8: What Are You Waiting For?

619 99 13
                                    

—Hola cachorro— dije con un toque de burla. Jungkook seguía sin mostrar otra reacción que fuera de nervios y espanto, cerró su boca y tragó duro.

Noté como intentó hablar pero de sus labios sólo salían sonidos que no llegaban a ser tartamudeos. Sus ojos no estaban quietos, me escudriñaban.

Sabiendo que vería a cierto alfa hoy tal vez, sólo tal vez, me esmeré un poco en mi vestimenta, una camisa blanca, siendo holgada en la zona de mi pecho, hombros y brazos, pero ajustándose perfectamente, marcando mi cintura, su color haciendo un contraste con mi piel canela. Unos pantalones de color café, los cuales tenían un estilo de campana en mis pantorrillas, pero abrazaban mis muslos y caderas, dejando que se note la redondez de mi trasero. Unos zapatos deportivos, blancos, dándole el toque sencillo y casual al conjunto, como si hubiera tomado lo primero que vi en mi armario y para complementar, y darme algo de glamour, no podían faltar los aretes platinados en forma de cadena que llegaban hasta mis hombros, finalizando con un poco de brillo labial en mis labios. Siendo un conjunto juvenil, ya que a mis 24 años no me consideraba un anciano como para estar de traje, pero al mismo tiempo sin dejar de lado la elegancia característica en mí. Sin embargo mi melena roja, en parte, rompía con el concepto de mi conjunto al ser tan llamativo, y eso me encantaba.

Teniendo en cuenta que este cachorro sólo me ha visto en pijama, no me sorprende en lo mínimo si está asombrado.

—¿Acaso te comí la lengua la última vez que nos vimos?— cuestione con una sonrisa ladeada, ante esto Jungkook bajó la cabeza colorándose de un potente rojo. Sé que mi comentario fue descarado pero mi punto es ponerlo de este modo, que no tenga escapatoria. Que recuerde todo, para que no me pueda evadir, que se ponga nervioso y tal vez se avergüence un poco. Pero eso es sólo para molestarle.

—N-No yo..— tartamudeó, intentado salir en su defensa.

—Tú y yo tenemos cosas de las que debemos hablar ¿cierto?— inquirí, seguía sin dirigirme la mirada, simplemente con su vista aún clavaba en el suelo atinó a asentir.

—Bueno, vamos— me giré para comenzar a caminar para guiarnos a mi auto.

—Jungkook-ah— gritó alguien a lo lejos, el alfa despegó su vista del suelo, rápidamente, dirigiéndola a la entrada de la institución.

Un hombre de piel morena, como la mía, mantenía su brazo arriba, para que Jungkook notara su presencia. Jungkook fijó su vista en él, aquel sujeto trotó hasta su encuentro con el alfa, y conmigo considerando que estaba junto a él. Dejó el trote deteniéndose frente al azabache, no notando mi presencia, lo cual aproveché para escudriñarle, tenía sonrisa de labios cerrados y los hoyuelos que se formaban con esta. Su vestimenta no era tan casual a comparación nuestra, traía un abrigo negro, el cual no me permitía detallar el conjunto que llevaba debajo, pero considerando que vestía un pantalón holgado negro, unos zapatos de vestir, también negros, y su camisa color celeste, la cual tenía un estampado de rayas de azul un tono más oscuro, más el maletín que sostenía en su mano derecha. Indicaba que podría ser o bien un maestro o algún empleado de oficina de la institución. Lo único qué tal vez te haría dudar vendría a ser su cabello morado platinado.

—Señor Kim— dijo Jungkook con una voz bajita, realizando una pequeña reverencia, para luego mirarle de frente ¿tan difícil era hacer lo mismo conmigo?

—¿Vas a tu hogar?— cuestiona ensanchando su sonrisa— puedo llevarte si quieres— le propone, ladeando un poco su cabeza, señalando el estacionamiento, para luego ponerla recta de nuevo— Así más tarde no estarás tan cansado para ir a cenar.

Jungkook simplemente le observa, pude ver un pequeño brillo en sus ojos, pero sólo duró un momento, volteó mirándome de reojo, unos segundos, ante su acción el hombre de cabellera morada, frunce un poco el ceño girando en la misma dirección que Jungkook, topándose conmigo.

Sweetly bitter‎| KOOKV ‎| OmegaverseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora