Bienvenidos a Ciudad Corriente

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Bueno chicos aquí la continuación espero la disfruten adiós

Narra Sebas

Eran como las 6 de la mañana y los rayos del sol me pegaban en la cara, sin más nada que hacer  abrí mis ojos y noté que me había quedado dormido cerca del pequeño lago en donde me senté a reflexionar sobre lo que paso

Sebas: Diablos, no sé cómo regresar y tengo mucha hambre – me levante y saque a Charmeleon para que me acompañara – Charmeleon tenemos que ver como regresar al lugar de descanso y poder comer – el asintió y comenzamos a correr

Duramos unos 10 minutos corriendo por muchos caminos y atajos hasta que por fin llegamos a donde estábamos anoche

Sebas: Bien Charmeleon los chicos deben estar en donde la señora de ayer – el me miro – Acompáñame iremos juntos – le regale una sonrisa y el correspondió

Comenzamos a bajar la colina y se hizo más corto el camino que cuando subimos, mientras más caminaba me daba más hambre y ya no se cuanto más iba a aguantar. Después conseguimos un atajo y lo agarramos llegando rápido al lugar en donde vivían algunas personas y la señora de ayer.

Llegamos a la casa de la señora y tocamos la puerta, esperamos unos segundos y Sara abrió la puerta

Sara: Sebas por fin llegaste – hablo mientras me daba un abrazo

Sebas: Y que esperaban? – ella se separó y me miro con pequeñas lágrimas en sus ojos – No se van a librar tan fácil de mi – limpié sus lágrimas y le mostré una sonrisa

Freddy: Estábamos muy preocupados creímos que – no termino porque lo interrumpí

Sebas: Chicos pueden hacerme daño, pero nunca hare una locura, mientras más daño quieran hacerme más fuerte voy a volver – levante mi puño y ellos sonrieron

Aldeana: Bien dicho muchacho – ella me dio pequeñas palmadas en mi espalda – Ahora cambiando de tema, quieres comer? – antes de yo decir algo Charmeleon comenzó a gritar diciendo que si – Pues parece que ya tengo la respuesta, ya les traigo la comida – ella se dirigió a la cocina y yo me senté en la pequeña mesa de la sala

Aurimar: Hoy seguiremos con nuestro camino a la ciudad cierto? – todos voltearon a mirarme por mi respuesta

Sebas: Pues claro, debo ir a y conseguir mi séptima medalla y estar cada vez más cerca de la Liga Pokémon – luego de decir eso llego la señora con la comida – Muchas gracias, señora es muy amable – dicho eso saque a todos mis Pokémon y comenzamos a comer

Todos comimos súper rápido por toda el hambre que teníamos, y los chicos nos miraron asombrados por eso

Freddy: Vaya se ve que tenían mucha hambre – terminamos de comer y nos levantamos

Sebas: No lo creeigas – hable con la comida en mi boca

Sara: ¡Sebas! Primero debes tragar – dijo dándome un pequeño golpe en el brazo

Sebas: Lo siento, el hambre me gano – regrese a todos mis Pokémon y me acerque a los demás – Bien chicos listos para irnos? – pregunte colocándome mi mochila

Aurimar: Si ya es hora de irnos – todos llegamos a la puerta y la señora nos dijo algo

Aldeana: Chicos mucha suerte a todos, espero verlos luchando en la Liga Pokémon y en la Clase Maestra – nos habló con gran felicidad

Sebas: No dude de eso, ahí nos vera – nos despedimos y salimos para continuar con nuestro camino – Bueno hay que tomar este camino que está a la derecha y de ahí todo recto hasta salir a la siguiente ruta chicos – ellos asintieron y comenzamos a caminar

Mi Viaje PokémonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora