ETERNAMENTE TUYO #3 Mercancía

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Maratón 1/3
Contenido +18

En el momento en el que los labios de Taehyung tocaron los suyos el pensamiento de cualquier cosa a su alrededor se perdió por completo. No estaba seguro de cómo es que habían llegado a la cabaña, mucho menos cómo es que habían terminado en el sofá de la sala literalmente arrancándose la ropa de sus cuerpos. 

Su piel hirviendo sintió verdadero alivio cuando aquellas manos fuertes tocaron la superficie de su dermis con delicadeza y al mismo tiempo con determinación.

Taehyung abandonó sus labios para bajar lentamente hasta su cuello y desde ese lugar empezó a bajar lentamente por su torso que hasta ese momento aún conservaba la camisa en su lugar pero eso no impidió a su alfa pasear sus labios por cada parte, besando y atrapando con sus dientes su piel en delicados mordiscos hasta llegar al filo de su camisa y desde ahí sus manos las cuales entraron en el interior de la tela para tocar su piel desnuda, empezaron por su abdomen con total devoción hasta llegar a su cuello, para ese entonces su camisa ya estaba a poco de salir.  Taehyung tomó el resto de la camisa y la pasó por su cabeza con cuidado hasta tener su pecho al descubierto. 

Taehyung bajó hasta estar de rodillas frente a su omega, estando en esa posición se maravilló de lo que tenía enfrente, la piel blanquecina de Jungkook era iluminada por los rayos del sol de la mañana que lo tocaban suavemente, como si lo estuviera acariciando entre las sombras causadas por las cortinas que prohibía a aquellos halos de luz  entrar por la ventana. 
Al ponerse de pie Taehyung fue atacado por un beso apasionado por parte de su omega, el cual tomó su rostro entre sus manos y lo hizo retroceder hasta que sus rodillas llegaron al filo del sofá, donde su cuerpo fue empujado hasta caer encima. 

Jungkook no sabía qué es lo que estaba pasando con él pero la necesidad de calmar su piel y deseo ardiente de su interior lo estaba llevando a un estado de frenesí, en el cual los pensamientos coherentes estaban de sobra en su mente.

Sin más subió encima de su alfa colocando una pierna a cada lado de cadera para luego bajar su rostro hasta estar cerca de el  de Taehyung el cual se mantuvo en su lugar esperando por sus movimientos. Mirándolo intensamente.

Jungkook se mantuvo estático por un momento a escasos centímetros de Taehyung, su respiración entrecortada hacía que su pecho subiera y bajara haciendo que por breves momentos la piel de sus pechos se encontraran en una suave caricia. 

-Se mio-pidió Jungkook mirando a Taehyung con sus hermosos ojos verdes. 

-Siempre he sido tuyo-respondió Taehyung para luego tomar con una mano la parte posterior del cuello de Jungkook y así lo atrajo hacia sus labios. 

Taehyung lo beso con tanta dulzura y pasión que solo con aquel beso estaba a punto de llegar a la cima de la creciente pasión que sentía en ese momento, su lengua entró y salió de su boca con precisión, haciéndolo delirar por la sensación. Nunca antes lo había besado de esa forma y solo en ese momento se dio cuenta de cuan reprimido estaba Taehyung. 

Jungkook gimió fuertemente cuando sintió las manos de su alfa recorrer su espalda hasta llegar a sus glúteos, las cuales traviesas empezaron a apretar con fuerza hasta hacer a su cadera impactara con la suya. Jungkook necesitaba aire, aquel movimiento lo hizo encender mucho más de lo que estaba, alejó los labios de su alfa por un segundo, alzó su cabeza para emitir un sonoro gemido combinado con un leve gruñido. Taehyung mordió su hombro con la suficiente fuerza como para dejar marca y la fuerza con la que apretó su cuerpo hizo que el cuerpo de Jungkook temblará de pies a cabeza. 

Sus besos, sus caricias por toda la extensión de su espalda y la solidez de su erección en medio de sus piernas estaban llevando a Jungkook a la total locura, estaba seguro de que si Taehyung  seguía con ese movimiento de caderas combinando con el movimiento que sus manos hacían a su cuerpo, iban a hacer que termine en sus pantalones. 

-Tae... Tae-gimió entrecortadamente por las sensaciones-no aguanto...

-Entonces déjalo salir-respondió Taehyung acelerando los movimientos de su cadera contra la suya. 

