Una vida sin amor

Capítulo XIV. De nuevo

Capítulo XIV. De nuevo
Habían transcurrido seis meses desde que Takafumi y Zen se habían confesado y ahora los dos eran muy felices estando con el otro.
Quieran demostrarse lo mucho que se amaban, todo el tiempo y en cualquier parte.
—Zen, por favor, deja de hacer esto. Es muy incómodo—decía un sonrojado Takafumi, que se encontraba sentado sobre las piernas de su amado. Lo incómodo era que… ¡estaban en un baño público! Era más que obvio que se sintiera así.
—¿en serio quieres que me detenga? ¿Justo cuando estás más excitado que nada?—preguntó con picardía. El peli azul solamente lo miró con odio y se acercó para darle un beso apasionado.
—te odio—susurró el peli azul con una mirada asesina.
—lo sé—respondió con una sonrisa y continuó con su labor.
***
—¿ya viste que Takafumi es feliz con Zen?—le dijo Saeki a un espectro que estaba a su lado, quien planeaba acosar a Takafumi.
—creo que tienes razón, buscaré a otro humano para alimentarme de su alma—dijo sin mucho interés.
—qué bueno que lo entendiste. Así es mejor. Takafumi ya es feliz con alguien más y debes dejarlo ir—dijo Saeki.
—ya lo entendí, ahora si me permites, iré a cazar algún humano para alimentarme de su alma. Adiós—murmuró sin darle importancia y se retiró del lugar.
—espero que por tu bien, Reiji, estés diciendo la verdad—dijo Saeki cuando el espectro se marchó.
—ojalá que ese idiota de Saeki se haya creído el teatro que le inventé. Espero que no se meta más en mis asuntos—dijo Reiji y se dirigió al mundo de los humanos—. Deseo poder verte, Takafumi Yokozawa—murmuró con ilusión.
Llegó al mundo de los humanos y ya estando ahí fue directamente a la casa del peli azul. Se quedó parado, mirando, hasta que ambos chicos entraron.
—¡maldito Kirishima! ¿Por qué tuviste que fijarte en MI Takafumi?—habló con odio—. Te juro que te arrepentirás. Haré lo necesario, pero tú desaparecerás de la vida de Takafumi para siempre—expresó con una sonrisa siniestra.
***
—¿no sientes algo extraño?—preguntó Takafumi a su pareja.
—¿cómo extraño?
—no lo sé, tuve la sensación de que alguien nos observaba—dijo con preocupación.
—tranquilo, seguro lo imaginaste—lo abrazó para que se calmara un poco.
—¿no será que aquel espectro quiere llevarse mi alma de nuevo?—expresó, asustado.
—¡sobre mi cadáver! No voy a permitir que ese desgraciado te ponga un dedo encima—habló con determinación y abrazó a su novio con posesión.
—¿en serio?—preguntó emocionado y con los ojos brillantes.
—claro, eres mi novio, y no voy a permitir que nadie te separe de mi lado—el peli azul simplemente sonrió y le dio un beso en los labios antes de abalanzarse sobre él.
—no dejaré que nadie se acerque a ti ni que vuelvan a lastimarte.
—gracias.
—no soporto ver cómo esos dos se aman. Tengo que apresurarme y separarlos lo más pronto posible. Pero ¿cómo haré eso?—se preguntó a sí mismo. De pronto, a su cabeza llegó una idea y su cara cambió completamente.
—ya sé lo que voy a hacer…