Proyecto de Héroe en la isla Nabu (2/14)

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Había llegado la tarde y todos estaban cansados.

—Estoy cansado—suelta Sato

—Hemos dado nuestro Plus Ultra más allá de lo que pide la ley—comenta Kaminari

—No creen que estamos haciendo cosas sin importancia?—pregunta Sero

—No hay ningún incidente sin importancia—comenta Iida

—Aunque ahora trabajemos como héroes no olvidemos que aún somo estudiantes. Debemos hacer nuestro trabajo de buena fe para ganar la confianza de la gente—agrega Yayorozu

—Oye!—Mineta levanta la mano—Pero aquí hay dos personas que no han hecho nada desde que llegamos—señala donde stá Bakugo y Someina

—Me quedé en la oficina a propósito. Qué van a hacer si aparece un villano mientras ustedes están fuera?—

—En esta isla no hay villanos—comentan a la vez Kirishima y Someina

—Y por que te te quedaste, eh?!—Bakugo mira a la pelimorda

—Para hacerte compañía—

—No necesito que hagas eso! Tienes que hacer algo en vez de estar vagando!—

—Para que dejes estar molestando haré patrullaje en la noche—la chica pelimorada a veces le llegaba a a desesperar la actitud del rubio cenizo

—Buenas tardes—

—Señor alcalde—Iida se acerca a la gente que estaba en la entrada

—Muchas gracias por haber llevado a la abuela al hospital—el de lentes recibe la bandeja

—Gracias por reparar la moto—Yayorozu, que se había acercado, recibió la otra bandeja

—Mi batería también—

—Gracias por trabajar como salvavidas!—

— Es parte de la pesca de hacer rato!—

Personas del lugar dejaban bandejas de comida en la mesa del comedor mientras agradecían por el trabajo de los demás.

—No es suficiente para agradecerles, pero se lo trajimos con mucho gusto—comenta el alcalde

Los alumnos se habían entusiasmado. Iida calmó a todos. Los habitantes de la isla se retiraron y los chico comenzaron a comer. Para la noche habían terminado de comer

—Estuvo rico!—

Someina suelta alegre poniendo sus manos en el estómago. Por alguna razón Bakugo la había obligado a comer con él y se había sentado a su lado

—Bueno, nada supera la comida preparada por mi mamá, pero...he probado comida que nunca había comido en mi vida!—

—No deberías ni comer esta comida que no has hecho nada!—

—Eso debería decirlo a ti también—la chica se echa en el suelo y apoya su cabeza en la pierna del rubio cenizo

—Hey! Quién te dijo que podías hacer eso, eh?!—

—Calla, no seas gruñón—se queja la pelimorada poniendo una mano en la mejilla del chico para alejarlo ya que había acercado su rostro un poco—Me ha entrado un poco de sueño—se gira en dirección a la mesa y se hace una bolita

Bakugo se le queda mirando unos segundos, quería tocar el cabello de la chica pero es interrumpido.

—Bakugo...o mejor dicho Kacchan... Nos daremos un baño y nos iremos a dormir—Kaminari era el que lo había interrumpido

—Te encargamos la limpieza—agrega Kirishima

—Por qué yo?!—

—Pues el día de hoy no has hecho nada—

—Maldición—

Los chicos se habían ido sin notar la presencia de la pelimorada. La chica suelta un quejido y gira su rostro llamando la atención del chico. Se queda mirándola lo tierna y calmada que se veía. El chico pone su mano en la mejilla de la chica, ella sonríe dormida y el rostro de Bakugo aparece un sonrojo.

«Se ve como un ángel estando dormida a comparación de cuando esta despierta»

—Deku...—

El chico se molesta por el nombre que había soltado y la jala de la mejilla.

—Despierta floja!—

La chica suelta un respingo, se sienta y comienza a quejarse del dolor.

—Su- Suelta que eso duele!—agita sus brazos haciendo gestos de dolor y el chico ahora jala ambos cachetes molesto—En serio! Me duele, Bakugo!—

—Me vas a ayudar a lavar los platos!—

—Qué?! Pero...—

—Y no quiero quejas!—

Después de lavar la chica subió para cambiarse y patrullar. Al salir de su cuarto se encontró en medio pasillo con Bakugo.

—Bakugo? Pensé que ya estarías dormido. Vas a...—

—Calla y camina!—

La chica hizo caso recordando que antes se había molestado con ella sin razón alguna. El patrullaje estaba siendo calmado y silencioso. Ninguno de los dos hablaban lo que ponía incomoda y nerviosa a la pelimorada. Al ver que no ocurría nada decidieron volver a lo oficina y dar por terminado el día.

El rubio cenizo se adelanto si esperar a la pelimorada, la chica quería protestar pero ya estaba muy lejos para que la escuchara. Suelta un suspiro del cansancio, tenía la mano extendida y la acuna en su pecho.

—Por qué me gustas? Tu indiferencia hacia mí hace que este sentimiento sea más doloroso cada día, te siento como inalcanzable. Será mejor que olvide este sentimiento? Por mi bien emocional sería lo mejor—algunas lágrimas había salido, las limpia, toma aire para calmarse y que no noten su pesar al llegar a la oficina

Al llegar lo primero que vio fue a un niño parado en la entrada. Se acercaba al lugar y podía escuchar lo que decía.

—Apareció un...villano—

—Un villano?—escucho a Midoriya hablar

—Explícate!—escucha exclamar a Bakugo

—Qué está ocurriendo aquí? Un villano?—Someina había aparecido y miraba a todos los implicados

LA CHICA DE LA BUFANDA [En Edición]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora