14

1.4K 143 18
                                    

~LENA~

Aún no puedo creer que Kara sea mi novia. Ella es tan tierna. Temo hacerle daño. Mis relaciones anteriores no fueron las mejores.

Pero con Kara voy a esforzarme, voy a lograr que cada día que pase a mi lado se enamore más. Ya no me importa que me quiten el dinero.

Estoy a solo unos resultados de saber si la nueva cura que encontré sirve en mí amiga Samantha.

Sí es así, puedo dejar de lado la fortuna Luthor y centrarme en mis investigaciones.

Algunas medicinas que he inventado están patentadas con mi nombre, así que no tengo que preocuparme por dinero.

Lo único importante ahora es mí Kara. No voy a dejar que nadie la separe de mi lado. Aunque tenga que vender mi alma al diablo.

Llamo a mi asistente.

-Eva, necesito que tengas preparado mi Jet para este sábado. Para mañana. Digo.

- Como ordené Sra. Lena, ¿ Algo más?. Dice.

- Sí, en todo el fin de semana no voy a contestar mi teléfono. Digo.

- Muy bien, sra Luthor.

- Otra cosa, ¿ Has recibido alguna llamada de la familia Danvers.

- Sí, el gobernador Danvers llamó para tener una cita con usted, la programé para el lunes. Dice.

- Esta bien, gracias Eva, eso es todo. Digo y cuelgo.

-Así que ya te contactaste conmigo. Digo con los puños apretados.

-¿ Quién?. Dice Kara. Me abraza por la espalda y besa mi cuello.

- Tu padre. Digo. Ella se tensa y deja de besarme.

-¿Cuando?. Pregunta.

- Hoy, pero tranquila, ya te prometí que nadie te va apartar de mi lado, y mucho menos ahora que eres mí novia. Digo y ella me abraza.

- Suena tan bonito eso. Dice y la beso.

-¿Que quieres hacer hoy?. Pregunto miestras juego con uno de sus rizos.

-No quiero salir. Dice con un puchero. Supongo que es por miedo a los paparazzis.

-Esta bien, ¿que tal piscina?. Digo y ella sonríe feliz. A Kara es tan fácil hacerla feliz. No tengo que regalarle reloj carísimos, carros último modelo, no a ella solo tengo que darle cariño.
...

Miestras Kara nada en la piscina yo resivo los resultados a mi teléfono. Hay un 99.9% que funcione la medicina en Samantha.
Sonrío feliz. Por fin voy a vivir sin necesitad de preocuparme que me quiten los laboratorios.

- ¿Cariño, más tarde me acompañas a los laboratorios?. Le pregunto y ella lo piensa.

- Solo sí te metes conmigo a la piscina, me siento sola aquí. Dice con su puchero.

- Pero Kara, sabes que no me gusta, mi piel es muy sensible al sol. Digo y señalo mi piel súper blanca. Con unas horas de sol quedo como un camarón y después me arde.

-Yo te ayudo a poner el protector en todo tu cuerpo, así no te quemas. Dice.

-Esta bien. Digo, no hay nada que no haga por ella. Sí tengo que luego sufrir las quemaduras lo haré feliz por mi Kara.

Ella no solo pone el bloqueador por todo mi cuerpo, sino que masajea ciertas zonas sensibles.

Cuando nos metemos ella me abraza y besa. Yo la llevo a la orilla y comienzo a besar su cuello.

- Lena, no. Dice y me separo enseguida.

-¿ No quieres?  Le pregunto preocupada.

- Sí quiero, pero puede venir Hank. Dice y ruedo los ojos.

- Voy a tener que plantearme si necesito guardaespaldas, primero en la cocina y ahora aquí. Digo medio enojada. Me separo de ella y me pongo a nadar.

Siento sus manos me detengo.

- Lena, no te pongas así. Dice y me abraza.

- Lo siento, es que no puedo controlar mi frustración. Digo ya más tranquila.

-Yo puedo solucionar eso. Dice y siento que toca mis nalgas.

Siento su mano ahora en mi vagina. Ella corre hacia un lado mi traje de baño y comienza a tocar mi clitoris.

-¿ Estas segura?. Le pregunto y ella sonríe. Dios amo su sonrisa.

- Solo cállate y difruta. Dice y mete un dedo.

Muerdo mis labios para no gemir y Kara niega.

-No te hagas daño. Dice y me besa. Sus besos juntos con sus penetraciones, estar en un lugar que en cualquier momento nos pueden interrumpir, es lo que hace que explote. Siento como van reduciendo los espasmos.

Kara saca su dedo y me abraza.

-Quisiera que estuvieras desnuda. Dice y me sorprende. Kara en momentos de intimidad deja a un lado su personalidad inocente y tierna y se convierte en mi leona.

- Vamos a tu habitación. Susurra en mi oído. No digo nada y la ayudo a salir de la piscina.

-Espera. ¿ Ya comiste algo?. Recuerdo que ayer no ceno y esta mañana tampoco desayuno.

- Voy a comer ahora. Dice con sus pupilas dilatadas. Sonrío y la beso.

- Hablo en serio, no quiero que pases hambre, debes comer bien. Le digo y ella me abraza.

- Esta bien. Dice. Sonrío, tono su mano y vamos a la cocina, hago unas pastas que son lo más rápido y no necesita tanta preparación.

Durante todo el rato Kara no paraba de hacerme reír, ella es tan inteligente, debería seguir con sus estudios.

-¿Cuando retomaras tú carrera?. Le pregunto.

- No lo sé, estudiaba ciencias políticas por mi padre, pero lo que me gusta es ayudar a los demás. Dice.

-Puedes ayudar a lo demás si te formas bien y eres una gran politóloga. Digo y ella hace un puchero.

- No me refería a eso, quiero ayudar directamente, como médico. Dice y juega con su comida.

- Me parece bien, cuando abran las inscripciones te inscribes. Digo y ella me ve sorprendida.

- Pero yo no quiero que tú gaste dinero, y ahora que te pueden quitar tu herencia no vas a tener para tí.

- Tranquila, yo tengo dinero ahorrado, y mis inventos se venden bien, no tengo que preocuparme por dinero. Le digo.

- Aún así, es tú dinero, no mío. Dice y ella están tierna. Otro hubiera saltado de la silla y se hubiera puesto a celebrar sin pensar en mi economía.

-Puedes aplicar alguna beca, sino pasas me encantaría pagarte la carrera. Digo con una gran sonrisa.

- Dios Lena, nadie se habia preocupado tanto por mí, estas pendiente que coma, quieres pagarme la carrera que me gusta, me compras ropas, me llevas donde quiera, todo esto es un sueño. Dice con su gran sonrisa.

- Es la ventaja de tener una Sugar Mommy. Digo en broma.

-Lena. Me regaña con las mejillas rojas.

-¿ Que ? Yo clasificaría como sugar, soy mayor y rica. Digo seria. Aunque solo estoy actuando.

- Tú no eres eso, tú eres mí novia, una diosa caída del cielo. Dice y aunque soy de poco sonrojo siento mis mejillas algo rosadas.
No lo puedo evitar, ella es tan dulce.

- Y tu eres un angelito que le quitaron algunas plumas y no puede volar, pero yo te voy a ayudar con los poderes de diosa. Digo medio en broma, medio seria.

Tu Eres Mi CuraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora