🥀[Aᴍᴇʟɪᴇ Rɪᴅᴅʟᴇ ] ʟᴀ ʜɪᴊᴀ ᴅᴇ ᴛᴏᴍ ʀɪᴅᴅʟᴇ🥀

Capítulo 21: Un club de duelo con Lockhart

Me desperté el domingo por la mañana para descubrir por la ventana del dormitorio que había llegado el momento del invierno. Con la ardiente luz del sol invernal y mis piernas ahora continuamente rígidas. Me quedé en la cama y suspiré, pensando en lo que había pasado anoche con Dobby y la nueva víctima de la Cámara de los Secretos. Cuando me senté en una posición semisentada, Madame Pomfrey vino con una bandeja de desayuno, Harry también estaba despierto. Así que mientras nuestros músculos estaban siendo estirados y empujados, los dos comimos nuestro desayuno en perfecto silencio.
"Todo parece estar en orden", dijo Madame Pomfrey mientras Harry y yo estábamos en medio de la comida.
"Cuando hayas terminado de comer, puedes irte". Luego se fue, dejándome solo con Harry.
"Entonces, ¿cómo se siente tu brazo?" Le pregunté a Harry, y él me miró.
"¿No deberías estar preguntando sobre lo que pasó anoche?" Dijo Harry y miré hacia otro lado.
"No pasó nada entre nosotros, así que por favor no hagas que suene así", dije, y Harry se sonrojó.
Rápidamente nos vestimos y nos fuimos lo antes posible, apresurándonos en dos torres de nuestra casa. Cuando pasé por la biblioteca, Christine Gallow salió, había pasado casi una semana desde la última vez que la vi. Y esta vez ella no se escapó.
"¡Amelie!" Christine dijo cuando se dio cuenta de mí y se apresuró.
"Oh Christine, hola", le dije y me detuve para que ella pudiera ponerse al día.

"Fuiste increíble al ayudar al profesor Lockhart, ¿era cierto que perdiste todos los huesos de tus piernas como resultado?", Me preguntó y un pequeño sonrojo de vergüenza se escapó de mis mejillas.
Entonces parece que se había corrido la voz acerca de mi vergonzoso momento. Estúpido Lockhart, si no hubiera ido e intentado ayudar a Harry, no estaríamos en este lío. Entonces, después de una rápida conversación con Christine, me fui y volví a la sala común de Ravenclaw.
La noticia de que Colin Creevey había sido atacado y ahora yacía como muerto en el ala del hospital se había extendido por toda la escuela el lunes por la mañana. De repente, el aire se llenó de más rumores y sospechas. Los primeros años ahora se movían alrededor del castillo en grupos muy unidos, como si temieran que pudieran ser atacados si se aventuraban solos.
Lucy, que se había sentado cerca de Colin Creevey en la mayoría de sus clases, parecía extremadamente molesta y ni siquiera se animó incluso cuando Ivy intentaba ser graciosa. Mientras tanto, sin embargo, estaba sucediendo un mercado negro con talismanes, amuletos y otros encantos protectores en el interior de la escuela. Neville Longbottom compró una cebolla verde grande y maloliente, un cristal morado puntiagudo y una cola de tritón podrida antes de que los otros muchachos de Gryffindor señalaran que no estaba en peligro; Era de sangre pura y, por lo tanto, era poco probable que lo atacaran.
"Primero fueron por Filch", dijo Neville, con su cara redonda temerosa.
"Y todos saben que soy casi un Squib". Concluí con más miedo en sus ojos.
En la segunda semana de diciembre, el profesor Flitwick había venido a recoger nombres de aquellos que se quedarían en la escuela por Navidad. Los gemelos y yo nos habíamos inscrito, así como Lucy. Ya que queríamos ir y encontrar una manera de capturar y detener la Cámara de los Secretos que se abrirá. Cerca de la tarde revisé mi horario y vi que tenía pociones dobles.
Las pociones tuvieron lugar en una de las grandes mazmorras. Y esta lección de las tardes había procedido de la manera habitual. Veinte calderos permanecían humeantes entre los escritorios de madera, donde se podían ver escamas de latón y frascos de ingredientes.

Snape merodeaba entre los humos, haciendo comentarios alegres sobre el trabajo de Gryffindor que los Slytherin se ríen apreciativamente.
Draco, que era uno de los estudiantes favoritos de Snape, no dejaba de mirar a Ron y Harry con ojos de pez globo. Rápidamente le eché un vistazo a la Solución de hinchamiento de Harry y vi que estaba demasiado líquida, mientras que la mía, por otro lado, tenía una consistencia perfecta. Lo siguiente que supe fue que la poción de Goyle explotó, bañando a toda la clase. La gente comenzó a gritar mientras las salpicaba, con Malfoy haciendo que su nariz se hinchara como un globo. Goyle se dio la vuelta, con las manos sobre los ojos, que se ha expandido al tamaño de los platos. Y todo el tiempo Snape estaba tratando de restablecer la calma en la clase, y descubrir qué había sucedido.
"¡Silencio! ¡SILENCIO!" Rugió Snape.
"Cualquiera que haya sido salpicado, ven aquí para un Draft desinflado, cuando descubra quién hizo esto", escondí una pequeña carcajada al escapar cuando Draco se apresuró hacia adelante con su nariz del tamaño de una sandía.
Mientras la mitad de la clase se tambaleaba hasta el escritorio de Snape, algunos cargados de brazos como palos, otros incapaces de hablar a través de los labios gigantes hinchados. Cuando todos tomaron un trago de antídoto y las diversas inflamaciones disminuyeron, Snape se acercó al caldero de Goyle y sacó los retorcidos restos negros de los fuegos artificiales. Hubo un silencio repentino.
"Si alguna vez descubro quién lanzó esto," susurró Snape, enojado.
"Me aseguraré de que esa persona sea expulsada". Asentí con una expresión perpleja, como todos los demás.