None Of My Bussines; ꜱᴇᴜʟʀᴇɴᴇ

Capítulo 4

"La llevas a casa con tu madre,

Pero créeme que eso no está en mi cabeza"

Tomo la acelga del mostrador de verduras del supermercado. He decidido cocinar una sopa de acelgas esta noche para cenar, así que he venido a comprar en donde vengo todos los días. El señor Martínez el dueño del lugar, es un extranjero bigotón que siempre está enojado y le gusta husmear asuntos ajenos, como siempre suele decir que soy su clienta más recurrente, me cuenta chismes cada vez que vengo.

Y aunque me gustaría ignorarlos, suelen ser muy interesantes.

El día ha transcurrido con normalidad. Asistí a la universidad y a la prueba para el equipo femenino, donde acepté a dos novatas nuevas que debo entrenar muy bien para así ganar la tercera competencia del año.

Al año, la universidad realiza cuatro competencias importantes entre distintos equipos, también se organizan partidos amistosos algunos meses pero no se suele darle tanta importancia. La siguiente competencia será dentro de dos meses, por eso, la institución está hecha un caos actualmente; porristas ensayando por todos lados, los equipos preparándose, alumnos intentando enfocarse en sus estudios y profesores echando humo de sus cabezas debido al estrés y a que casi nadie les presta atención en las clases.

— ¡Kang Seulgi!

Escucho una voz femenina chillona llamándome a mis espaldas que logro reconocer rápidamente, me doy vuelta para mirarla y como me lo imaginaba, una señora cuarentona me mira con una sonrisa de oreja a oreja y está lista para darme un abrazo.

— ¡Señora Bae! — la alegría en mi voz es notable en cuanto le devuelvo el saludo.

Bae Yang Mi es la madre de Joohyun y a pesar de que ahora no suelo verla tan seguido, siempre ha sido y va a ser como una segunda madre para mí. Desde que me conoció me ha tratado como si fuera su propia hija. Es amable, cariñosa y siempre cuenta chistes de los que te ríes pero de lo malos que son.

Cuando recién la conocí, creía que era una persona seria, reservada y tranquila, incluso llegaba a sentir miedo de estar a solas con ella. Pero después cenar con ella y Joohyun una noche, me di cuenta que es como una amiga o hermana mayor.

— ¿Cómo ha estado? —le pregunto sin quitar la sonrisa de mi rostro.

Ella da un suspiro exagerado mientras se toca el pecho pero luego vuelve a sonreírme.

—Te he extrañado, niña—dice—las cosas ya no son iguales en casa.

— ¿Cómo? —Pregunto confundida— ¿Ha pasado algo, Señora Bae?

Da otro suspiro exagerado y agarra con más fuerza el carrito de compras que lleva con ella. Está unos segundos en silencio como si estuviera pensando en si decirlo o no.

Observo como le han salido unas dos canas y su tintura rubia de cabello está desgastada, está un poco más regordeta y lleva un saco rojo que provoca que toda mi atención esté en ella.

—Cariño, no quiero preocuparte ¿Está bien? —me contesta en el mismo tono maternal que suele usar con sus hijas— Pero he estado muy preocupada con respeto a Joohyun.

Doy un paso hacia atrás confusa.

— ¿Por Joohyun?

—Si—asiente con la cabeza pensativa—Es esa chica con la que está saliendo.

Si estuviera bebiendo jugo seguro me hubiera atragantado al escucharla decir eso.

En los cuatro años en los que he salido con Hyun, la señora Bae nunca se refirió a mi persona como "esa", así que se me hace extraño oírla hablar de esa manera.