo hagas.
Trago saliva. 
- Tengo que hablar contigo.
La vista se me nubla por las lagrimas y Malena se acomoda en su regazo, observa a Purre y él le da una orden solo moviendo el menton en dirección a la puerta, ella se levanta sin protestar y él sonríe provocándome, tengo ganas de llorar y finalmente no tardo en descubrir que esta bebiendo gracias al vaso que esta sin terminar sobre su escritorio.
- Qué haces aún aqui?
- Sabes porque estoy aqui.
Purre se pone de pie y se acerca a mi después de acabar su trago.
- No, no lo se fui claro, deberías estar
tomando tus cosas y saliendo por esa
puerta..
- Esa es tu manera de echarme de tu vida?
Purre aprieta la mandibula y mi corazón duele.
- Al menos ten el valor de decírmelo de frente.
- Eso suena irónico viniendo de ti.
Trago saliva.
- Ambos sabemos que lo haces para
lastimarme, incluso con Malena..
- Eso es lo que crees, Pilar? Me interrumpe. - Te sorprenderia lo fácil que puedo cambiarte. Todo en esta vida es reemplazable.
- Eso es lo que crees que es mi amor? Le pregunto dolida. - Crees que puedes remplazarlo?
- Ya lo hice.
Tres palabras que me dejan sin aire.
- Mentira!
Purre sonríe. 
- Eres mujer, Pilar, créeme, remplazar a una mujer como tu es tan facil como recoger a cualquiera a la media noche.
Mi mano actua por si sola y antes de darme cuenta le he abofeteado el rostro con tanta fuerza que siento ardor en mi palma.
Como hemos llegado a esto?
Si tan solo él..
- No se te ocurra hacer eso otra vez.
Me suelta de frente.
Antes de poder quejarme, me toma del brazo y tira de mi, las personas fuera de su oficina nos observan y yo no entiendo nada, Purre continua arrastrándome, toma el primer. ascensor conmigo y lo comprendo todo cuando llegamos al primer piso.
Entonces cuando lo hace se que lo he
perdido, que este ya no es el Purre que yo conozco, sino uno cegado por la rabia y el odio.
La vista me quema y no suelto la primera lagrima, hasta que lo escucho.
- A partir de hoy la señorita Pilar Pascual no tiene permitido ingresar a este edificio.
Levanto la mirada dolida esta dándoles fuertes instrucciones a los guardias y todo en mi no puede creer lo que esta haciendo.
Los pedazos de mi corazon roto se terminan por romper.
- Márchate de mi empresa, Pilar y no regresas. Me exige. - Y de mi vida también, no quiero verte nunca más. 

~*.

Purre estás yendo demasiado lejos....😤😰😥