Me levanto pesadamente del piso del baño, me he quedado dormida toda la noche ahí. Con pesadez me cambio de ropa, paso mis dedos sobre mi cabello para peinarlo un poco, la verdad no me interesa en estos momentos mi imagen.
Salgo de mi casa rápidamente para dirigirme al colegio, no veo a nadie en el portal, Lionel no ha venido por mí.Eso era obvio, después de haber conseguido lo que quería para que más soportar esto conmigo. Camino lentamente hacia el colegio, sin fijar quien o que está a mí alrededor.
Veo a miles de estudiantes entrar, todos sonriendo y algunos se sorprenden por mi aspecto, llegó a mi casillero en medio de todas las miradas en mí, lo abro y busco mi libro de historia. Lo encuentro, lo guardo en mi bolsa y cuando estoy a punto de irme alguien me agarra del brazo, es Ruggero.
-¿Qué quieres?.- pregunto de mala gana.
-¿Qué te pasa?:- suelta a la defensiva.
-Nada deja de molestarme...
-Karol, ¿Cuándo he dejado de hacerlo?.- responde arrogante-. Ya dime en verdad, ¿Qué pasa contigo?
-Nada, deja de joderme Ruggero, ya basta.- me suelto de su agarre, pero el muy idiota junta su cuerpo con el mío contra los casilleros, fija su mirada en mis labios y se relame los suyos-. ¡Suéltame!.- le grito frente a frente, el suelta una carcajada.
-No sé por qué Karol, pero esa ropa te queda hecha un asco.- dice molestándome-. Pero aun así, me pones tan duro nena.
-Aléjate de mí, todos te están viendo.
-¿Y? ¿Acaso tienes miedo de que Lionel nos vea? A él no le interesas.- interviene cabreado, yo lo miro y le frunzo el ceño, como odio a este tipo.
-Eso ya lo sé.- murmuro seria, el abre los ojos sin creérselo.
-¿Cómo lo sabes?
-Gano la apuesta, ¿No es así?.- veo como su mirada se opaca y se centra en mis palabras.
-Karol, no se de lo que hablas.-me suelta.
-Claro que lo sabes, espero que en la próxima tengas más suerte y ganes.- dicho esto me logro soltar de su agarre, el me detiene de nuevo.
-Karol, déjame explicártelo, yo... yo trate de...
-¡Déjame en paz de una vez! Si tanto quieres acostarte conmigo, entonces hazlo, pero déjame en paz, déjame ser feliz. No sé qué tanta obsesión tienes conmigo, no soy nadie Ruggero, soy una zorra, una puta, una estúpida, no sirvo para nada ¡Tú mismo no me dejas olvidarlo! ¡Déjame en paz!- y sin continuar más mis lágrimas se descontrolan de nuevo, mi llanto se hace fuerte y chillón.
Ruggero me mira tratando de descifrar qué es lo que siento, sacudo mis brazos para soltarme de su agarre por fin lo logró completamente y corro hacia los baños, lo que menos quiero es armar un espectáculo.Entro al baño y me siento en una de sus casillas, lloro en silencio, cubro mi boca para que mis gritos de dolor no salgan, mientras mis manos cubren mi boca veo algo extraño, mi suéter tiene una gran mancha roja en la muñeca; sangre.¿Cómo no me di cuenta?Maldito Ruggero, él tiene la culpa al haberme agarrado tan fuerte.
Veo mi muñeca sangrar con abundancia, mi vista se nubla y escuchó una voz lejana buscándome, me fijo que es Ruggero quien ha venido a buscarme, musito un par de cosas, que ni yo mismo entiendo y caigo en los brazos de Ruggero sintiendo mi sangre aun correr abundante.
(***)
-¡Demonios! ¡Necesito verla!.- grita una voz masculina en mis sueños-. ¡Usted no lo entiende, tengo que saber si está bien!.
-Entienda, no podemos, está muy grave, tiene que descansar.- dice la enfermera tratando de excusarse.
-Pero si acabo de ver a su madre salir de aquí... por favor.- ruega entrecortadamente-. Gracias.- de repente murmura.