A lo que Jungkook sin poder contenerse gritó su liberación, manchó sus pantalones encima del cuerpo de su alfa quien sin perder un segundo se levantó del sofá llevándolo consigo hasta la cama que dando gracias a todos los dioses estaba cerca. Una vez ahí Jungkook sintió que estaba en una nube en lo alto del cielo, sintiendo los últimos espasmos de su orgasmo y cuando pudo tener un poco de conciencia Taehyung ya estaba encima besando su cuello y dejando pequeñas mordidas en sus clavículas, acariciando la piel desnuda de sus piernas las cuales estaban abiertas recibiendo el cuerpo musculoso de su alfa. 

Cuando pudo bajar de la nube en la que Taehyung lo hizo subir alzó sus manos para pasarlas por la espalda de su alfa. La textura de su piel era tan suave y sedosa que Jungkook no pudo evitar presionar sus uñas contra ella lo que produjo un quejido por parte de Taehyung, el cual alzó su mirada y la sonrisa ladina que se formó en sus labios hizo que el corazón de Jungkook retumbe en su pecho con fuerza.

-Tiene garras mi gatito, me gusta que las uses.

Luego de aquellas palabras Taehyung tomó su cabeza con ambas manos y se fundió en un beso abrasador el cual estaba a punto de derretir su cuerpo en su totalidad hasta dejarlo en un charco bajo aquel cuerpo musculoso. Jungkook no dudo en pasar sus manos por toda la extensión de la espalda de su alfa haciendo presión con sus uñas sobre su piel, con más fuerza que la vez anterior, dejando algunas marcas rojizas por donde pasaba. 

En medio de ese beso intenso Jungkook sintió una mano de Taehyung acariciar suavemente su mejilla con mucho cariño, pero luego aquella mano musculosa pasó hasta su cuello, donde lo envolvió e hizo un poco de precio en él, luego siguió su paso hasta su pecho, pasando por su ombligo hasta llegar a su erección, donde la tomó envolviendo su mano alrededor, para luego hacer movimientos de arriba hacia a abajo, acarició con su mano toda su longitud hasta llegar a la punta donde acarició la hendidura suavemente y luego bajó nuevamente hasta llegar a su entrada ya lubricada. 

En el momento en el que su alfa metió un dedo dentro Jungkook ya era un mar de gemidos, los cuales eran atrapados por la boca de Taehyung que no la abandonó, metía y sacaba su lengua al mismo tiempo que sus dedos entraban en su cuerpo, haciendo que las sensaciones que burbujeaba en su interior quisieran explotar. Ya había tenido un orgasmo antes y por ello estaba aguantando todo lo que Taehyung realizaba con su cuerpo, pero no estaba seguro de si iba a poder seguir. 

-Tae-dijo bajito en un gemido entrecortado, el cual fue acallado por su alfa con un beso cariñoso y al mismo tiempo lleno de un deseo pasional que nublaron sus sentidos, llevándolo hasta el fondo de un abismo interminable donde solo podía pensar en su compañero. 

Jungkook se encontraba tan cerca de la cima de un arrollador orgasmo cuando en medio de sus sensaciones provocadas por ese cuerpo encima del suyo tan caliente y apasionado que abrigaban su cuerpo, su alfa empezó a introducirse en su interior poco a poco, haciendo a su interior explotar en miles de pedazos. Jungkook hizo su cabeza hacia atrás en tanto Taehyung seguía besando su cuello e introducía su erección con mucho cuidado, haciendo que su cuerpo se adapte a su tamaño. 

Una vez sintió que estaba completamente unido a su alfa, sus brazos rodearon su espalda con mucha más fuerza que antes, mientras el aliento de Taehyung era pesado en su cuello, luego la suavidad de sus labios reemplazaron el aire caliente para transformar así su piel en lava ardiente, haciendo que quisiera algo más, por lo que no pudo controlar su cuerpo, empujó sus caderas hacia arriba haciendo que ambos vinieran alto y que Taehyung alzara su vista hasta encontrarse con sus ojos y así con sus miradas encontrándose directamente, su alfa se retiró para luego volver a entrar en él con suavidad pero con la fuerza suficiente para hacerlo gritar. 

Los movimientos de Taehyung estaban volviendo loco a Jungkook, hacía que su cuerpo entrara en un frenesí de sensaciones nuevas y a la vez tan intensas que no estaba seguro de si podría soportar un poco más. 

Los gemidos de su omega, acompañados por los pequeños gritos que emitía cada vez que entraba en él, lo hizo colocar las manos sobre el colchón y así levantar levemente su cuerpo. La visión que tuvo de Jungkook debajo de su cuerpo, con la piel perlada por el sudor, gimiendo y gritando de vez en cuando su nombre, mordiendo su labio para no ser tan ruidoso, fue la visión más erótica y hermosa que pudo ver en su vida.