Raito Sakamaki es un vampiro pervertido y sádico, sin ninguna pizca de bondad en él.
Para él, el amor es sexo y placer.
Yui Komori es una humana inocente y buena, la bondad reina en su corazón y alma.
Su concepto del amor es distinto al de Raito.
A...
Yui estaba en su cama, temblando por culpa del frío que perforada cada parte de su piel.
—¿Que hice para merecer esto Dios?— Era lo que se preguntaba a diario.
Hace tan solo unos minutos cierto rubio de ojos zafiro había tomado una gran cantidad de su sangre y ahora la chica estaba tan débil que tarde o temprano caería en brazos de Morfeo. Cerró los ojos por un momento y entonces los recuerdos la invadieron por completo...
FLASHBACK
—¿Papá?
—¿Qué ocurre mi pequeña Yui?
—¿Por qué la mariposa que atrapé no está volando?
—Tal vez está muerta pequeña— dijo agachándose a la altura de su hija.
La niñita empezó a llorar como lo haría cualquier niño que aún no conoce la muerte u otro hecho triste de tantos que hay en el mundo.
—Snif ¿Por qué se murió? Si la cuide muy bien...snif— dijo la pequeña entre sollozos.
—A lo mejor estaba triste porque ya no podía volar libremente, hija— le respondió el sacerdote limpiando sus lágrimas— Animales tan bellos como las mariposas, los pájaros, los conejos y muchos más...Están destinados a andar libremente por cualquier lugar del mundo y si los privamos de eso, es probable que mueran por la tristeza de ya no sentirse libres...
—¿Osea que murió por mi culpa, papá?
—No pequeña...Tú no sabías que eso le iba a pasar hija, y si quieres que nunca más se repita, deja que los animales silvestres sean libres en dónde tienen que estar.
—Está bien papá...
FIN DEL FLASHBACK
Ahora, Yui se sentía como aquella mariposa que atrapó años atrás...La gran diferencia que había entre ese insecto de alas multicolor y ella, era que a aquel no le chuparon la sangre sin piedad, ni le pusieron apodos horribles...en cambio a ella si...
—Papá...¿Por qué me trajiste aquí?— preguntó sin obtener respuesta alguna.
—Nfu~ Huele a tristeza por aquí~
—¿Ra-Raito?
—El mismo, Bitch-chan nfu~
—¿Necesitas algo?
—Si, tu sangre
En un segundo el castaño apareció en frente de la humana y clavó sus colmillos en su cuello rápidamente.
—¡AY! P-perdón...por eso...No volveré a ser así...Nunca...
—Nfu~ Te hiciste un poco más sumisa...Así me gustas más~ Nfu~
—Raito...— murmuró la rubia antes de desmayarse.
El vampiro sostuvo a su presa entre sus brazos y la acomodó en la cama para después mirarla detenidamente. A pesar de haber visto varias veces su rostro nunca se cansaba de aquello.
"Sin duda es una muñeca...Si Kanato la convierte en una, será la más bella de toda su colección...e iré a verla todas las noches..."
—Nfu~ Mejor buscó esa cruz y me voy antes de que despierte...
—Pff...Que lento eres pervertido— comentó un pelirrojo mostrando el objeto tan especial para Yui mientras sonreía victorioso.
—Nfu~ ¿Ayato?
— Ore-sama para tí
—Bueno lo conseguiste...Ahora vámonos...
-Pff si, claro vámonos...¿Eh?
—¿Por qué te detienes pelo de menstruación?
—¿Escuchaste eso?
—¿Que cosa?
...Mi voz...pequeño galán...
Justo detrás de los hermanos apareció un espectro horrible, el cual alguna vez fue la hija del señor de los demonios...y su propia madre.
—¿Co-Cordelia?
—HolaAyato...
—Tch...Maldita...
—Nfu~ ¿No te cansas de molestar verdad madre?—soltó el trillizo mayor sin ninguna pisca de amabilidad.
—Jajaja... Prepárense hijos míos...Mi despertar está cerca...y el cuerpo de esa humana será mío...Por los siglos de los siglos...
En ese instante aquella mujer desapareció y sus dos hijos no dijeron nada al respecto, por lo que optaron por salir de ahí rápidamente.
"No te saldrás con la tuya madre...No lo permitiré..."
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