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La noche se había asentado sobre la mansión Hall, susurrando secretos en el silencio estrellado. Los ecos de la cena en la que Lukas había sido invitado aún resonaban en el aire, mientras él, con una mezcla de nerviosismo y determinación, se encontraba en el jardín trasero. La luz de la luna bañaba el jardín, y el susurro de las flores enredadas en la reja de madera era como un canto de sirena que lo guiaba hacia el lugar donde su corazón deseaba estar.
— ¡Lukas! ¿Qué haces aquí? —Jessica exclamó en un susurro urgente, sus ojos verdes reflejando una mezcla de sorpresa y preocupación al ver a su novio bajo el balcón de su habitación. La reja de madera, adornada con flores blancas que parecían hablar de un amor secreto, era el único puente que los unía en ese momento.
— Voy a subir. —Lukas respondió con una voz suave pero decidida, mientras sus dedos se aferraban a la reja de madera con plantas y peonias rosas y blancas que se alzaban al balcón de Jessica. Su ascenso era cuidadoso pero firme, como si cada peldaño fuera una promesa de que no se detendría hasta estar a su lado.
— ¡No puedes subir! ¡Mis padres están abajo con toda mi familia! —La voz de Jessica era un susurro ansioso, lleno de la urgencia de mantener el mundo a su alrededor intacto. Sus manos temblaban ligeramente al mirar la reja y luego a Lukas.
— No te escucho, además, ya estoy subiendo. —Lukas continuó ascendiendo con una determinación que parecía desafiar la lógica. Cada flor en la reja se movía suavemente con el viento, como si fueran testigos silenciosos de su travesía hacia ella.
Jessica, en un estado de nerviosismo mezclado con emoción, se apresuró a preparar su habitación. Su mente estaba en un torbellino de pensamientos y sentimientos mientras despejaba el espacio y se arreglaba rápidamente. Cada movimiento era una mezcla de desesperación y cariño, de una niña que aún escondía sus peluches y una joven que deseaba mostrarse a su amado en toda su autenticidad.
Con un clic, cerró la puerta, asegurándose de que el refugio de sus emociones permaneciera a salvo.
— Hola. —Lukas se presentó con un saludo suave, su voz llena de una ternura que resonaba en el silencio de la habitación. Había llegado a través de la reja de madera, y su presencia era un recordatorio palpable de su amor.
Jessica giró hacia él, su corazón latiendo con una mezcla de alivio y emoción. — Pensé que ya te habías ido...
— Así era, pero no podía irme sin verte. —Lukas respondió, sus ojos llenos de una intensidad que parecía prometer una eternidad juntos. Su presencia en la habitación era un contraste a la rutina de su vida, un toque de lo inesperado y lo deseado.
Un silencio cálido se instaló entre ellos, un espacio lleno de miradas que hablaban más que las palabras. Sus ojos se encontraron y una sonrisa cálida se formó en sus labios, como si compartieran un secreto especial solo para ellos.
— Oye, ¿en serio aprendiste lo de sacar el aguijón de los niños exploradores? —Jessica intentó romper el hielo con una pregunta juguetona. La voz de Jessica era un susurro que buscaba alivio en el humor.
— La verdad no, solo quería una excusa para chuparte la mano en frente de todos. —Lukas bromista confesó, su sonrisa llena de sinceridad. — Lo aprendí de un tío.
Jessica rió suavemente, una risa que era como música en la quietud de la noche. — Hoy, gracias a ti y a tu familia, tuve un día increíble. —Su voz estaba cargada de gratitud y cariño. — Son una verdadera familia. Nunca había visto una de cerca. Son increíbles...
— Me alegra que lo pienses. —Lukas tomó una respiración profunda, como si el aire estuviera lleno de los sentimientos que no podía expresar completamente con palabras. — Nunca había conocido una familia como la tuya. Es como si hubieran construido un mundo entero de amor y calidez. Eso me hizo darme cuenta de cuánto me gustaría ser parte de eso.
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𝓜𝓒𝓢𝓜 𝓛𝓾𝓴𝓮𝓼𝓼𝓮 𝓕𝓪𝓷𝓯𝓲𝓬 - 𝓘𝓯 𝓘 𝓭𝓮𝓬𝓲𝓭𝓮 𝓼𝓽𝓪𝔂...
Hayran Kurgu❥ 𝓗𝓸𝔀 𝓬𝓪𝓷 𝓪 𝓱𝓮𝓪𝓻𝓽 𝓵𝓲𝓴𝓮 𝔂𝓸𝓾𝓻𝓼 𝓮𝓿𝓮𝓻 𝓵𝓸𝓿𝓮𝓭 𝓪 𝓱𝓮𝓪𝓻𝓽 𝓵𝓲𝓴𝓮 𝓶𝓲𝓷𝓮? 𝓗𝓸𝔀 𝓬𝓸𝓾𝓵𝓭 𝓪 𝓵𝓲𝓿𝓮 𝓫𝓮𝓯𝓸𝓻𝓮? 𝓗𝓸𝔀 𝓬𝓪𝓷 𝓘 𝓱𝓪𝓿𝓮 𝓫𝓮𝓮𝓷 𝓼𝓸 𝓫𝓵𝓲𝓷𝓭? 𝓨𝓸𝓾 𝓸𝓹𝓸𝓷𝓮𝓭 𝓶𝔂 𝓮𝔂𝓮𝓼.