Pole Dance | GrecoWay [SpainRP]

Capítulo Dos

¿Cuánto tiempo llevaba consciente? No mucho, quizás unos minutos, no lo sabe con exactitud, pues desde que recuperó la consciencia, con un dolor de cabeza cabe destacar, sólo ha estado mirando a la pared blanca, sentando en una camilla con sus manos sujetando las mantas que tenia encima, en total calma y silencio.

Estaba en el hospital, ha estado allí múltiples veces como para reconocerlo de inmediato, ademas, cables y demás vías estaban conectadas a él, surtiéndolo posiblemente de vitaminas o algún medicamento.

Ya quería irse de ahí.

Escuchó la puerta de la habitación abrirse, dirigió su mirada a la fémina que se hallaba ahí de pie, mirando con sorpresa como se encontraba despierto, sin demostrar comportamientos agresivos y raros, sólo estaba ahí, tranquilo.

— Oh, ya se encuentra consciente — dijo la chica, a lo que Rodríguez asintió suave, dando una pequeña sonrisa algo tímida.

La chica asintió saliendo de la habitación, de seguro iría a avisarle a algún doctor para que viniera a revisarlo y saber como se encontraba. Tardó un rato antes de que alguien más entrara por aquella puerta, y como era de esperarse, un hombre de bata blanca se adentro, acercándose a su persona para examinarle.

Lo que no se pensó fue el ver a Conway entrar detrás de él. Su rostro se veía igual de neutral como siempre, pero al castaño le gustaría pensar que estaba preocupado por él y por ende había entrado.

— Al fin despiertas — dijo con un tono divertido el doctor, acercándose para tomar sus signos vitales y demás revisiones con las que comprobaría su estado — Has pasado un día entero inconsciente, realmente estabas muy drogado cuando te trajeron aquí — comenzó a explicarle.

Greco asintió, escuchando atento mientras el doctor chequeaba su cuerpo tranquilamente.

— No pudimos hacer nada para quitarte la droga, así que tuvimos que esperar a que los efectos pasaran, pero como estabas inconsciente, fue todo más sencillo — una vez terminada su revisión, se alejó dando una pequeña sonrisa que se suponía le debía inspirar calma — Debió ser terrorífico haberse enfrentado a ser casi violado, ¿Te gustaría hablar al respecto?

— No fue terrorífico, mis compañeros estaban escuchando por la radio — dijo sin más, no se encontraba para nada afectado por ese suceso, primeramente el hombre no había llegado muy lejos, segundo, confiaba plenamente en que sus compañeros entrarían para ayudarle en algún momento, ellos no le dejarían ahí junto a un enfermo mental — Todo fue para atraparlo y supongo que ya se encuentra tras las rejas, ¿No?

Dirigió su mirada hacia el Superintendente, cuyo atuendo era el mismo de siempre.

— No debiste arriesgarte de aquella forma — esa fue su respuesta, llegando a confundir al Comisario en la camilla, sin entender a que venia todo eso si él solamente quería saber si el violador estaba en prisión o muerto.

— ¿Pero de que habla usted? — se removió en su lugar, repentinamente, el peso de la mirada de Jack Conway recaía en su persona, haciéndole sentir sofocado por la intensidad de esta.

— De tu desempeño en la misión — frunció el ceño — Fue un asco.

Y esa ha sido la señal para que el doctor abandonara la habitación rápidamente; no deseaba verse involucrado en aquella discusión. Por otro lado, Greco abrió su boca para aportar algo, pero de allí no salió nada; se sentía ofendido, no sabia que decir, no sabia como reaccionar ante la reprimenda que le estaba dando su jefe, ¿Un asco? ¡Se había esforzado hasta en intentar sacar información del sujeto! ¿Y él decía que era un asco? Increíble.