Sospechas

140 13 2
                                    

Edward Malfoy

Estaba muy feliz de haber podido mostrarle este lugar a Anne.
Estar con ella me había traído tranquilidad.
Pero no podía esperar para volver a América y no volver a ver a ningún Nott otra vez, a excepción claro de Lyssander y la abuela.
El resto se podía ir a la mierda.
Regresábamos lentamente a la mansión.
Ya no importaba si me veían por las cámaras.
Yo estaba tranquilo y eso es lo que me importaba.
_oye Ed, tengo curiosidad sobre algunas tiendas aquí en Moscú. Todo en el centro se ve muy serio.
_todos aquí son muy serios. Mira a mí familia por ejemplo.
_no lo creo, tu abuela es muy divertida. Siempre saca de quicio al señor Malfoy y a los demás.
_bueno, la abuela y Vera se parecen un poco en eso pero luego son unas estatuas. No se sabe si están molestas o no.
Ella asintió dándome la razón.
_espera aquí, voy a hacer una cosa. No te vayas.
No le dí tiempo a responder.
Salí corriendo hasta el estudio del abuelo, necesitaba llaves de alguno de los autos y algo que me avalara ante la policía si me detenían.
Puedo ser todo un mafioso si así lo querían ver.
Pero mejor no tentar a la suerte, ya me dijeron que si me porto bien nadie se atreverá a molestarme.
Justo encontré a mi abuelo cuando iba de salida.
_¡abuelo espera!
Él paró en seco.
Y me dio una mirada curiosa.
_¿A qué le debo el honor de tu presencia por esta parte de la casa?
_necesito un auto
_¿No tienes ya como cinco autos en América?
_no, yo... Necesito un auto aquí
_bien, mañana iremos a comprarlo
_no, no. Me refiero a ahora, me preguntaba si me dejabas usar el auto de mi madre
_¿Su BMW?
Ví que se lo pensaba.
Ya sabía yo que esto iba a ser complicado.
Iba a replicar cuando lo ví entrar al despacho otra vez.
¿Qué se trae?
No demoró mucho.
Cuando salió venía con algo en sus manos.
_ten
Me entrego las llaves del auto y los documentos para conducirlo sin problemas.
_es tuyo después de todo. Solo... Solo ten cuidado ¿si? A tu madre le fascinaba ese auto. Corre como no te imaginas.
El abuelo sonrió mientras me daba una palmada en el hombro.
Bien, ya tenía lo que quería.
El resto lo haría yo.
Le daría un tour un poco rápido de lo poco que conocía de Moscú a Annie antes de irnos.

...

_¡Edward! Ve más despacio, siento mi estómago en la garganta.
_oh, vamos... Es divertido
_¡Divertido mis tripas! Puedes chocar, por favor...
_bien... Aburrida
Bajé la velocidad de la marcha y solo ahí pude darme cuenta que una patrulla motorizada nos seguía.
_genial...
_te lo dije. Pero cómo siempre no me haces caso.
_dokumenty pozhaluysta (documentos por favor)
_konechno, derzhi (claro, aquí tiene)
_tak Malfoy, da? (Así que Malfoy ¿Eh?)
Ese tono del policía no me gustaba nada.
Anne me miraba sin entender ni una sola palabra de lo que estaba diciendo.
Para ella esto era chino.
Aunque en realidad era ruso.
_ty dash' mne povod proverit' ikh mal'chik (me vas a dar una razón para investigarlos, muchacho)
_Mne prosto nuzhno poskoreye dobrat'sya do mesta, ponimayete? osobenno tot, v kotorom yest' vannaya, eto srochno (yo solo necesito llegar rápido a un lugar ¿sabe? especialmente uno que tenga un baño, es urgente)
Señalé a Anne disimuladamente.
_V vashem dome nikogo net? (¿que no hay uno en tu casa?)
_v tom, chto ya ne iz doma. (es que no vengo de mi casa)
Él estrechó los ojos pero a regañadientes me dejó pasar
_ladno, mozhesh' idti. (bien, puedes irte.)
Me cedió otra vez mis documentos y me alejé con cautela de ahí.
No quería volver a caer.
_¿Qué fue lo que le dijiste?
_es un secreto
_juro que voy a aprender ese estúpido idioma tuyo. No sé si me estás insultando o no.
Me hacía gracia sacar de quicio a Anne cuando hablaba ruso o alemán.
Le desesperaba no entender ni mu.
_ya veremos si lo logras, por ahora quiero llevarte a un lugar.
Fuimos al club donde mi madre y mis tíos solían practicar profesionalmente la esgrima.
Anne y yo éramos muy buenos duelistas en América, aunque ambos estábamos en el equipo nacional yo solo lo hacía por pura gusto. Supongo que está en mis venas.
Veía lo fascinada que estaba con todo el lugar.
_¡Esto es maravilloso! ¡¿Te imaginas competir aquí? No tiene nada que envidiar al centro olímpico de América.
_de hecho este es el centro olímpico ruso
_bien... Vamos a sacarle provecho a esto, espero que no estés tan oxidado.
Su sonrisa socarrona solo significaba una cosa.
Duelo.

Anne Fox

Era divertido escabullirse de la mansión hasta aquí.
Se sentía como dar un respiro de aire puro.
Había hecho un amigo en medio de los duelos con los demás practicantes.
Era muy amable conmigo.
Se llama Eric.
Me ha parecido muy simpático, pero Edward ha puesto su cara de perro rabioso con él.
Solo le faltaba ladrar.
En una oportunidad había espantado a Eric, pero no iba a dejar que lo hiciera de nuevo.
¡¿Como se supone que me sienta cómoda si no puedo tener un amigo también aquí?!
_Ed, te estás pasando. En serio.
_te espero en el auto.
No me dejó decir más.
Simplemente se fue.
Me sentí incómoda y lo único que atiné a hacer es disculprme por su descortesía.
Puede que sea demasiado confiada pero tampoco es para tratar mal a un extraño.
¿No se suponía que para conocer los puntos débiles de los rivales había que conocerlos primero antes de ir a la defensiva?
_descuida, ve tras él.
Asentí de vuelta y corrí tras Edward con equipo y todo encima.
Dejé la máscara y la espada en una silla cercana.
Tomé mi teléfono y mi bolso con mi ropa del casillero.
Busqué su auto en el estacionamiento y entré.
Durante todo el camino el iba callado y muy serio.
Desde hacía días que venía más extraño que de costumbre y hasta cargaba su arma consigo.
Solo hacia más que ponerme de los nervios.
Se que algo malo va a pasar si es que no lo ha hecho ya.
Y sospecho que Edward se va a poner aún peor.
Lo presiento...

PRÍNCIPEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora