𝓜𝓒𝓢𝓜 𝓛𝓾𝓴𝓮𝓼𝓼𝓮 𝓕𝓪𝓷𝓯𝓲𝓬 - 𝓘𝓯 𝓘 𝓭𝓮𝓬𝓲𝓭𝓮 𝓼𝓽𝓪𝔂...

【05】

ೃ࿐♡ೃ࿐♡ೃ࿐♡ೃ࿐♡ೃ࿐♡ೃ࿐♡

La temporada de lluvias y fríos intensos había llegado, envolviendo la Ciudad en un manto de melancolía y serenidad. Las calles, normalmente bulliciosas, ahora estaban teñidas de grises y azules, reflejando un cielo cargado de nubes que parecía suspirar con cada gota que caía. No había mejor momento para abrigarse con suaves bufandas, abrigos acogedores, y botas largas, y salir a disfrutar del ambiente con las amigas más queridas. En días como esos, los pequeños placeres se volvían esenciales, y el calor de una buena compañía se convertía en el refugio perfecto.

Jessica, Petra y Olivia estaban sentadas en la terraza de una elegante cafetería, donde la vista panorámica les permitía observar cómo la lluvia comenzaba a caer con suavidad sobre la ciudad. Las luces titilantes de los edificios lejanos danzaban en el horizonte, mientras la brisa fresca acariciaba sus rostros, recordándoles la fragilidad y la belleza del momento.

Una mesera, de sonrisa amable y voz suave, se acercó a ellas, portando una bandeja plateada con tazas de café humeante. —Sus cafés, señoritas —dijo con un tono cálido mientras colocaba cuidadosamente las tazas frente a cada una de ellas. El aroma embriagador del café recién hecho llenó el aire, creando un ambiente de confort y camaradería.

—En todo el mundo solo hay dos tipos de chicas, —comentó Jessica, rompiendo el silencio mientras señalaba con la mirada las tazas sobre la mesa, — las que toman café normal, y las que disfrutan de cafés con nombres absurdos y, a veces, difíciles de pronunciar.

Petra soltó una risita, tomando su taza con ambas manos para calentarlas. — Confirmo.

Olivia, fingiendo ofenderse, respondió: — Hey... no critiquen mi café macchiato. Además, ni siquiera es tan difícil de pronunciar.

— Para algunos lo es —,Bromeó Petra, lo que provocó una sonrisa cómplice en Jessica.

Las tres amigas bebieron de sus tazas, dejando que el cálido líquido recorriera sus cuerpos, disipando el frío y llenándolas de una sensación de bienestar. A veces, pensó Jessica, lo único que se necesita en la vida es una buena taza de café y la compañía de quienes te conocen mejor que nadie.

Petra, siempre directa, rompió el silencio de nuevo. — Y Jessica... ¿qué tal vas con tu relación con Lukas? —preguntó mientras giraba una pequeña cuchara en su taza para disolver el azúcar.

La pregunta hizo que Jessica se detuviera en seco. Su mente se llenó inmediatamente de imágenes de Lukas: sus ojos azules como el cielo, su cabello dorado que caía con una elegancia natural, su piel, su aroma... su todo. Sentía el calor subir por su pecho, y antes de poder evitarlo, una sonrisa delatadora se dibujó en su rostro, haciendo que Petra y Olivia estallaran en risas.

Hace un mes, Lukas y Jessica habían tenido su primera cita y compartido su primer beso. Desde entonces, habían decidido mantener su relación en secreto, disfrutando de la intimidad que les ofrecían las noches en aquel bosque solitario. Pero, mientras más tiempo pasaba, más difícil se hacía ocultar lo que sentían el uno por el otro.

— De acuerdo, les contaré todo —,dijo Jessica, con un rubor profundo que coloreaba sus mejillas mientras se preparaba para relatar lo ocurrido.

La noche del primer beso entre Lukas y Jessica era una que ella jamás olvidaría. Lukas la había mirado con esos ojos llenos de promesas no dichas, sus palabras resonando en su mente: — Te lo juro, Jessica. Nunca quiero presionarte ni molestarte, es solo que no quiero ocultarle al mundo que soy el novio de la mejor persona que jamás haya existido. —Era como si cada palabra que salía de sus labios estuviera diseñada para derretir las barreras que Jessica había construido a su alrededor.