Capitulo 3 "Juramento"

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Narrador

Dos mujeres apararecieron en la Mansión Carrow amabas atravezarón la reja sin ningun problema cuando tocaron la puerta salio un señor que ambas mujeres conocian muy bien y las dejo pasar las paso a la sala de estar y fue a llamar a los señores de la casa los cuales bajaron

-Narcissa ¿paso algo?- pregunto Severus mientrad su esposa se sentaba con elegancia en un sillón a observar a la hermana de Narcissa Malfoy, Bellatrix Lestrange la cual estaba observando todo impresionada por la elegancia de la Mansión Carrow
-Si,mi hijo,apesar del compromiso con su hija,no puedo evitar sentirme mal con el,con la misión que le puso el Señor Oscuro- dijo Narcissa Malfoy preocupada
-Yo no confio en el Cissy- dijo Bellatrix Lestrange ganandose una mirada de Anabelle Snape
-Pero el señor oscuro confia en el por lo tanto yo igual Bella- dijo Narcissa Malfoy
-Que necesitas Cissy y Bella deja eso,no te enseñaron a no tocar lo que no es tuyo- dijo Anabelle Snape hablando por primera vez y Bellatrix de mala gana lo dejo
-Quiero que ayuden a mi hijo,su misión es.....- no termino de decir por que rompio en llanto
-Si no deberias decirlo no lo digas Narcissa, por suerte se la misión de Draco- dijo Severus serio pero estaba pregunte por el chico que iba a ser su yerno muy pronto
-Por favor ayudenlo,apenas es un niño- dijo Narcissa
-Lo ayudaremos Cissy- dijo Anabelle parandose y acercandoce a consolar a su amiga
-Tienes nuestra palabra- dijo Severus serio y decidido
-No confio en el Cissy, que haga un juramengo increbrantable- dijo Bellatrix en ese momento Anabelle palidecio
-Lo haras Severus, eres la admiración de mi hijo, confia en ti y pronto seras su suegro-dijo Narcissa rogando
-No lo hara Cissy, no es lo suficiente estupido- dijo Bellatrix burlonamente
-Lo hare,prepara tu varita Bellatrix- dijo Severus con voz decidida y ganandose una mirada de miedo por parte de su esposa Anabelle
-Juras proteguer a Draco en su misión- dijo Bellatrix
-Lo juro- respondio Severus y salio una cuerda de la varita uniendo la mano de Narcissa y Severus
-Juras ayudarlo en su misión- volvio a decir Bellatrix
-Lo juro- volvio a responder Severus y salil otra cuerda
-Juras terminar la misión si Draco no puede hacerlo- dijl Narcissa antes de que su hermana siguiera,en ese momento Anabelle Snape se tuvo que sentar en el sillón para no desmayarse
-Lo juro- dijo Severus siguiendo con su voz firme
-Nos tenemos que ir Severus y Anabelle, nos esperan en la Mansión- dijo Narcissa Malfoy
-Esta bien Cissy- dijo Anabelle Snape
-Gracias por todo a los dos- dijo viendo al matrimonio sabiendo que no iban a dejar convertise en asecino a su hijo y salio junto con su hermana de la Mansión Carrow dejando al matrimonio impactado

-Debemos decirle a Dumbledore- dijo Severus a Anabelle
-Vayamos ahora mismo a decirle la esgupidez que hiciste- dijo Anabelle parandose furiosa y saliendo al jardin para dirijirse al colegio y hablar con el director y llegaron rapido y la cara del director era sorpresa.

-Anabelle ,Severus,que sucuede?- pregunto el director pero antes de que respindieran ambos se fijaron en la mano y Severus fue corriendo hacia el mientras Anabelle se sentaba en una silla del despacho.

