Ella es mía

Apartate

Draco

Si hay algo que más odio aparte de ver a Potter; es tener que trabajar con él.

Lo que me parece bastante irónico es que durante nuestros años en Hogwarts quisieran hacerme pasar solo a mí como el arrogante... Pero el que no conoce a Potter que lo compre.

Siempre buscando de llevar el control y el mando de las situaciones queriendo hacer sentir a los demás como inferiores de una manera indirecta, he conocido personas como él toda mi vida...

Les gusta fingir que no les gusta el poder, aunque en el fondo saben bien que si.

Y aquí me encuentro mirándolo hablar con Slow y sé bien que la única razón por la cual todavía no lo he matado es por Hermione. Y sé que él también lo presiente, si es tan inteligente cómo le gusta aparentar tuvo que haber captado mi indirecta.

Si mirada me encuentra y frunce el ceño para luego mirar otra vez a Slow.

"Sí, Potter... Yo conozco tú oscuro y cochino secretito."

Podría destruirlo en cuestión de minutos pero la razón por la cual no lo hago es porque se muy bien que la más afectada sería ella... Y lastimarla me haría igual a él...

Yo no soy igual a él, soy mejor... Siempre lo he sido y me vale una mierda lo que los demás digan. Si hay alguien que sabe bien la clase de persona que es el gran y magnífico Harry Potter soy yo.

-Señor, ya Bulstrode y los demás se fueron -Avisó Mane.

Yo asiento y él se va de nuevo.

-¿Para donde fueron? -Preguntó cara rajada parándose al otro extremo de la mesa.

-En la madrugada saldremos a apresar a todos -Dije sin levantar mis ojos del mapa.

No necesito verlo para saber que me está mirando con todo el odio que su cochino corazón me puede brindar.

-¿Así de simple?... ¡No seas ridículo! -La forma en que subió su tono de voz solo hizo que mis ganas de matarlo crezcan aún más.

-Pareces una vieja peleando por su pensión Potter, comprendo que tu departamento haga las cosas con mucha calma. El mío sin embargo se encarga de resolver lo que tú y los tuyos no pueden, estamos entrenados para acabar con un problema en menos de lo que canta un gallo -Le miro con furia- Y si yo digo que será en la madrugada, así será.

Sus cejas se alzan con amenaza y no podría estar más equivocado si piensa que va a intimidarme. Ni siquiera el gran Harry Potter tendría una oportunidad si peleara conmigo.

-¿Quieres decirme algo? Haz estado todo el rato viéndome, no te tengo miedo Malfoy -Me dice y sé perfectamente que dice la verdad, sé que no me tiene miedo; Pero yo a él tampoco así que me vale mierda.

-Para ser alguien que dice no tenerme miedo te importa mucho lo que diga -Respondo con petulancia- No se de que te quejas la verdad, como te dije antes sólo estoy haciéndote un favor.

Me mira con los ojos encerrados.

-Tú no sabes nada -Dice con poca seguridad.

Yo rio bajo y sin ganas.

-¿Del uno al diez que tan seguro estás?

-Más te vale que cierres la boca -Dice inclinándose sobre la mesa.

-Me importa una mierda lo que quieras -Le digo inclinándome también. Quiero que me provoque, un solo movimiento en falso y voy a quebrarle los dientes contra la mesa.

Sonríe con arrogancia- ¿Crees que podrías ganar puntos con ella? -Pregunta.

No hay manera de que él lo sepa, no debo mostrar debilidad.

-Todo el tiempo la estás cuidando, siempre lo hiciste ¿y de que te sirvió?. Se casó conmigo y es a mí a quién ama -Dijo con una seguridad aplastante.

Lo voy a matar... Juro que lo mataré.

Mis manos se cierran en puños.

-Se casó contigo porque no sabía la clase de escoria que eres, de cierta forma te hizo un favor... El pobre Harry Potter, buscando de encajar en una familia a la que no pertenece, sin nadie más que las personas que por lastima le brindaban su amistad -Le suelto alzando mi cabeza dejándole en claro que es más pequeño que yo.

-Ten cuidado con lo que dices Malfoy -Escupe apretando la mandíbula.

Siento la presencia de alguien a nuestro lado, pero no pienso quitarle la mirada de encima.

-Ten cuidado tú, no vaya a ser que por accidente se adelanten tus planes de divorcio... -Le digo en un susurro- Y no va a ser precisamente a causa de tu comadrejita.

-¡Eres un... -Me preparé para recibirlo pero alguien se interpuso entre nosotros empujándonos a ambos y armando distancia entre los dos.

-¡Ya está bueno ustedes dos! -Exclama Weasley. Ni me fijé en que momento había regresado de escoltar a Hermione- ¡No pueden estar peleándose a cada rato!.

-¡Es su culpa! -Exclama Potter.

Yo ruedo los ojos- Que maduro eres -Mi respuesta lo hace enojar pero Weasley lo detiene de nuevo.

-¡Basta Harry, esto es por Hermione recuérdalo! -Le grita con seriedad.

Potter lo mira y respira hondo para luego mirarme.

-Tienes razón, hay que terminar con esto -Su mirada brilla a través de los cristales- Así volveré pronto con mi esposa.

Se va de nuevo hacia el otro extremo de la habitación y Weasley me mira con para luego seguirlo.

"Si, Potter. Llénate la boca diciendo que es tu esposa mientras puedas."