La otra cara de la moneda

1. Nuevas caras

Narrador

Ya era tarde por aquella carretera, el Camaro azul de un joven pelirrojo destacaba entre el camino solitario el cual l, poco a poco se hacía más agonizante para el chico. Colt se dirigía a lo que desde ahora se convertía en un nuevo capitulo en su vida, después de ser aceptado en el internado universitario "Brawl Stars U" en BrawlTown tuvo que dejar atrás su hogar para ir a cumplir su nuevo sueño de convertirse en uno de los mejores Brawlers que pudiera haber en la gran ciudad pero algo en el le decía que solo diera la vuelta en la siguiente salida que le llevará hacia su pueblo natal ¿Y como no? El estar solo le aterraba, lejos de casa, de su madre y su molesta pero divertida hermana, el tan solo pensar en ellas dos solas le hacía querer dejar todo pero bien le dijo su madre "Es una oportunidad única, debes hacerlo" y así emprendió el camino tomando el viejo Camaro abandonado de su padre (el cual se había ido para darles una mejor vida) y se puso en marcha hacia la gran ciudad.

El camino fue tedioso pues 4 horas de viaje con solo unas papas fritas y una bebida de limón, no era su forma ideal de pasar su tarde, solo se alegró al ver por fin el frente de aquel internado en el cual se iba a alojar durante algún tiempo, sacó su carta de aceptación de la guantera y se dispuso a buscar un lugar donde estacionarse. Entró por la puerta principal, una señorita de no más de unos 30 años miraba fijamente una computadora mientras tecleaba ruidosa y rápidamente, al notar al chico pelirrojo le dio una mirada fría y desaprobatoria mientras volvía a teclear en su computadora.

- Buenas tardes, señorita vengo a...
- Los registros de cerraron hace 2 minutos - Dijo interrumpiendo al pelirrojo - Me temo que has perdido tu lugar aquí.
- No puede ser - Colt quedó en Shock ¿Que iba a hacer ahora?
- Si deseas aplicar para el siguiente año debes...
- ¡Vamos Rosa! - Interrumpio un hombre alto y moreno - No seas así con los chicos nuevos, no creo que su intensión fuera llegar tarde cierto... ¿Cuál es tu nombre?
- Colt, mi nombre es Colt - Decía con cierto desánimo el menor.
- Grandioso, soy el señor Bo y es un placer conocerte, la señorita aquí es Rosa - Dijo mientras la señalaba - Es toda una gruñona - le susurro al oído.
- Un placer - Dijo el pelirrojo con una cara desanimada.
- Anda Rosa, el chico tiene la ilusión de estudiar aquí, no le niegues eso.
- Muy bien - Dijo entre dientes.

Rosa registró a Colt en la base de datos de la escuela dándole de paso su horario, la llave de su dormitorio y el papeleo de bienvenida. El señor Bo lo escoltó a través del campus hacia su dormitorio.

- Es una lástima que no hayas llegado a la ceremonia de inaguración aunque supongo que te has salvado de la guerra con globos llenos de pintura, hablando de eso... Tengo que ir por el conserje ¡Bienvenido a Brawl Stars U! - El Sr. Bo se fue corriendo.

Y ahí se encontraba Colt, solo enfrente de su nuevo dormitorio el cual aún estaba cerrado y la puerta con un número de dormitorio " D 19 " y justo debajo un letrero personalizable que ya tenía grabado la leyenda "Habitación de:" y dos líneas por debajo, una de ellas ya tenía un nombre marcado con plumón azul que decía "Poco" adornado con una guitarra, le dio nula importancia y entró en el cuarto el cual tenía dos camas, un escritorio y un clóset en el cual ya habían varias cosas puestas.

Colt

"Será un nuevo comienzo" eso era lo que yo pensaba al principio pero considerándolo bien preferiría regresar a casa, si soy sincero conmigo mismo no creo que esté a la altura de este lugar, aparte de que he hecho mal las cosas desde el principio... Supongo que ya no hay vuelta de hoja solo esperar a que las cosas se den.

Traté de alejar mis pensamientos mientras iba por mis cosas al auto en el estacionamiento mientras ojeaba todo lo que pasará por mi vista, la cancha de fútbol, la conserjería, incluso una zona verde donde los árboles se veían entre una mezcla de tonos verdes, amarillos y un poco naranjas. A lo lejos pude notar una confrontación, un chico alto, musculoso y con un tupé cincuentero estaba molestando a otro un poco más bajo, parecía un esqueleto de color amarillo, el tipo más grande estaba amenazando al menor con su puño, no se que me poseyó en ese momento pero debía ayudar al chico esqueleto así que corrí hacia ellos.