lover of mine // ashton irwin

nueve.

Maia.

Se hizo de noche y con mi madre decidimos volver a casa. Nos habíamos juntado en la casa de Camila y su novio, nos hicieron una cena muy rica y variada, pasamos un buen rato.
Al regresar, me tomé una ducha y dormí lo más temprano que pude ya que mañana iría a una de las primeras entrevistas, estaba algo nerviosa pero siempre con gotas de optimismo.

***

La primera entrevista no fue para nada mal, sentí un ambiente agradable y por suerte me pude desenvolver bastante bien. Para aflojar con mis pensamientos de si habré quedado o no, opté por ir a una cafetería de por ahí cerca para pedirme un café y unas tostadas.

Mientras tomaba mi café, empecé a leer detalladamente el mail de Franklin, en dónde me especificaba el nombre de cada empresa, y una me llamó la atención.

Red Desert Company.

Era la empresa de los tíos de Ashton. Me acuerdo patentemente que era de ellos y lo mucho que mi ex novio quería esa empresa. Con tal solo pensarlo, un cosquilleo recorrió todo mi cuerpo. Para mi suerte era la última empresa, ojalá que en el transcurso de estos días me llamen para otra empresa.

-¿Maia?-escuché una voz familiar al lado mío. Levanté la mirada y tragué saliva.

-Luke.-solté sin más ni menos.

-No puedo creer que estés aquí-sonrió de oreja a oreja dejando ver su dentadura perfecta.-¿Puedo sentarme aquí contigo?.

-Da igual, yo ya me iba.-me levanté de la silla pero Luke tomó de mi brazo.

-Maia, tenemos mucho de que hablar.
-susurró mientras me miraba fijamente-Por favor, tomemos algo y hablemos como adultos.

-Yo no tengo nada que hablar, las acciones ya hablaron por si solas.-me solté de su agarré para tomar mi cartera.

-Maia, hasta el día de hoy estoy buscando tu perdón. Nunca más supe de ti y eso me comía por dentro, me siento sucio y raro porque ya no somos amigos como antes.

-Las cosas cambian, Luke. Además yo no sé si me estás mintiendo, digo, ya que te sale muy bien.-dejé plata sobre la bandeja de tostadas y volví a mirar al rubio.-Por cierto, no le digas a tu amigo que volví, no quiero que sepa nada.-comencé a caminar pero me detuve al escuchar nuevamente su voz.

-Ya no somos amigos.-volteé a verlo
-Desde que te fuiste todo se volvió tenso entre nosotros y yo ya no soy el mismo con él, ya que por su culpa perdí a una amiga que yo quería muchísimo, de igual manera lo sigo haciendo.

-¿Qué pasa si no te creo?-solté cruzándome de brazos.

-Estás en todo tu derecho, pero yo también tengo derecho en demostrarte todo lo contrario.-corrió una de las sillas de la cafetería y habló-¿Aceptas un café con mucha crema y unos rolls de canela como en los viejos tiempos?-una sonrisa se me escapó y acepté.

Los rolls de canela de Queensland no se comparaban con los de Sydney, los de acá son los mejores y, después de ocho largos años, era de otro nivel volver a probarlos.

Luke me contó sobre su trabajo, había vuelto anoche de un viaje de negocios y le iba muy bien. También me contó de su familia y que ya no vive con ellos, yo también le conté sobre mi madre y lo que estamos atravesando juntas. Le expliqué sobre mi vuelta y el motivo del cual estoy aquí.

-De seguro vas a encontrar algo pronto y si necesitas ayuda, no dudes en hablarme.

-He bloqueado el número y las redes de todos aquí.-comenté mientras me reía.

-Bueno, quizás es hora de que me desbloquees, ¿no?-relamió sus labios y tomó de su café.

-Me tienes que convencer que es de verdad lo que me estás diciendo.