undine ; KOOKMIN

New Perspective

Jungkook esa mañana amaneció igual de mal que siempre, pero esta vez no espero a que su hermana lo fuera a ver, tampoco desayuno ese día, pero se hizo un sandwich con cosas que encontró en la cocina, unas rebanadas de queso, mermelada y unas rodajas de salami.

Las calles a esas horas aún estaban medio oscuras, el cielo estaba de morado color uva, nadie pasaba por ahí a no ser que estuviera muy muy loco para desperdiciar tantas horas de sueño, pero ahi andaba Jungkook decidido a pescar aquel tritón y llevárselo de premio a Taehyung. Dio unos saltitos mientras caminaba, estaba demasiado emocionado, pero también su mente ya lo empezaba a aterrar, haciéndole ver escenarios en su cabeza, donde el tritón lo atacaba o se lo llevaba al fondo del mar para ahogarlo, y al dia siguiente aparecer flotando entre la arena de la playa y las olas.

Pero por si eso pasaba, traía un gran arpón, afilado y peligroso para poder defenderse y matar al tritón de paso

Pensó en su hermana y su mama que todo el día estaba ausente en casa. No quería morir aún y sintió la terrible necesidad de regresar a su casa y darle un beso en la mejilla a su hermana. No pudo, pero lo que sí podía hacer era llevarle dinero para que comprara la comida, los pastelillos y los lápices que quisiera.

Llegó a su botecito destartalado y lo movió entre las olas para adentrarse a la zona de corales, que estaba muy lejos de la costa en donde generalmente estaba todo el comercio y pescadores de otros pueblos. Ayer había comprado una nueva red de pesca y la lanzó esperando sacar una buena cantidad de pescados y de paso atrapar al tritón.

Estuvo mucho tiempo metiendo y sacando la red, y los peces que por mala suerte caían en la trampa, terminaban en las cubetas de Jungkook que inmediatamente los mataba, pidiendo perdón. Así pasó más de media mañana y el sol se empezaba a alzar un poco más furioso y caliente sobre él, decidió que no podía estar más tiempo ahí porque terminaría con un golpe de calor. Avanzó con su botecito unos metros más allá de los corales, en donde había una playa que nadie visitaba, una playa donde los animalitos marinos a punto de morir se tiraban en las arenas de ese lugar. Cuando llegó, atasco el bote en una estaca que enterró en la arena y caminó entre huesos de lo que tal vez había sido una ballena. Se refugió en la sombra de una palmera y se disponía a comer el sandwich que había preparado en la mañana, cuando de repente el mar con un gran sonido escupió hacia la arena una masa gris sangrante.

Un poco asustado abrió los ojos y su corazón empezó a latir fuertísimo contra sus odios, se levantó y con pasos lentos y cautelosos, fue a mirar la criatura que respiraba acelerada sobre la arena. Vaya sorpresa que se llevo cuando más de cerca miro que era el triton lleno de sangre, que al parecer estaba sufriendo por los grandes cortes que tenía en toda su aleta y en especial había una más preocupante en su rostro,pero no podía verla con claridad por toda su cara manchada de rojo carmín.

Ya bien entrado en un posible ataque de ansiedad, corrió rápido hacia su botecito a tomar el harpon, de la velocidad no se dio cuenta cuando tropezó contra un hueso de algún animal y cayó de contra la arena, sintió como un suave líquido recorrió su rostro, pero no se molestó en revisar, solo tenia propósito matar el tritón e irse de ahí, por que la ansiedad ya lo estaba consumiendo. Cuando fue a revisar de nuevo al tritón moribundo, uno de sus ojos azules estaba abierto, ya no respiraba rápido, ahora era más pausado pero parecía tener problemas con eso. Jungkook tembló y apuntó al tritón justo en la cara, pero el ser no se inmuto y solo siguió mirando a los ojos de Jungkook con esa mirada cristalina como el fondo del mar.

Las facciones del tritón eran muy bonitas,pensó Jungkook, tenia la piel un poco grisácea, pálida y con pequeñas rojeces, su ojo abierto tenia una linda forma almendrada y sus labios eran esponjosos, su cabello rubio estaba decorado con al parecer algunas perlas que brillaban tornasol frente al sol, tenia un cuerpo menudo pero bien formado y su cola era gris azulado,era fascinante, tan fascinante que su ansiedad pudo mas con el y sus piernas fallaron. Ahora Jungkook cayó en un fuerte estrépito y el arpón con el que apuntaba al tritón cayó a centímetros de su cara, el ser no hizo nada más que cerrar los ojos, parecía agotado y Jungkook solo lloro.

Pasó un largo rato y Jungkook no podía controlarse, la ansiedad que estaba sintiendo eran tan terrible que su pecho ya comenzaba a doler de tanto que su corazón palpitaba, tenía la cara roja y los ojos desorbitados, mirando a todos lados pero no enfocados en nada. El tritón se movió un poco y con su único ojo abierto, acercó la mano lentamente a Jungkook, el cual inmediatamente se dio cuenta y sin poderse mover mucho, salto un poco lejos de él, el ser siguió estirando su mano lento y por fin se logró posar en su pierna, su ansiedad de repente dio un bombazo como si la situación se fuera a poner peor, pero solo se fue tranquilizando lentamente. Aquel ser lo había calmado con tan solo un toque.

Ahora Jungkook no sabía qué hacer, su arpón estaba a centímetros de la cara del rubio, pero ya no sentía las intenciones de matarlo dentro de su interior. El no era una persona mala y de repente sintió tanta pero tanta lástima de sí mismo por ser tan cruel que se levantó un poco exhausto y fue a su barco. Cuando llegó rebuscó entre sus cosas una botella de agua dulce y cuando la encontró, fue directo hacia donde estaba su sándwich, se dirigió al tritón con todas esas cosas entre las manos y se arrodillo a su lado, extrañamente el miedo y la ansiedad que había sentido al estar frente a él, se había reducido a un simple retortijón en el estómago. Se quitó la camisa y la empezó a romper en jirones, el ser lo seguía mirando sin hacer nada, solo respiraba pausadamente y de repente hacia sonidos como si se estuviera ahogando.

Jungkook con cuidado acercó su mano hacia la piel del otro, no estaba seguro de querer tocarlo, entonces el tritón con el mismo cuidado acercó su mano hacia la suya, ambas extremidades se tocaron, pero una ráfaga de electricidad paso entre ambos, soltaron sus manos de inmediato. Jungkook menos miedoso empezó a limpiar las heridas del otro, el pequeño rubio no se movía, pero su único ojo abierto demostraba que realmente le dolía demasiado, tenía un brillo de sufrimiento. Jungkook se sintió horrible cuando miro todas las heridas tan profundas que tenía, pero casi se desmaya cuando limpiando su cara descubrió que había una gran rajada en uno de sus ojos, el cual lamentablemente ya no estaba, comenzó a llorar pero no de ansiedad, si no por pena.

-¿Pero qué te ha pasado?- pregunto Jungkook

No se esperaba una respuesta en lo más mínimo, pero el ser abrió la boca y una de las voces más bonitas y dulces que había escuchado en su vida se hizo presente.

-Me atacaron.

No dijeron nada más, Jungkook se dedicó a vendarlo, con cuidado de no molestar a la criatura tomó su sándwich y lo fue cortando en pedacitos, primero le ofreció pan, el cual la criatura miró asqueada, Jungkook se comió el trozo que cortó y fue ofreciendo todo los ingredientes de su sándwich hasta que llegaron al salami, al triton le brillo su ojo y abrió la boca, mostrando una línea de dientes tan afilados como un cuchillo y se cernió sobre el trozo de carne, lastimó el dedo de Jungkook el cual solo dio un grito asustado y el tritón bajo la mirada apenado. Creyó ver un leve sonrojo en su piel grisácea.

Jungkook enternecido y sin pensarlo mucho comenzó a hablarle.

-Me llamo Jungkook, soy un pescador y trabajo para mantener a mi familia, yo venía con la intención de matarte pero la sorpresa que me lleve cuando vi que ya estabas casi muerto, mira nada mas lo que es la vida, amo tu rostro, lo cual es gracioso porque todos me toman por un loco pero cuando les cuente esto la cabeza les va a explotar, santo cielo no...

El tritón interrumpió con un sonido como para hacer que se callara, y sonrió un poquito tímido.

-Yo soy Jimin, soy el príncipe de este océano...

Ambos se quedaron callados un buen rato y anocheció. Jungkook se levantó y desenterró el arpón, con cuidado de no asustar a Jimin lo dejó a su lado y recogió sus cosas. Se encaminó a su botecito y Jimin hizo un pequeño ruido como un silbido.

-¿Mañana vendrás?- hablo Jimin, Jungkook miró como su único ojo comenzaba a ponerse un poco más brilloso como si quisiera empezar a llorar.

-Tengo una nueva perspectiva sobre la vida, además eres muy bonito. Adiós.

Corriendo un poco avergonzado sacó su botecito a flote y se adentro para llegar a la otra orilla donde él vivía. Su ansiedad ese día había desaparecido.

Ando inspirada, espero que les guste este capitulo, los quiero mucho bonitxs <3