Nunca confió en nadie, siempre trato de dejar de lado el tema amoroso. Pero esa subasta cambió su vida para siempre.
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🥀Giyuutan o Gijiro
🥀Omegaverse
🥀Drama
🥀Traumas
🥀Romance
🥀Uzuzen
🔞⚠️Si no te gustan ese tipo de historias vete de aquí y...
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La piernas del omega eran masajeadas suavemente por el alfa azabache, ganándose ronroneos por parte del pelirrojo.
Giyu aplicaba varias lociones hidratantes para que la piel de su omega esté suave y delicada. Tanjiro era mimado después de tanto tiempo que creía que merecía morir en paz después de tanto tiempo.
-No es necesario que haga eso... puedo hacerlo yo solo-
-No, te dije que te iba a consentir y eso haré- respondió el azabache -Con esto está bien-
Tanjiro no dudo en ir hacia el mayor abrazandolo, ya era costumbre abrazarlo, después de dos meses de llegar con su nuevo amo era una regla que había puesto Giyu, lo cual no era del todo una regla, pero si era reconfortante.
-Mañana saldré, tengo que ir a trabajar, te dejaré con la correa en la columna, ¿estás de acuerdo?- dijo mientras correspondía al abrazo.
-Lo que usted quiera está bien para mi-
Giyu no dudó, tomó su rostro entre sus manos para besar a su omega, deleitandose del sabor del contrario. Se separó antes de que sus instintos salieran, Tanjiro aún sigue con el tratamiento que Shinobu le había puesto, por lo que aún no podía marcarlo, y mucho menos tener sexo, por ahora sólo eran mimos y besos. . . .
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-Giyuu~- llamaba una mujer omega de hebras castañas y ojos azules -Salgamos a comer ésta noche, yo invito-
El azabache suspiró frustrado, su compañera de oficina siempre trataba de ligar con él desde que llegó a la empresa, era demasiado insistente y cargosa, hasta el punto de mardarle fotos de ella en lencería o desnuda, pero siempre la terminaba regañando y mandando a la mierda, pero ni porque la terminaba insultando dejaba de insistir.
-Te he dicho que no, además ya te lo he repetido más de mil veces, no me gustas, sal de mi vista Stella-
La mujer infló sus mejillas algo finjido. Al acercarse un poco a él pudo percibir un aroma diferente en él, un aroma a omega.
-¿Acaso estas saliendo con alguien?- preguntó cambiando el puchero a un ceño fruncido.
Giyu sonrió maliciosamente, pensó que si le decía que sí dejaría de insistir, pero pensándolo mejor, decidió ocultar el secreto, no quería que supiera de la existencia de su ángel.
