lover of mine // ashton irwin

doce.

Maia

El fin de semana pasó y no supe nada de Ashton desde el sábado. Hoy era Lunes y tenía que ir a la empresa Red Desert Company para mi anteúltima entrevista de trabajo.
Luego de desayunar, marché hacia el centro de Sydney en busca de ese puesto.

La empresa tenia un aire a donde yo antes ya trabajaba. Era un ambiente cálido y todos se llevaban muy bien entre sí, lo cual era un gran indicio.
La recepcionista de pelo negro me indicó a dónde tenía que dirigirme. Subí por el ascensor hasta el séptimo piso y me encontré con la oficina del tío de Ashton, John.

—¡ Maia !—exclamó con los brazos extendidos para luego abrazarme— Tanto tiempo sin saber de ti, ¿cómo estás?.

—Bien, de regreso.—sonreí.

—Me alegra mucho que hayas vuelto. Ven, siéntate.

Estuvimos hablando muy cómodamente de la empresa, mi trabajo y especialidades. John quedó muy sorprendido por todo lo que había logrado en este tiempo fuera de Sydney.

—Franklin me contó maravillas tuyas y Ashton también. Sé lo mucho que necesitas esto y aquí te vamos a ayudar, siempre fuimos familia.—sonrió de oreja a oreja.

—John, quiero ganarme este puesto por como soy y no por quién soy, o porque Ashton te suplicó.

—Él quiere ayudarte. Además, tu trabajo es de maravilla y quiero tenerte en mi empresa.—extiende su mano frente a mí
—¿Qué dices?.

Mire su mano y luego a él. Extendí la mía y dimos un apretón de manos acompañado por nuestras sonrisas.
Todo iba a marchar bien, o al menos eso pensaba. Ashton trabaja en otra empresa a unas largas cuadras de aquí, así que no me lo iba a cruzar.

John decidió mostrarme la empresa y todos los sitios con los respectivos trabajadores. Era una empresa de chocolate, lo cual me llamaba mucho la atención ya que nunca había estado en una. Me gusta lo nuevo.

Por último lugar nos dirigimos hacia lo que sería mi oficina. Era cómoda y minimalista. Simplemente estaba enamorada.

—Arrancas el miércoles, ¿de acuerdo?—asentí muy contenta y salimos de la oficina.

—¡ Sobrino !—el pelinegro saludó de la misma manera como lo hizo conmigo a Ashton—¿Te llegó el mail?—asintió y me miró—Bueno, tengo cosas que hacer. Hasta el miércoles, Maia.—John se fue dejándonos a solas a mí y a su sobrino.

—Así que arrancas el miércoles.—sonrío mientras se acercaba a mí, yo asentí—Y mañana es tu cumpleaños.—se posicionó frente a mí con las manos en sus bolsillos.

—Si, ha pasado muy rápido.—susurré—¿Cómo te sientes?—cambié de tema.

—Bien, mejor. Ahora comenzaré a trabajar y a despejarme un poco. Por cierto, ¿mañana haces algo? No malinterpretes, es en plan de amigos.—se enoje de hombros.

—Pero, ¿tú no trabajas en Lolopsi?—el negó con la cabeza.

—Se puede decir que hablé con Lolopsi, sabes que es mi colega y entendió que mi tío me necesita aquí. Por cierto, no me contestaste.

—O sea que hiciste todo esto para que estemos en el mismo lugar.—suspiré con frustración.

—No pensé que te molestaría tanto, además mi tío me lo estaba pidiendo hace unos meses. Es lo bueno de tener a tu tío como colega y a otro colega como amigo.—lo último hacia referencia a Lolopsi—Ahora, ¿haces algo mañana?.—volvió a insistir.

—Derek va a venir a mi casa.—mentí—Él es mi novio y va a preparar algo en casa.
—sonreí falsamente.

—Ah, de acuerdo. Espero que la pases bien.—soltó y se alejó de ahí para entrar a una de lo que suponía que era su oficina.