25 -Quería saber si tu hamburguesa está rica.

454 35 11
                                    

                       -Ashton's view point- {Punto de vista de Ashton}

Volví con mis manos a su cintura y nos apegé más. Podías sentir como algunas gotas pesadas se colaban entre la estructura del puente y caían en nuestra espalda.

Brooke estaba siendo demasiado buena con esto. Cada vez me atrapaba más y más. Algo un poco raro en mí.

Se separó de mí lentamente y abrimos los ojos, al parecer ambos los habíamos cerrado mientras disfrutábamos el rumbo de éste error. Un error, sí. 

¿Por qué la besé? Ya ni siquiera lo recordaba. ¡Ah, sí! Para que se olvide de su ex.

¿Cómo podía aún acordarse de él cuando la usó? ¿Cuando solamente quería sexo con ella? Hey, no digo que éso esté mal. Está mal que él la haya dejado por otra chica más... voluptuosa.

Convengamos que si yo tuviera una novia que me dejara por un chico que la tenga más larga, de verdad que me enojaría con ella y no pensaría en ella ni en el más mínimo segundo. Aunque dudo encuentre alguno que la tenga más larga.

Me dispuse a hablar. -Perdón, yo no quise hacer-

Y ella nos volvió a juntar en otro beso. 

¿Qué-está-pasando?

Si alguien viera a un par de chicos encapuchados como nosotros abajo de un puente con toda esta lluvia seguramente pensaría que somos unos criminales. O que intercambiamos droga. 

Sí, claro. Intercambian saliva, no droga idiota. -dijo algo adentro mío.

Nuevamente cerré mis ojos como ella lo hacía y me dejé llevar. 

Aún la sostenía por su cintura, como si se fuera a escapar de mí, y la apegaba lo más que podía a mi cuerpo.

El agua estaba fría y no me hacía nada mal sentir el cálido cuerpo de Brooke contra el mío.

Pasé mi lengua por sus labios y ella sonrió, abriendo un poco más su boca. Sin dudarlo, mi lengua se puso a explorar la cavidad de la rara y atractiva chica.

Ella se separó segundos después con la respiración agitada, lo que me dió a entender que lo que la separó de mí fué la falta de aire.

Nuestros pechos subían y bajaban, y la lluvia cada vez se hacía más intensa.

-De verdad que és una buena forma de olvidarlo -susurró ella con una sonrisa. Yo se la devolví. 

-Hey, yo nunca decepciono -habló mi ego. Ella rió un poco fuerte-. Ahora... ¿cuál era ésa apuesta por la cual estabas tan emocionada? -curioseé. Ella dejó de reír para enfocarse en mí.

Vale decir que todavía ella tenía sus brazos alrededor de mi cuello y yo los míos en su cintura, aún dándonos un poco de calor bajo la intensa tormenta. 

-No me lo creerías si te lo digo -un rayo cayó cerca de los edificios de enfrente. Griffin se asustó y dió un pequeño salto abriendo sus ojos grandes, escondiendo su cara entre mi clavícula y mi cuello. Sonreí por eso.

-Tranquila -susurré. Ahora estaba un poco agitada por el susto.

Se separó de mí y me miró. Rió nerviosa.

-¿Cuál era la apuesta, Griff? -le miré a los ojos. Ella miró hacia abajo y se sonrojó. Debía admitir que verla con un tomate me daban ganas de hacerme una ensalada.

Ahre.

-Bueno, me da un poco de vergüenza decirte... -susurró mirándome de reojo y de nuevo al piso.

✺ 5 Seconds of Argentina ✺Donde viven las historias. Descúbrelo ahora