Capítulo IV: El desertor

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Zuko estaba sentado frente a la ventana de su barco contemplando el sol ocultarse tras el horizonte, sus ojos podían estar fijos en el sol que descendía poco a poco hasta darle paso al anochecer pero sus manos estaban cerradas fuertemente en un puño, esa misma tarde, el almirante Zhao llegó a su barco con el mensaje de que estaba organizando una expedición al Polo Norte para capturar al Avatar el mismo y que planeaba llevarse a la tripulación del príncipe de la Nación del Fuego con él... ¡ese bastardo! ¿cómo podía atreverse a llevarse a toda su tripulación sin su consentimiento? Aún así, no había nada que pudiera hacer, la decisión de Zhao ya estaba tomada y ya les había informado a todos que lo acompañaran en su expedición, incluído el cocinero.

No pudo evitar sentir su sangre hervir por la rabia, así que intentó pensar en otra cosa para calmarse y sus pensamientos lo llevaron a la persona que estaba presente en sus sueños de noche y lo atormentaba durante el día, una persona que no podía tener, la persona a la que estaba destinado a capturar para recuperar su honor y esa persona era nada más y nada menos que el propio Avatar. Aang, ese niño de doce años lleno de vida y alegría, no podía creerlo, pero sí, había comenzado a desarrollar un fuerte enamoramiento hacia él, al principio pensó que solo estaba confundido y que eso no era posible, pero luego de que tuvieron su primer beso, se dio cuenta de que lo que le pasaba no era simple confusión, no estaba imaginando cosas, lo amaba, amaba a Aang, ya no tenía intenciones de capturarlo para ganar la aprobación y aceptación de su padre, quería capturar al Avatar pero esta vez lo tendría solo para él.

-Oh, Avatar...-suspiró Zuko mientras apoyaba su cabeza en una de sus manos sin desviar su mirada de la puesta de sol que poco a poco desaparecía; sin embargo, salió de sus pensamientos al escuchar que alguien golpeaba la puerta de metal de su habitación.

-Príncipe Zuko-la inconfundible voz de su tío, el general Iroh, sonó del otro lado de la puerta-solo vine a decirte que habrá un festival de la Nación del Fuego en una aldea no muy lejos de donde estamos atracados-Zuko no respondió, solo permaneció allí, sentado en su lugar escuchando lo que su tío tuviera que decirle-y me preguntaba si querías venir conmigo, los festivales de la Nación del Fuego locales son más entretenidos que los de la capital, bueno, no puedo decir que las hojuelas de fuego saben igual pero ya sabes a que me refiero-seguía sin obtener respuesta del adolescente-por favor, sobrino. Harás a un anciano muy feliz, sabes que no he ido a un festival de la Nación del Fuego desde que Lu Ten murió-el silencio invadió la atmósfera ya de por si tensa que había entre ellos-o si quieres puedes quedarte aquí, te dejaré en paz-

Zuko escuchó los pasos de su tío alejarse de su habitación, permaneció sentado en su lugar con sus manos aferradas fuertemente a la tela de su pantalón, cerró los ojos, respiró profundo y finalmente tomó una decisión.

-¡Tío, espera!-le dijo Zuko al anciano antes de que se alejara del corredor-yo creo... creo que iré contigo-

-¡Perfecto! gracias por aceptar esta invitación-le dijo Iroh-pero primero...- Zuko parpadeó sorprendido cuando su tío busco entre su túnica y le acercó una pequeña máscara-tienes que usar esto-

-¿Qué es eso?-preguntó Zuko mirando la máscara que su tío sostenía en su mano, la máscara estaba finamente elaborada, mucho mejor que las máscaras que alguien podía comprar en los festivales comunes, estaba hecha de porcelana fina, algunos detalles pintados decoraban la parte superior y portaba una expresión facial seria, Iroh también se había colocado una máscara alrededor de su cabeza.

-Todos deben usar una máscara en el festival, no puedes unirte si no llevas una.

-Está bien, lo haré-dijo Zuko tomando la máscara para luego cerrar la puerta de su habitación para poder cambiarse de ropa y colocarse esa máscara alrededor de su rostro.

Chang Ai [zukaang/ zuko x aang fanfic]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora