Démian © [#1]

10: La coronación

Capítulo 10: La coronación

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Agness.

Camino cabizbaja mientras Grace me sigue detrás.

—¿Por qué tardaron tanto?— mamá asoma la cabeza por la ventana del auto que está estacionado a la salida de la arena donde acabamos de presentarnos.

—Ah... — el nerviosismo en mi voz es evidente, no puedo decirles a mis padres la razón de mi tardanza—. Yo... Perdí la noción del tiempo mientras me duchaba, lo siento.

A mi lado Grace me mira con complicidad.

Me siento tan mal por lo que pasó.

Quiero decir, fue increíble, yo... Amé cada sensación que mi cuerpo y mi mente experimentaron mientras duró.

Pero no puedo evitar sentir un cargo de conciencia y algo de vergüenza por el descontrol que hubo.

Grace me dijo hace unos minutos:

«—No te sientas culpable, fue él quién te busco ¿No?»

Y si, en parte fue su culpa y cuando lo besé... Él no parecía molesto.

Pero no paro de pensar en que lo hizo porque le divierte verme perder el control y solo está jugando con mis sentimientos.

Él sabe que no tengo oportunidades con él y en realidad jamás las tendré.

Eso me está carcomiendo por dentro.

—De acuerdo, suban rápido, nos esperan en la escuela— responde mamá sacándome de mis pensamientos.

Cuando estamos por subir, una voz llama mi nombre, más bien, mi apellido.

—¡Hey, Jones!— giro sobre mi eje para encontrarme con Petter corriendo hacia mi.

Cuando llega, se toma un tiempo para calmar su respiración agitada y me sonríe.

—Te debo una cita— me recuerda.

Puedo ver de reojo la expresión de sorpresa de mis padres.

Rio con nerviosismo y lo tomo del brazo para que nos alejemos un poco.

—Te dije que ganaríamos, no debiste ser tan egocéntrico— le regaño.

Él gira sus ojos en un gesto divertido e ignora mi comentario.

—Tengo que devolverme a Grindford pronto ¿Puedes esta noche?— hace referencia a nuestra cita.

Mantengo mi sonrisa mientras pienso un rato en mi respuesta.

Esta noche es la coronación...

Da igual, de todas formas no asistiré.

Niego con la cabeza.

No, claro que iré, de todas maneras soy una maldita masoquista.

—Lo siento, esta noche es la coronación de nuestro alfa y mi amiga quiere que vaya— me excuso.

Mentira.

Grace si quiere que vaya, pero en realidad yo también quiero hacerlo.

Petter hace un puchero con su boca y cruza sus brazos.

—¿Mañana?— propongo.

El niega.

—No puedo, haremos turismo por aquí junto al equipo— anuncia, rasca su nuca y me mira directamente—. ¿El domingo?