MILEVEN

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Hopper estaba vivo, y ahora que Eleven podía verlo cara a cara se sentía viva, alegre, feliz.

Eleven estaba a tan solo unos metros de Hopper. Nancy, Will, Jonathan, Dustin y un prisionero ruso estaban con El.

Un corredor los separaba y el jefe de policía corría lo más rápido que podía, no podría esperar para volver a sentir la sensación que un padre siente cuando tiene entre brazos a su hija.

El momento en el que llegó abrazó con fuerza a El, la levantó del suelo y le dio vueltas en el aire, las lágrimas salieron y fue imposible no verlas ni retenerlas, la pequeña familia estaba junta de nuevo, padre e hija.

-¿Donde están los demás?.- Pregunto el jefe de policía una vez corroboró que su hija estuviera bien. 

-Lucas, Mike y Steve están distrayendo a los oficiales rusos en tu auto.- Se sinceró El. Para liberar a Hopper debieron distraer a los oficiales y tomar como prisionero a uno.

-Ya tienen a hombre, devuelta el nuestro.- Hablo un oficial al otro extremo del corredor, con su típico acento ruso.

-Bien, déjalo ir.- Ordeno Nancy a su novio.

Jonathan obedeció, liberó las manos del ruso y lo empujó para que pudiera llegar al otro extremo del corredor, en el momento que fue liberado, el soldado viejo sacó un arma que estaba dentro de su chaqueta y antes de que Nancy pudiera disparar el fusil que tenía entre manos, el oficial ruso disparó directo al pecho de Nancy.

Hopper tomo un arma que tenía Jonathan y rápidamente eliminó a los dos rusos que estaban con ellos, acabando con la vida del prisionero.

-Nancy.- Hablo Jonathan, el chico estaba llorando mientras intentaba de manera absurda contener la sangre que salía del pecho de la chica.

El jefe de policía se acercó y comenzó a tomar la herida, pero era en vano, el tiro era mortal.

–Jonathan– hablo– Hijo, déjalo– intento decir, el más joven reprimió el llanto, no servia de nada intentar algo que seria absurdo.

–jonathan– Hablo Nancy, con las pocas fuerzas que le quedaban– Te amo.

El chico le juro su amor en ese último momento que compartirían, le regaló sus lagrimas y le hizo promesas que ambos sabían eran imposibles.

–Hopper –Llamo Nancy– No seas duro con Mike, el logro que tu rescate fuera posible.

El más alto sonrío con nostalgia, estimaba a Nancy más que a nadie, y si ese era su último favor entonces lo cumpliría.

– Por favor dile que lo quiero mucho – Al comienzo de su oración su voz quebró, lastimando a todos las personas al rededor.

–Se lo dirás tu.- Comenta Jonathan– Viene en camino solo esperarlo, por favor.

– ¡Hay vienen!.- Grita Dustin una vez logra ver la camioneta de Hopper llegar.

El primero en bajar es Steve, tenía una sonrisa burlona, victorioso de ganar la carrera contra los rusos, sin embargo su felicidad se desvanece cuando nota que Nancy está en el suelo con un charco de sangre, a Jonathan tomando su mano y los rastros de lagrimas continúan en su rostro, y a hopper, serio, sin la felicidad que Steve esperaba ver por haberlo salvado.

–Si tan solo hubieran visto como destruimos su maldita base militar...– La voy de Lucas se apaga al notar el panorama que observo Steve.

–Chicos ¿Dónde carajos debe las llaves del auto?– Esa última voz fue la de Mike.

El corazón de Eleven se rompió cuando noto la sonrisa de Mike, ella sabía que no lo volvería a ver sonreír así.

–Mike, deberíamos volver– Comienza Lucas pero se calla cuando se da cuenta que Mike estaba observando a Nancy.

One shots// fillie Mileven Donde viven las historias. Descúbrelo ahora