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El Reino Impuro se encontraba bastante lejos de su ubicación actual, por lo que decidieron volar en sus espadas, siendo cualquier otra vía demasiado lenta. Si bien cuenta con la desventaja de agotar su energía espiritual, para su nivel de cultivo actual no representa un gran problema. El transcurso del viaje fue tranquilo, entre juegos y bromas cortesía de Wei Ying. En algún momento del viaje alegó estar cansado y de alguna forma terminó compartiendo espada con Lan WangJi, para consternación de sus acompañantes.

Al llegar fueron recibidos nada menos que cordialmente por Nie HuaiSang, aunque observando el apuro y el aspecto de los llegados, ya asumía que había problemas. Suspiró internamente, prendiendo un incienso en su honor. Externamente solo mostró una pequeña sonrisa, dirigiéndose a Wei WuXian habló — Me imagino que algo ha pasado, ¿Qué puedo hacer por mis estimados?

A decir verdad, Nie HuaiSang guarda un cierto afecto por Wei WuXian, recordando con cariño la época antes de la Guerra con los Wen, cuando coincidieron en la Secta Lan para estudiar, fue un período corto de no más de unos meses, pero se divirtió como nunca antes, siendo que llevaba gran parte de su adolescencia allí. Siempre fue participe e incluso instigador de las travesuras de su Wei-Shixiong, estaba seguro que esos fueron los mejores años de su vida. Con su hermano vivo y Meng Yao lejos de escena.

Sin embargo, sabía que Wei WuXian era astuto y sus conjeturas eran peligrosamente acertadas. Tampoco olvida el susto que le dieron en la posada hace unos años. Wei WuXian le extendió el viejo y herrumbrado sable, al tiempo que decía — Seguramente sabes qué es esto.

Nie HuaiSang la tomó reconociéndola al instante, pero al examinarla con cuidado no supo determinar su origen — Pertenece a la Secta Nie, pero no es de nuestra Tumba de Espadas, ¿dónde la encontraron?

Jiang Cheng tomó la palabra — Estaba en la tumba de la bestia devoradora de cultivadores.

Wei WuXian continuó — Presumo que este devorador debe pertenecer a tu secta, ¿tienes parientes desaparecidos de casualidad?

Nie HuaiSang se cubrió la parte inferior de su rostro con su abanico — Oh ¿Quién no los tiene? Mi Clan siempre fue orgulloso y se ha enfrentado a muchas batallas, mis ancestros están diseminados aquí y allá.

— ¿Y qué me dices de tres? Tal vez hermanos.

La expresión de Nie HuaiSang se transformó en asombro, aunque gracias a su abanico solo se notó en su mirada. — Si lo dices así, de hecho, tenía tres primos, un poco mayores que mi hermano. No pude conocerlos ya que desaparecieron hace más de treinta años y nadie los volvió a ver.

Wei WuXian le respondió — Sería muy útil que nos contaras en qué circunstancias desaparecieron.

Nie HuaiSang suspiró — Bueno, yo era muy pequeño en ese entonces, por lo que todo lo que sé es lo que me contó mi hermano.

— Mis primos junto a unos 30 discípulos acordaron encontrarse con gente de la Secta Wen para pactar una alianza, ellos vivían más cerca que nosotros de Ciudad Sin Noche, así que solían tener muchos enfrentamientos con los Wen, sin embargo, se ofreció una alianza. — Suspiró — En ese tiempo mi padre no estuvo de acuerdo, así que solo fueron mis primos, pero jamás volvieron. Se exigieron explicaciones, pero simplemente alegaron que nunca llegaron al lugar citado, sin pruebas y sin testigos de la traición de los Wen no se pudo hacer nada. Desde entonces mi hermano les tuvo desconfianza. —El movimiento del abanico de Nie HuaiSang se detuvo y miró detenidamente al grupo — Ahora quisiera saber ¿Dónde encontraron ese sable?

Wei WuXian explicó — En un extenso cementerio de cultivadores, a varios kilómetros de XueYang. Es una fosa común abierta, donde probablemente tiraron los tres cuerpos y este sable. Seguramente el devora-cultivadores nació allí.

Restaurando LazosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora