Una semana en otra dimensión. [KatsuDeku]

Cap. 4

Katsuki y Mikumo estaban en la enfermería, RecoberyGirl ya habia terminado de curar sus heridas y ahora estaban reposando en espera del permiso de la enfermera para poder volver a sus respectivas habitaciones.

—Oie, pelos de berenjena. —dijo Katsuki recostado en una de las camillas —¿Qué mierda le paso a mi copia barata?

—N-no lo sé. —mintió, obvio si lo sabia, su novio estaba celoso —¡G-gogo es así, a veces actúa de manera inexplicable!

—Entonces... soy un lunático que le lanza explosiones a las personas porque sí? —dijo con sarcasmo.

Mikumo no sabia que responder, si le confesaba a Katsuki que Gogo estaba celoso, él podría deducir que el actuar de Deku también eran celos, lo cual delataria a su otro yo y la verdad no quería lidiar con el llanto de Izuku por tal traición. Así que opto por desviar la conversación.

—Pensé que tú también le lanzabas explosiones a quien se te diera la gana.

—Solo cuando me hostigan o fastidian...

—No tienes mucha paciencia, ¿no?

—¿Qué es eso? ¿Se come? —bromeó el rubio y Mikumo sonrió.

—Ja-ja-ja muy gracioso. —contestó el pelimorado —Cambiando de tema, ¿pudieron averiguar algo de utilidad en la biblioteca?

No quería sonar algo emocionado, pero vamos, echaba de menos su dimensión y a sus amigos.

—Ah, sí. —respondió el rubio un poco sorprendido por el entusiasmo del menor —Encontramos un maldito libro pero no pudimos terminar de leerlo... La jodida bibliotecaria dice que no podemos sacarlo de la biblioteca, así que mañana volveremos y trataremos de encontrar una forman para regresarlos a su universo.

Mikumo suspiró algo decepcionado, quería volver cuanto antes a su hogar, no es que le molestara estar en este universo pero... Se sentia un poco fuera de lugar y no quería causarle más molestias a sus compañeros de esta dimensión.

—Oie, pelos de alga. —Mikumo miró a Katsuki sin tomarle importancia a su nuevo apodo —Cambia esa jodida cara, volverás a tu dimensión, lo prometo. —Katsuki lo miro decidido.

—Gracias Katsuki. —respondió el pecoso con una leve sonrisa, de algo estaba seguro Yami y es que si Gogo prometia algo lo cumplia, así que Katsuki también cumpliría su promesa.

—Ehh... ¿Interrumpo algo? —preguntó Kirishima, quien habia estado observando la escena hace un tiempo y debatiendose si intertumpir o no.

Los dos jóvenes voltearon a ver al pelirojo, no lo habian notado hasta ahora.

—Claro que no pelos de mierda.  —contestó el rubio.

—¿Qué necesitas Kirishima-kun?—preguntó el pelimorado.

—Yo nada, solo vine a avisarles que ya pueden salir de la enfermería... Ah, y Mikumo, Gogo te esta esperando en la salida. —informó el pelirrojo.

Yami se retiro rápidamente para ir donde su novio, algo malo le iba a pasar y el pecoso lo sabia.

Katsuki se quedo un momento con Kirishima.

—¿Cómo estas Katsubro?

—Tsk, que mierda te importa.

—Tomare eso como que estas bien.  ¡Felicidades por completar la misión bro! ¡me alegro porque lo lograran! —felicitó mostrando su dentadura puntiaguda y el pulgar en alto.

—Claro que lo logre, soy el mejor de toda la estúpida clase. ¡Ahora vamonos! — dijó el rubio saliendo de la enfermería seguido por el pelirrojo.