Volver a Empezar [Reddie]

Capítulo 11

Todos ellos se detienen en el camino de entrada.

El polvo se arremolina a su alrededor, brillando bajo los rayos del sol que se asoman a través de los agujeros en las paredes. El lugar huele a humedad y podrido, como si el agua del pozo se hubiera infiltrado en los cimientos.

Eddie es el primero en seguir caminando, habiendo estado allí muchas veces antes. Escucha a los demás empezando a seguir su ejemplo.

La casa está en silencio. Casi antinaturalmente, como si algo hubiera estado esperando que se acercaran.

Eddie les hace un gesto para que lo sigan, ninguno de ellos tiene el valor para hablar y romper el silencio aún.

Se dirige directamente a la habitación donde está el pozo, sin pasar por las otras habitaciones. No estaba seguro de si deberían bajar allí todavía, si es que fueran a hacerlo, pero tampoco quería que el ataque sorpresa ocurriera de la nada. Si los llevaba a la fuente, tal vez Pennywise no trataría de jugar con ellos durante mucho tiempo.

Sabía que cuanto más anticiparan un ataque, más miedo tendrían. Sus nervios aumentaban continuamente a medida que caminaban por la casa.

Eddie entra en la habitación y se congela.

Aparentemente sin molestarse por ello, Richie y Bill continúan más allá de él.

—Whoa. ¿Este era el pozo?— Richie golpea los ladrillos sobrantes con su bate.

El pozo se había derrumbado sobre sí mismo. Solo quedaban un agujero y ladrillos.

Eddie lo mira boquiabierto. Esto no era posible. Había estado aquí varias veces antes y el pozo siempre había estado intacto. ¿Por qué Pennywise dañaría su propia senda?

Cuando Richie, arrastrando los pies, se acerca demasiado, el piso debajo de él cruje bruscamente en protesta y Bill rápidamente lo tira hacia atrás.

—T-ten cuidado. El piso está po-podrido.

Richie levanta las manos —Sí, está bien. Vamos a revisar las otras habitaciones ahora.

Salen de esa habitación y Eddie los sigue, con la mente todavía atiborrada de preguntas.

¿El payaso abandono la casa del pozo? ¿Fue porque Eddie había visitado demasiado?

Verifican todo el primer piso sin interrupciones y deciden subir al segundo. Bill se asegura de probar su peso en las escaleras primero antes de avanzar.

Eddie se dirige con cautela por el pasillo, pero puede ver que los hombros de Richie se relajan frente a él, el bate cae a un lado y ya no es levantado.

Eddie mira a Bill y ve la misma actitud tranquila. La casa ya no los asustaba. Nada estaba pasando.

Su vacilación se ha ido ahora; abren las pocas puertas que quedan. Eddie se asegura de señalar el punto débil en la madera para que no lo pisen. Lo único que encuentran es un viejo colchón abandonado, sucio y probablemente usado por las personas sin hogar varias veces al año. En el lugar solo hay poco más que algunos muebles olvidados.

Finalmente, investigan la última habitación.

Vacía.

Eso no estaba aquí.

Richie usa el bate para estirar los hombros, girándolo de lado a lado —No queda ni siquiera un okupa. ¿Deberíamos comprobar los Baldíos, entonces?

Bill asiente —Sí, t-tal vez podamos encontrar algo allí.— Sale de la habitación, Richie detrás de él.

Eddie comienza a seguirlos casi aturdido, pero luego oye una voz detrás de él —¿Eddie?