Severus murmuraba encantamientos, señalando la muñeca de esa mano con su varita, mientras que su mano izquierda vaciaba un cáliz lleno de una poción dorada en la garganta de Dumbledore. Al cabo de unos momentos, las pestañas del director se sacudieron para abrirse.
- ¿Por qué? – dijo Severus, sin preámbulo - ¿Por qué se puso ese anillo? Lleva una maldición, seguramente ya lo sabía. ¿Por qué lo tocó?El anillo de Marvolo Gaunt yacía en el escritorio frente a Dumbledore. Estaba roto; la espada de Gryffindor estaba tendida junto a él.Dumbledore frunció el ceño.
- Fui… un tonto. Me vi profundamente tentado.....
- ¿Tentado a que?- Pregunto Anabelle Dumbledore no respondió.
- ¡Es un milagro que haya podido regresar! – Severus sonaba furioso – Ese anillo portaba una maldición de un poder extraordinario, contenerla es lo más que podemos hacer; he atrapado la maldición en su mano, por ahora…
Dumbledore levantó su mano, ennegrecida e inútil, y la examinó como si se tratara de una interesante antigüedad.
- Has hecho bien, Severus. ¿Cuánto tiempo crees que me queda Anabelle?El tono de Dumbledore era el de una conversación normal, podría haber estado preguntando por un informe del clima. Anabelle dudó un momento, antes de hablar.
-No sabría decirlo. Tal vez un año. No hay forma de contrarrestar un hechizo así para siempre. Eventualmente, se esparcirá. Es el tipo de maldición que crece con el tiempo.-Dumbledore sonrió. La noticia de que le quedaba menos de un año de vida no parecía importarle mucho.
- Soy muy afortunado, extremadamente afortunado de tenerte, Severus y a ti tambien Anabelle.
- ¡Si sólo me hubiese llamado un poco antes, hubiese podido hacer algo más, darle algo más de tiempo! – dijo Severus, furioso. Miró el anillo roto, y la espada
- ¿Creia que con romper el anillo se romperia la maldición?
- Algo así… estaba delirando, sin duda alguna…. – dijo Dumbledore. Con un gran esfuerzo se enderezó en la silla
– Bueno, en realidad, eso importará más adelante.Severus y Anabelle se quedaron completamente perplejos. Dumbledore sonrió.
- Me refiero al plan que Lord Voldemort tiene sobre mí, Su plan para conseguir que el pobre chico Malfoy me asesine.Severus se sentó en la silla que estaba a Anabelle su esposa, al otro lado del escritorio de Dumbledore.
- El Señor Oscuro no cree que Draco lo consiga. Esto es simplemente un castigo por las recientes faltas de Lucius. Una tortura lenta para los padres de Draco, mientras ven como este falla y paga el precio.- dijo Severus
-Su madre esta destrozada - dijo Anabelle.
- En otras palabras, el chico también está condenado por una sentencia de muerte, al igual que yo – dijo Dumbledore – Ahora, creo saber que el sucesor natural del trabajo, cuando Draco falle, eres tú Severus o tu Anabelle-.Hubo una pequeña pausa.
- Ese, según creo, es el plan del Señor Oscuro.-dijo Anabelle
- ¿Lord Voldemort predice que en un momento no muy lejano no necesitará un espía en Hogwarts?,Cree que la escuela pronto estará bajo su control, sí.- dijo Severus
-Y si realmente cayera bajo su control – dijo Dumbledore, casi, según parecía, al aire - ¿Tengo su palabra de que harán todo lo esté en sus manos para proteger a los estudiantes de Hogwarts?Severus y Anabelle afirmaron firmemente.- Bien. Ahora, tu primera prioridad es descubrir que es lo Draco trama. Un adolescente asustado es tan peligroso para el resto como para sí mismo. Ofrécele ayuda y guía, él aceptará, tú le agradas…
- … mucho menos desde que su padre perdió la confianza. Draco me culpa, cree que yo tomé el lugar de Lucius.- dijo Severus
-Esta espantado el chico,tu hijo reaccionaria igual Severus- dijo Anabelle claramente molesta
- De todas formas, intentalo. Me preocupo más por las posibles víctimas de cualquier ataque que se le ocurra al chico que por mí mismo. En último caso, por supuesto, sólo hay una cosa que hacer para salvarlo de la ira de Lord Voldemort.Severus alzó las cejas y su tono de voz era sardónico al preguntar:
- ¿Piensas dejar que Voldemort te mate?- pregunto Anabelle
-Por supuesto que no. Tú o Severus deben matarme.-Hubo un largo silencio, interrumpido sólo por un extraño ruido de algo rompiéndose. Fawkes, el fénix, masticaba un poco de cuttlebone.
- ¿Quiere que lo haga ahora? – preguntó Severus, con la voz cargada de ironía
- ¿O le doy algunos minutos para que componga su epitafio?- dijo Anabelle claramente molesta
- Oh, todavía no– respondió Dumbledore, sonriendo – Me atrevería a decir que el momento se presentará solo en el transcurso de los acontecimientos. Dado lo que ha ocurrido esta noche – indicó su mano calcinada – podemos estar seguros que pasará durante este año.
- Si no le importa morir – dijo Snape con rudeza - ¿Por qué no deja que Draco lo haga?
- El alma de ese chico aún no está tan dañada – dijo Dumbledore – no dejaré que se rompa por mi culpa.- Dijo Dumbledore-Aparte me entere esta mañana del compromiso con su hija y no creo que ustedes quieran que su hija se case con un asecino.
- ¿Y mi alma, Dumbledore? ¿Y la mía?- dijo Severus
- Tú eres el único que sabe si tu alma se dañará al ayudar a un viejo a evitar el dolor y la humillación – dijo Dumbledore – Te pido este gran favor a ti, Severus y si no llegas a tiempo a ti Anabelle, porque la muerte vendrá por mi con tanta certeza como los Chudley Cannons serán los últimos de la liga este año. Confieso que prefiero una salida rápida y sin dolor a la larga y caótica situación en la que me vería si, por ejemplo, Greyback está involucrado (¿Oí que Voldemort lo reclutó?) o la querida Bellatrix, a quien le gusta gusta jugar con su comida antes de comérsela.
Su tono de voz era ligero, pero sus ojos azules atravesaban a Severus al igual que tantas otras veces habían atravesado a Harry, como si pudieran ver el alma sobre la cual estaban discutiendo. Al fin, Severus y Anabelle volvieron a asentir con firmeza. Dumbledore pareció satisfecho.
- Gracias, Severus… y Anabelle


Lo se esta cortito
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HC

Siempre A Tu Lado { Draco Malfoy }Donde viven las historias. Descúbrelo ahora