Sigo Siendo Tuya

Capitulo 4

4

Narrado Por Britanny

En la madrugada del día siete.

El líquido rojo bajaba por mis piernas. Me levanté de la cama y salí dispara hacía al baño. Sentía nauseas.

Una arcada salió de mi boca y luego, dos más hasta finalmente, terminar vomitando cuando observo mis piernas.

Era un asco lo que sucedía. Esto no era del todo normal.

Me limpie, intenté bañarme rápidamente y tomando telas rotas que yacían tiradas allí mismo, de mi reciente remera que el mismo me había regalado, y las envolví a mi única braga propia y limpia como creo yo que así lo hacían antes, en la época en la que mi abuela era joven

No dejaba de pensar en el vómito mientras me bañaba con rapidez.

No quiero estar embarazada pero yo sabía que podría tratarse de una posibilidad cercana dado a que él nunca se cuido. Porque a él no le importa.

Salí con la misma remera puesta, y camine a completas oscuras hacía mi cama. El espacio era chico: alguien estaba allí.

Esperanzada, con mis manos temblantes lo zamarreo levemente.

Gruñe y se remueve para el otro lado poniéndose de espaldas mías.

-Deja de joder Britanny, quédate quieta -su voz somnolienta ordena-

¿Quién podría ser?  Fui idiota al ilusionarme

Pero, me di cuenta de algo: Yo siquiera estaba acostada y él no lo notaba.

¿Estará usando su collar con la llave colgada en él?

Pasé mis dedos por su espalda, el suspiró entres sueños al deslizar mis dedos, con muecas,  ubico los lugares de su cuerpo hasta que caigo en la cuenta por sus cuervas que mis dedos se estaban desplazando por sus hombros. Seguí el camino hacia atrás y luego hacía arriba. Ningún fino elemento estaba allí. Pasé mis dedos alrededor del cuello de arriba y hacia abajo para asegurarme de estar segura de ello y así fue. Su collar no estaba allí.

¿Estará en sus pantalones? ¿Los estará usando?

No quiero averiguarlo como lo eh echo con el collar.

De rodillas, comienzo a palmear el piso con mis manos. Me arrastro por el con el menor de los ruidos. Si esto funciona, podré huir. Si esta mierda funciona, podré huir de él y de toda esta mierda. Si esto funciona, podré volver con mi madre.

Justo en ese momento, toco una tela gruesa. No era mía, yo no eh usado pantalones hace tiempo porque no duran mucho tiempo puestos y cuando él me quita la ropa, duele.

Eran sus pantalones los que estaban en el borde de la cama al lado de sus pies.

Lo tome y puse ver la silueta a pesar de las circunstancias. Vi lo suficiente para ubicar donde supuestamente estarían las llaves. Comencé con los bolsillos de adelante pero no estaban. Metí la mano en los bolsillos de atrás pero tampoco estaban allí.

Lo sacudí apenas y cerré mis ojos con fuerza cuando escuché el material duro sonar adentro de la tela. Me tomé un respiro preparándome para correr hacía el baño para fingir que eh tropezado o algo por el estilo pero él no despertó. El aire sale de mis pulmones liberando la tensión acumulada en mi interior.

Las llaves estaban ahí, no había duda pero, ¿Adonde? Metí mi mano en el bolsillo delantero y luego en el otro ahí fue cuando descubrí que su  bolsillo estaba roto y debajo de este, tenía otro pedazo de tela abajo.