Be Brave |Larry Stylinson|

Capítulo 15.

—¡Louis, ven!—el ojiazul se levanta de su lugar y sin desproteger su espalda corre hacia a Harry, el ojiverde besa su frente cuando lo tiene cerca de él y lo empuja hacia un costado logrando que el castaño ya no fuera un blanco, Louis comienza a disparar para cubrir a Harry y esta vez el ojiverde se mueve para quedar detrás de la pared—vamos, vamos.

Ambos se mueven por el pasillo como pueden, Harry no paraba de soltar quejidos de dolor y Louis sentía sus oídos zumbar por lo cual no lograba escucharlo.

Las puertas de la Casa Blanca se abren de par en par y múltiples agentes, policías y soldados entran armados, Caleb corre antes de que lo atraparan, saca su radio y habla a través de él.

Dylan toma una radio del suelo y la activa, nunca estaba demás tener una para saber lo que ocurría y necesitaba saber si habían más terroristas.

—“¡Scott, activa las bombas! Pone la cuenta regresiva en 10 minutos”

10 minutos.

—¡Hay que evacuar, muévanse, saquen a toda la gente de aquí!— todos siguen las órdenes de inmediato y Dylan aprovecha de revisar el perímetro con la mirada, no estaba Harry ahí.

O'Brien se acerca a ayudar a un civil y ayuda en el proceso de evacuación.

—No escuchaba nada— Louis voltea a ver a Harry y este disimula lo jodido que estaba, le da una pequeña sonrisa sin mostrar los dientes porque sabía que tenía sangre dentro de su boca.

9 minutos.

—Dios, tu rostro... Tengo que llevarte a un hospital— la preocupación invade las facciones del ojiazul y siente ganas de llorar al ver a Harry de esa forma, el ojiverde suplicaba que no se diera cuenta de su abdomen, ambos comienzan a bajar la escalera de emergencias, ahora si podían usar los túneles.

8 minutos.

Cuando llegan al subterráneo logran sentirse un poco más aliviados, Harry traga y lame sus labios antes de besar la frente de Louis.

No podía rendirse, aún no salían de ahí y tenía que estar preparado para cualquier situación.

7 minutos.

—Ve a abrir la reja del túnel, voy detrás de ti, me aseguraré de que no venga nadie— Louis asiente y trota para ir a abrir la reja, Harry aprovecha de tomar un respiro, le estaba costando fingir.

6 minutos.

El ojiverde avanza con lentitud e intenta concentrarse en su respiración para no tomarle importancia a los pinchazos de dolor que sentía en el cuerpo. 

Lo toman por el hombro y lo voltean para darle un puñetazo en el rostro que lo hace caer al suelo, Louis se queda estático al escuchar tan fuerte caída y corre de vuelta mientras veía si tenía su arma cargada, no le quedaban balas.

Cuándo se asoma ve a Harry sentado en el suelo, el rizado tenía una expresión fría en su rostro mientras no apartaba la mirada de la persona frente a él.

El chico que lo había golpeado le estaba dando la espalda, iba a salir, si lo tomaba desprevenido podía atacarlo por la espalda y con su cuchillo... No tenía su cuchillo.

Harry posa sus ojos sobre él y niega, no quería que se acercara.

5 minutos.

—Repite mi nombre Styles, Caleb Johnsons, serán tus últimas palabras.

Louis da un paso fuera de la oscuridad y en ese momento es dónde el rostro de Harry muestra temor.

—¡Louis corre, estaré bien!— Caleb voltea a ver a el ojiazul y una retorcida sonrisa se forma en sus labios.

—Bueno, supongo que primero verás morir a tu novio y luego morirás tú.

Caleb comienza a caminar hacia Louis y Harry se levanta del suelo con dificultad, teniendo su mano herida, estando encorvado y con su pulso como la mierda logra darle en el muslo, era su última bala, había olvidado contar los disparos.

Tampoco tenía su cuchillo consigo mismo, lo había dejado en el cuerpo inerte de Aiden, lo único que le quedaba era una granada.

4 minutos.

El chico cae al suelo y Harry posa sus ojos sobre Louis.

—¡Por favor vete! Prometo ir detrás de ti— las lágrimas bajaban por las mejillas de Louis, no quería dejarlo — me quedan balas Louis, estaré bien, agarra ventaja — Harry ya estaba rogándole, necesitaba que Louis se fuera.

—¿Lo prometes?— el ojiazul alza la voz.

—Lo prometo.

—Te amo— logra decir entre lágrimas y ve a Harry sonreír.

—Y yo te amo a tí, ahora sé valiente y vete— Louis asiente y comienza a correr por los túneles, su respiración estaba agitada y su vista borrosa, el recorrido se le estaba haciendo eterno y sus piernas estaban comenzando a fallarles.

3 minutos.

Lo único malo de los túneles era lo infinitos que podían llegar a ser, destraba la puerta de metal y la abre de un portazo, la luz ciega sus ojos y cae de rodillas al suelo, la pesada puerta de metal se cierra de un portazo detrás de sí.

2 minutos.

Se abraza a sí mismo y llora con fuerza.

1 minuto.

Espera con paciencia a que Harry saliera por esa puerta, pasan los minutos y nada sucede.

Boom.

El sonido de una fuerte explosión logra descolocarlo y se levanta del suelo, sale del callejón y a lo lejos ve una gran cantidad de humo.

Era la Casa Blanca.

Louis comienza a correr, la cantidad de cuadras se le hacían eternas, esquivaba a la gente como podía, estaba desesperado.

Cuando logra ver bien lo que estaba sucediendo siente su mundo derrumbarse, el edificio estaba en llamas e irreconocible.

Se acerca aún más y fija la mirada en la gente que estaba en las ambulancias siendo atendida por los paramédicos.

Harry debería estar ahí, si no salió por los túneles debió salir por la puerta principal, el ojiazul se convencía de que vería a el rostro de Harry entre toda la multitud.

No lo encontraba.

Logra reconocer al Agente Malik entre todo el disturbio y se acerca a él.

Cuando Zayn pone sus ojos sobre él siente un alivio impresionante.

—¡Louis! Estás bien— murmura viendo el rostro de el castaño, no tenía ningún rasguño, pone su mirada alrededor de Louis y frunce su ceño— ¿Harry no está contigo?

Louis siente todo su mundo detenerse.

Harry no salió por los túneles, Harry no salió por la puerta principal, Harry no estaba ahí porque no lo logró.

Unos brazos envuelven el cuerpo de el ojiazul y este los reconoce a el instante, su padre estaba reconfortandolo y besando su cabello mientras Louis rompía en un llanto desgarrador.

Si tan solo hubiera esperado un par de minutos más en la sala principal, los agentes los hubieran ayudado.

Si tan solo se hubiera quedado con Harry en vez de haberle hecho caso, quizás él estaría todavía con él.

Harry sería el que estuviera reconfortandolo y besando su cabello mientras le decía que todo iba a estar bien.

Harry nunca había roto una promesa, ese día fué la primera y última vez que lo hacía.

Harry.