Capítulo 10

86 17 0
                                    


𝒞𝒶𝓅 10

Sin decir nada, tomó a Jungkook cargandolo al estilo princesa. Lo tapó con su abrigo, que apenas había sido tocado por el agua, y después corrió con él hasta su casa tan rápido como sus piernas se lo permitían. Mientras tanto, sentía el cuerpo opuesto temblar entre sus brazos.

Estaba cerca de llegar a su casa, cuando de un momento a otro el menor dejó de temblar, había perdido el conocimiento...

++++++++++++++++++++++++

Los ojos del empresario se abrieron poco a poco. Lo primero que llegó a sus fosas nasales fue olor a café recién preparado. Miró en todas direcciones, sin reconocer el lugar donde se encontraba. Se sentó en la cama, siendo su mente inundada por los recuerdos de una hora atrás cuando el pintor lo había cargado en sus brazos, corriendo así bajo la lluvia. Tocó su ropa, estaba completamente seca, al mirarla se dió cuenta que esa no era ropa suya, incluso desprendía el aroma varonil del pintor. Su piel tampoco olía al jabón que el solía usar, lo supo cuando acercó su mano a su rostro.Para comprobar olfateó un mechón de su cabello, y en efecto, olía a un shampoo distinto al suyo.

—Comenzaba a preocuparme, que bueno que despertó. —el pintor hizo su aparición, colocando dos tazas de café en la pequeña mesa de la habitación. —Tomelo, le hará bien algo caliente. —señaló la taza más cercana al opuesto y dió un sorbo a la otra.

—¿Por qué me trajo a su casa? —susurró, cabizbajo.

—¿Entonces debía dejarlo bajo la lluvia? Yo creo que no. —se sentó en la orilla de la cama y le extendió la taza con la bebida caliente.

Jeon aceptó el café, bebiendolo lentamente. Luego recordó la carta, y comenzó a buscar su ropa con la mirada por todos lados. —¿Mi ropa? —le preguntó con preocupación.

—Descuide, su ropa está bien; la lavé y ahora mismo se está secando. Por cierto, debería tener más cuidado, el papel es frágil. —le extendió la Carta doblada, que se encontraba arrugada debido a que había sido mojada. —La sequé de inmediato cuando la encontré en su saco, lamentablemente no pude hacer mucho con el sobre, se rompió una gran parte.

Jeon tomó la carta, mirándola lleno de dolor. Ahora que su tío le había revelado aquello, no sabía si quería leerla o no.

—¿No va a preguntarme por qué estaba así? —le cuestionó, con los ojos cristalizados.

El pintor negó. —Si quiere contarmelo voy a escucharlo.

Jungkook dudó un momento, nunca le había contado a nadie sobre su sueño de ser artista y las severas restricciones de su tío por eso. Sólo tres personas lo sabían, con él incluido, las otras dos eran su hermana y su propio tío. Sin embargo, decidió que contárselo al pintor sería tal vez lo mejor que podría hacer en esos momentos. Por lo tanto, lo hizo.

+++++++++++++++++++++

—Suzy, no pensaba verte hoy. —Seokjin le mostró una amable sonrisa, recibiendola.

—Sólo vine a dejarte claro algo; no pienso permitir que obligues a Jungkook a vivir una vida que no quiere. Lo hiciste conmigo, pero con él no podrás.

—Por favor Suzy, tú y yo sabemos que ese absurdo sueño de ser artista va a terminar destruyéndolo.

—Tío, deja tus inseguridades, quien está destruyendo la vida de mi hermano eres tú. —dijo, y salió azotando la puerta de su oficina, dejando al presidente bastante descolocado.

Seokjin, tiró con furia algunos papeles que tenía en su escritorio y jaló su cabello con desesperación. Las cosas se estaban saliendo de sus manos.

++++++++++++++++++++++++

—¿Por eso me dijiste que no sabías que hacer? —preguntó dulcemente, en un susurro, mientras sus dedos se deslizaban por la mejilla del empresario para secar las lágrimas que había derramado al contarle todo.

Jungkook asintió y cerró sus ojos, relajandose por sentir las caricias ajenas.

—Si yo estuviera en tú lugar leería la carta, yo ya tengo una conclusión al respecto y mis argumentos del porqué, a pesar de que sea doloroso, debes seguir tu sueño de ser artista. —sonrió, mirando los brillosos ojos del opuesto. Depositó un beso en su frente y se levantó de la cama. —Lee la carta, saca una conclusión por tí mismo, y sea cual sea tú decisión después, voy a apoyarte.

Se mi lienzo y yo seré el pincel.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora