Eunhae/Haehyuk One Shots

Bajarte la luna y las estrellas.

-¡Promesas rotas! ¡Promesas que no cumpliste! ¡Todo lo que hicimos juntos! No lo puedo creér, de verdad que no puedo creér que todo se haya ido a la mierda en una semana.

-Sé y estoy al tanto de ello, fueron  años juntos lo sé Hyukkie, pero ya no sé si hablar o no hablar es bueno, no sé qué hacer.

-Nada, de verdad que ¿no se te viene algo a la cabeza para salvar nuestra relación? ¿los niños?

-Antes que nada preferiría no meter a los niños en esto, estamos así por qué nos dejamos caer en una rutina sin fondo.

-¿Dejamos? ¿Nos dejamos caer? Por favor Donghae es increíble lo que dices, he dado todo de mi, he sido muy paciente, siempre te he esperado, nunca en la vida te he dicho que no a algo.

-Perdóname Hyukkie, nunca fue mi intención hacerte daño, la verdad no sé que hacer, estoy pérdido en un mar de pensamientos y todos ellos son idiotas.

-Siempre te dí oportunidades...

-Te prometí muchas cosas, que cambiaría pero ha sido muy difícil, también necesito tiempo para hacer mis cosas, distraerme.

-Sé que ambos necesitabamos un tiempo, a estas alturas si ya te sientes abrumado, no quieres estar con nosotros... vamos a divorciarnos, cada quién podrá irse por su lado, como una vez lo hablamos, yo me quedo a Taemin, Ren, Jeno y Jisung.

-Entiendo cómo te sientes y sé que no estoy en posición de negarme o decirte algo...

-No, no me entiendes, lo único que hice fue amarte, esperarte, buscarte aún cuando yo no tenía la culpa.

-Perdóname Hyuk, se me están yendo las cosas de las manos que no tengo ni la menor idea de qué hacer.

Ahí estaba él mirándo la ventana, siempre quiso salvar la relación, dándo y dejándo todo en el intento aún si eso era lastimarse él mismo.

Hyukjae un chico enamorado dejó caer más lágrimas de las que ya había derramado, tenía la naríz roja y los puños color rojo de tanto apretarlos, en algún momento deseó con toda el alma estar por siempre al lado de Donghae que estaba sentado en la cama, mirándo a la nada.

Nadie decía nada, solo se escuchaban los sollozos y una naríz siéndo sorbida dentro de aquella habitación que hace años atrás los había visto entregarse amorosa y sexualmente.

Dos corazónes latiéndo, uno más roto que el otro.

La lluvia hizo acto de presencia y en cuanto el primer rayo se reflejó en la ventana, el más alto caminó a la sala. No fue seguido ni deseaba que lo siguieran, encendió la cafetera y esperó paciente.

-Hyukjae... amor

-Dime, Donghae ¿hay alguien más?

-No es lo que piensas no tengo a nadie más en la vida, más que a ti y a nuestros hijos.

-¿Entonces? ¿Por qué tantas veces hemos pasado por esta misma situación? Seguimos cayéndo en lo mismo, sabes que esto se arregla en parejas, ayudame a ponerte en mi lugar...

-No puedo...

-Lo imaginé... es bastante difícil ponerse en el lugar de alguien destrozado, tengo aquí a mi esposo, nos hemos separado mil veces, he dejado a mis hijos por "darle un tiempo" y míranos aquí de nuevo...

-No sé qué hacer, te juro que no tengo ni la mínima idea de qué hacer.

-Quizá es tiempo de ir cada quién por su lado, como una vez lo dije, siempre serás el amor de mi vida aah me diste unos hijos maravillosos a los cuales amo y adoro con toda el alma.