Un papá para Sarada [+18] (Completa)

Prólogo

Cuando no te amas a ti misma no sabes distinguir el amor ni aunque te golpeara en la cara.
¿Quien en su sano juicio mendigaría amor? El amor nace, a veces a primera vista, a veces con el tiempo de convivencia, no se ruega, no se forza.

Eso era algo que no había aprendido. Era algo tonto el hecho de seguir amando a alguien que te ha demostrado desprecio. 

Esta era mi historia, luego de crecer enamorada de un chico que solo me mostraba desprecio, finalmente conseguí que me hiciera caso. Nos casamos y tuvimos una hija. Al principio todo parecía color de rosa. Yo había conseguido lo que tanto había querido, estar con ese hombre frío y distante. 

Un día él se fue y nos dejó a las dos por 12 años. El decía que volvería pero nunca escribió una carta ni trató de comunicarse conmigo. Me hice a la idea de que me había convertido en madre soltera y seguí con mi vida.

Yo no me consideraba una mujer muy bonita, siempre viví acomplejada por mi frente y mis pequeños pechos. Pero aún así habían hombres que al saber que Sasuke nos había dejado, empezaron a pretenderme. Me regalaban chocolates y flores. Me invitaban a salir pero yo nunca aceptaba.

De vez en cuando salía a cenar con mis amigos Naruto y Kakashi. Shizune me hacía el favor de cuidar a Sarada. Naruto de vez en cuando se iba de viaje y Kakashi veía por mi. Yo estaba deprimida, mi matrimonio no era cómo yo había imaginado.

Sarada iba creciendo y preguntaba por su padre. Mis lágrimas bajaban por mis mejillas y siempre cambiaba de tema. Kakashi siempre iba a mi casa a visitarme y a ver a Sarada. Un día sin querer ella lo llamó papá. Los dos nos miramos a los ojos.
¿Era tiempo de buscar un nuevo papá para Sarada?