Visita inesperada
—¡Apresúrate, niño! —gritó su madre desde la puerta, despertando de golpe al pelinegro que la miraba adormilado desde su cama.
—¿Que sucede, mamá? —preguntó, tallando sus ojos intentando disipar el sueño.
—El Rey, el Rey ha venido a visitarte, así que rápido, levántate y arréglate, no podemos hacerle esperar.
—¿El rey ha venido?
—Sí, SeokJin, el Rey ha venido, ahora ponte esto y maquíllate un poco —dijo la mujer, colocando un traje no muy costoso pero presentable que había encontrado en el armario de su hijo—, necesitamos comprarte ropa más presentable —murmuró la mujer para si, colocando un dedo sobre su barbilla y observando con ojo crítico el armario de su hijo—. ¡Pero anda, niño! No podemos hacer esperar a su alteza —dijo la mujer, caminando hacia la puerta no sin antes darle una mirada de advertencia al menor.
—¡Ash! —se quejó el pelinegro, golpeando el colchón con los puños cerrados y haciendo un pequeño berrinche de coraje.
«¿Por qué tuvo que venir? ¿Por qué? Argh... Aunque, si el Rey vino, ¿habrá venido también él?», pensó el menor, levantándose de un salto de la cama para correr al cuarto de baño y mojar un poco su rostro.
El cosquilleo en su estómago le indicaba cuan emocionado estaba ahora por aquella visita, aunque ciertamente no se debía al monarca en realidad.
Después de lavar sus dientes, SeokJin corrió de vuelta a su habitación, desvistiéndose casi en el camino para poder colocarse aquel traje blanco con detalles negros que le había elegido su madre. Se giró en redondo y corrió a su tocador, colocando un poco de loción de vainilla en su cuello para aromatizarlo un poco y colocar un poco de bálsamo de fresa sobre sus labios, solo para enrojecerlos un poquito más de lo normal.
Satisfecho con su reflejo, el menor dió una sonrisa al espejo y bajo a la sala, intentando calmar su acelerado corazón con cada escalón que bajaba.
La sonrisa en el rostro de SeokJin se fue borrando poco a poco en cuanto logro divisar a las personas que se encontraban en la sala de su hogar, casi queriendo girarse sobre sus pasos y evitar a toda costa llegar a aquel lugar, puesto que él, no estaba ahí.
—Oh, al fin bajas, hijo, ven, acércate por favor —pidió su madre con aquella voz dulzona que fingía frente al monarca—, su alteza ha venido a invitarte a un paseo real, ¿No es eso maravilloso?
SeokJin miró a su madre y después a su padre, quién le miraba casi con lastima al observar lo desgraciado que hacía aquella noticia al pelinegro.
—Mujer, no agobies al chico —pidió el hombre, dándole una mirada de advertencia a su esposa—, SeokJin, hijo, ven aquí.
El Rey Blanco observaba todo con una enorme sonrisa, esperando a que SeokJin llegará hasta la sala para saludarle al fin.
—Hola, precioso —dijo el monarca, tomando la mano del pelinegro entre la suya para después, depositar un beso sobre el dorso de esta.
—Buen día, su alteza —respondió SeokJin, dando una inclinación de cabeza y sacando su mano del agarre que el rey tenía sobre ella.
—Lamento venir tan de repente, pero no pude evitarlo —dijo el Rey—, me emociona mucho invitarte a tomar un paseo.
—Muchas gracias, su alteza, pero tengo mucho trabajo que hacer en la pastelería, no puedo simplemente dejar a mi padre con todo el trabajo así de la nada.
—¡Por eso no hay problema, niño! —dijo su madre casi saltando de su asiento—, nosotros nos haremos cargo de ello, ahora anda, acompaña al Rey.
El pelinegro, soltó un suspiro abatido, girándose a mirar al hombrecito que le sonreía emocionado, sin percatarse de los sonrisa forzada que tenía plantada en el rostro el pelinegro.
—¡Vamos! —dijo el Rey emocionado, aplaudiendo y lanzándose a tomar la mano del pelinegro entre la suya—. Te llevaré a dar un paseo por el reino, y después, podemos ir al palacio y caminar por los jardines... No, espera, eso podemos hacerlo otro día, así puedo volver a verte pronto, si, eso suena mejor —afirmo para si mismo el monarca.
SeokJin solo se mantuvo en silencio, escuchando lo que el rey parloteaba, sin prestar real atención.
Al subir a la carroza que les esperaba fuera, SeokJin soltó un suspiro, observando las calles del reino mientras el monarca seguía hablando y hablando.
—¿Te gustó el palacio? ¿Que te parece el camino de árboles a la entrada? ¿Y las flores a los costados? Si algo te desagrada, podríamos modificarlo.
—¿Disculpe? —preguntó el pelinegro, sintiendo un nudo en el estómago ante aquella insinuación.
—Oh, cierto, cierto, no debía decir eso —se regañó el hombre—, olvida eso, mejor, dime qué piensas del reino, si, eso es mejor.
SeokJin frunció el ceño, mirando con desconfianza al monarca, y tragando el temor que se le formaba en la garganta.
—Pues... El Reino blanco es muy lindo —respondió encogiéndose de hombros—, y, bueno, el palacio también lo es.
—¿Verdad? —dijo el hombre emocionado—. Sabes, el fin de semana estaré dando una nueva fiesta, pero está, será aún más especial, y yo realmente espero verte ahí —dijo esta vez, girándose casi por completo para observar al pelinegro—, espero no te moleste, pero he preparado un traje para esa ocasión, especialmente pensando en ti, mis mensajeros irán a entregártelo durante la semana.
—¿Me mandó confeccionar un traje?
—Sí, si, si —canturreó el rey—, estoy seguro que te quedará precioso.
—Pero su majestad, no había necesidad de ello.
—Oh, claro que sí, es algo especial, para la ocasión especial, además, ya tengo el consentimiento de tu madre.
—¿Consentimiento para que? —preguntó temeroso.
—Lo sabrás el día de la fiesta, ahora, disfrutemos del paseo.
Dicho aquello, el rey corto por completo la conversación, hablando sobre los lugares importantes en el Reino blanco y enfrascandose por completo en sus narraciones, se mantuvo ajeno a la mirada sospechosa y llena de temor de SeokJin, pues, aunque intentaba pensar cosas positivas sobre aquella fiesta, todo le hacía pensar que aquella fiesta no sería para nada agradable para él.
♔
Hola, hola, preciosuras... Se que me he desaparecido mucho de acá, y enserio les pido disculpas, pero, realmente no encontraba la manera de plasmar las ideas para el capítulo y ciertamente, sigo sin estar muy convencida de esto.
Sin embargo, espero el capítulo haya sido de su total agrado ❤️
Mi hermosa Neko-Loverss espero el capítulo te haya gustado, se que tarde demasiado en cumplir esto pero al fin está acá ❤️
Y, por la gran demora que tuve, habrá segunda actualización, así que más tarde subiré el siguiente capítulo (me falta terminarlo 😅)
✿Kim☆Palomita✿
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Crown ♔ YoonJin
FanfictionKim SeokJin es un adorable muchacho de apariencia hermosa que sin siquiera proponérselo ha dejado cautivado al rey, siendo llamado con regularidad a palacio por el monarca con la finalidad de cautivarlo y hacerlo su esposo. sin embargo, el amor no s...