Siento que alguien se acerca a mí, toma un banco y lo coloca a mi lado, suspira y empieza a hablar.
-Karol... Karol...- empieza a llamarme-. Mierda Karol, ¿Por qué lo hiciste?-Es Ruggero, lo escucho claramente, pero según el aun yo sigo dormida.-Por favor despierta, vamos.- gruñe algo frustrado-. La enfermera dice que te cortaste profundamente con algo, casi tocas una vena, dicen que si lo hubieras hecho, estarías muerta.- dios mío, en serio le interesa-. Karol, perdón.- suelta de repente, sin ningún aviso, esto es mucho para mí ¡Ruggero Pasquarelli está pidiéndome perdón! Ni en un millón de años lo aceptaría-. Soy un idiota.- en algo él tiene razón-. Perdón, perdón Karol soy tan imbécil que no me di cuenta del daño que te hacía.-Las palabras de Ruggero me dejan anonada, quiero despertar y decirle sus verdades, y que se las meta por el culo; imbécil, pero mejor me aguanto, quiero ver que más tiene para decirme. Espero unos minutos pero él no se digna a decir ninguna palabra, empiezo a quedarme en realidad dormida, hasta cuando escucho su voz.-Sé que no me escuchas pero... necesitaba decirte lo que siento... lo que siento por ti Karol Sevilla, dios Karol, te quiero, te quiero demasiado, mierda Karol cuando te empecé a ver con Lionel quería molerlo a golpes, quería dejarlo en silla de ruedas por acercarse a ti, se supone que eres solo mía.-Lo que dice me hace suspirar, literalmente, jamás hubiera creído que Ruggero estuviera enamorado de mí. Después de todos sus insultos, resulto; que le gustaba.-Trate de alejarlo lo más que pude, pero, el muy cabron no me hacía caso, me dice que quería demostrar que tan puta eres. E hicimos una apuesta, solo quería demostrarle que no lo harías y que se diera por vencido, pero no fue así, te lo tiraste.- continua vulgarmente-. Eso me cabreó demasiado y todavía más saber que era tu primera vez y que la perdiste con el, jamás pensé que eras virgen, Karol eres hermosa, eres lista y tienes algo especial que no sé qué es, pero me vuelve loco.- suspira y toma mi mano-. Te amo Karol Sevilla.- sus manos acarician toda mi mano, besa mis nudillos, toma mi rostro entre sus dedos y besa delicadamente mi nariz, haciendo que mi cuerpo de un pequeño saltito al tacto, él lo nota y ríe-. ¿Qué tenía el que yo no tuviera? sé que soy un idiota pero... en verdad estoy loco por ti Karol, desde el octavo año, solo quería que los dos tuviéramos una noche juntos. Que hiciéramos el amor, y que mágicamente borraras de tu mente cada mala idea que tuvieras de mí, pero no fue así... soy demasiado torpe y te perdí, estas enamorada perdidamente de Lionel y sé que jamás lo estarás de mí, sé que todo se acabó, te he hecho demasiado daño, sé que es imposible que me perdones, pero... solo quiero que te cuides, que cuides de ti, porque no soportaría perderte, no soportaría ver una vez más que te lastimas. Aunque estés con él, aunque ames a ese pendejo, yo siempre estaré enamorado de ti Karol, pase lo que pase, digas lo que digas, siempre te amare como el imbécil que soy.Y sin decir más, Ruggero se acerca a mí y me besa con cuidado los labios, acaricia cada parte de ellos, detallándolos con sus dedos, me besa, una y otra vez.Y al final , sin decir nada más se va.
Nuevo capítulo! Espero y les guste ♥️
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Un beso grande.❤️
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Se dice de mí|Ruggarol|Adaptada
FanficTodo comenzó aquella noche, hace dos meses, aquella fiesta que arruino mi vida, aquel rumor que daño mi autoestima, aquel chico que lo invento y me destruyo. -Ruggero, déjame.- Pedí con angustia al sentir sus cálidas manos al alrededor de mi cintura...