Capitulo 10:Temores

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CAPITULO 10

Temores.

Lo cierto es que Naruto no había tenido tiempo de recriminarse por lo ocurrido con su hermana, sobrevivir en el Bosque de la Muerte no era tan terrible como se los había intentado hacer creer Anko... Era mucho peor.

Apenas había empezado la prueba cuando fueron atacados por un grupo de ninjas, lograron salir adelante a duras penas, pero después un terrible ataque lo separo de su equipo; cuando trataba de reencontrarse con sus compañeros fue atacado por una serpiente gigante y devorado por ella, por un instante casi se dio por vencido, pero el recuerdo de su familia, su inconclusa rivalidad con Sasuke y la indefinida situación con Hinata lo obligaron a librar la situación. Finalmente localizo a Sasuke y a Sakura, quienes estaban siendo atacados por un extraño ninja de la hierba; Naruto no estaba muy seguro de lo que les había pasado a sus amigos, pero debió ser muy grave para que su amigo decidera entregar tranquilamente su pergamino, esto indigno al Hyuuga, había crecido al lado de Sasuke y jamás lo creyó capaz de semejante acto de cobardía; furioso por el proceder de su compañero, Naruto se lanzo al ataque de ese extraño ninja.

En ese punto era cuando todo se le hacia confuso, recordó percibir algo extraño en ese sujeto, y después al saber a sus compañeros tan lastimados a causa de ese tipo se enfureció como hace mucho no lo hacia, recordó sentir como la furia lo dominaba y algo quemándole el interior, su vista se nublo y un creciente deseo de sangre le inundaba los sentidos, logro hacer retroceder a ese extraño ninja, pero en algún momento de la pelea había logrado sujetarlo de la garganta e inmovilizarlo, eso solo aumento la furia de Naruto, se sacudía con violencia intentando liberarse de su agresor, el cual lo miraba con fijeza, como si pudiera ver a través de él, y Naruto creyó que realmente podía al escuchar lo que este le dijo

–Así que tu eres el zorro de las nueve colas...– La sonrisa de aquel sujeto se acrecentó al notar la sorpresa del chico –¿Qué? ¿Sorprendido? Sé mucho de ti, Naruto, más de lo que tu mismo sabes...

–¡Me importa poco lo que crees que sepas!– Puso más énfasis en su intento por liberarse –¡En cuanto me suelte voy a destrozarte!– Se enfureció más al escuchar reír a ese sujeto

–No cabe duda de que eres su hijo... eres su vivo retrato– Hecho una sonora carcajada al ver la expresión de confusión en la cara del chico –Reconozco que el clan Hyuuga a hecho un gran trabajo criándote...

–¿A... A que te refieres?– El comentario le pareció extraño y la mirada de ese sujeto lo preocupaba. Sin embargo, el ninja de la hierba no se molesto en contestar, simplemente levanto la sudadera y camisa de Naruto dejando descubierto su estomago, lo ultimo que el ojiazul recordaba era la mano de ese siniestro ninja despidiendo un aterrador Chakra mismo que le impacto sobre el sello que mantenía aprisionado al Kyuubi en él, sintió un dolor agudo y como sus fuerzas lo abandonaban para finalmente caer en la inconciencia.

Hinata había crecido con un concepto del miedo que se había forjado debido a su timidez e inseguridad, esas eran facetas de su personalidad que le estorbaban pero que no podía eliminar, a menudo Neji se lo reprochaba y siempre le decía que era debido a su apego a su hermano y que estaba demasiado acostumbrada a depender de Naruto, ella sabia que en parte tenia razón, y aunque se esforzaba no podía evitar ser como era, aun así, había aprendido a salir adelante a pesar de sus miedos... Sin embargo, en esos momentos, Hinata Hyuuga esta convencida de que no había conocido el verdadero miedo hasta ese momento en que sus ojos contemplaron la crueldad de Sabaku No Gaara.

Ella y su equipo lo había hecho bastante bien, su Byakugan combinado con el olfato de Kiba y los insectos de Shino les habían ayudado a esquivar a todos los enemigos hasta asegurarse un blanco fácil, habían conseguido los dos pergaminos mucho antes de lo que ellos mismos habían pensado y podían dirigirse con calma a la torre que les habían indicado al iniciar el examen, sin embargo, cuando ya estaban en camino, detectaron una presencia y Kiba quiso ir a husmear, argumentando que no estaba mal eliminar un poco más de competencia, era evidente que el amante de los perros pensaba que se encontrarían con un equipo débil. Nada mas alejado de la realidad.

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