Capítulo 1

1.7K 307 268
                                    

— Voy a ser sincero contigo, Aisha

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


— Voy a ser sincero contigo, Aisha. Ésta relación no funciona ¡eres demasiado mojigata! ¡Por Dios! Llevamos un año y ni un tan solo beso me has permitido darte. ¡Te das cuenta porqué quiero terminar! — Gritó exaltado Jordán. Mi sexto novio. Creo. ¿No era el décimo? bueno ya no me acuerdo.

La verdad que no entendía que tiene de malo no darle un beso. Ni siquiera me daban ganas. Pero yo le quiero. Y eso basta.

Resople fastidiada.

— Jordancito no seas así, cuando me sienta preparada te daré muchísimos besos, ¡siii! ¡Entiéndeme por favor ! — Hice un puchero con mis manos juntas rogándole. Pestañee un par de veces, tratando de verme adorable. Mi tía decía que eso siempre funciona con los hombres.

Pero quizás, falle. Jordán arrugo la cara con molestia.

— ¡Cariño, no te has visto al espejo! ¡Es que no se trata solo de un simple beso! Mis amigos se han burlado de mi diciendo que si es una joven mi novia o una anciana. Con esa ropa que vistes cualquiera cree que eres una viejita — Renegó. Y dale con lo mismo.

¡Estoy harta! siempre es la misma excusa, que me visto como monja, que parezco la bruja del setenta y uno, que no me visto a la moda y bla bla bla...Es lo mismo que me dice cada exnovio. Solo por usar faldas que me quedan un poco abajo de la rodilla, blusas con colores fluorescentes y calcetines de colores. Lo sé, no es la mejor ropa pero a mi me gusta y me siento muy cómoda conmigo misma. Soy así y si alguien me va a querer, que sea por lo que soy.

— Vanesa, tenía razón — murmuró. Lo miré confundida. — Eres reacia abrir las piernas.

¡Maldición!

Lo fulmine, pueda ser que la sangrona de mi prima dijera eso de ella se puede esperar cualquier cosa.

— Será porque la tienes chiquita — Repuse con pesar. Jordan apretó la mandíbula parece que alguien se enojó. ¡Ups! — .Y sabes, creo que ahora estoy de acuerdo, terminamos.

Con un beso en el aire y una sonrisita plantada en mis labios, comenze a andar en dirección a la parada de autobús. Ya bastante tiempo había perdido con mi dichoso exnovio. Escucho unos impropios de su parte hacia mi persona, le dolió lo que dije a cualquier hombre le bajaría un kilo de autoestima. Tal vez así no hacen los arrogantes. Jordan, ¡maldito! así que lo que querías era bajarme los calzones. Desperdicie ¡un año en saldo! si, ¡diablos!compraba tantos paquetitos de llamadas para hablar con él. Ahora que lo pienso ese dinero me servirá para comprar la falda que vi donde Doña Matea. ¡Yeah! ¡Gracias Jordancito!.

Salto en un pie de alegría. La gente me ve como si estuviera loca. Los ignoró. Estoy feliz. Porque desde hace mucho tiempo me debía esto. La felicidad.

Jordan ¡ay ese miserable! Y pensar que cuando lo conocí tenía cara de no matar una hormiga. Pero bien dice el dicho los más humildes son los más brutos. Si así era. Le di un año de conocer mi extraordinaria personalidad. No cabe duda los hombres cada vez son más pendejos. Pero bien, yo soy demasiada mujer para esa rata de alcantarilla. Él se pierde de todo este monumento. Llego a la parada con la frente sudada, esta haciendo un sol que quema. Toco mi cara, esta caliente. Rebusco en mi bolso un pañuelo color rosa. Lo sacó con rapidez limpiándome la frente antes que pase el autobús. Echo un vistazo en los bancos dándome cuenta que literalmente todos están con las pupilas en mí. Bufó, rodando los ojos. Con la ropa que visto es común que no puedan despegar sus ojos. Pero algo que odio literalmente es que no puedan aceptar, que no todos, tenemos los mismos gustos. Que cada quien le gusta lo que quiera. Es un derecho con el que nacemos. Respiro con molestia subiendo al autobús. Pago el costo para llegar a mi "queridísima" casa. Tomo unos de los asientos de enfrente ya que no están largo el camino donde me bajo. Recuesto mi cabeza en la ventanilla admirando el paisaje que los brinda este nuevo día.

GaelaniaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora