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—Y fue por eso que me golpeó, por eso yo saqué mi pistola

—Te voy a empapelar —decía el pelinegro dirigiendo su mirada hacía el de los ojos rasgados—

—Jodel, pelo si el empezó todo, Almandito no me hagas esto

—Calla o que te comes la porra

El de hebras grises sólo observaba aquella escena bastante confundido por la actitud que estaba tomando su superior, era extraño verlo preocupado por alguien o bueno, el verlo preocupado por alguien que no conoce tan bien.

—Pelo señol agente, pol dios

—Volkov, ¿te lo podrías llevar?, tengo un asunto que arreglar con Armando

—Vale

El comisario acató la orden y se llevó esposado, simplemente en la sala se quedaron aquellos dos hombres que para ojos de todos se odiaban.

—¿De verdad?, no esperaba que te preocupes por mi

—No me estoy preocupando por ti, porque si gustas puedes comerte los barrotes con tu noviecito

—Siempre tan lindo —una sonrisa se pinto en el rostro del mecánico—

—Armando basta por favor, me voy a estresar y creo que lo sabes bien

—Joder, cuando creo que te estoy entendiendo te vuelves más complicado

—Acompañé a mi oficina

—¿Otra reunión para aclarar las cosas?

Sin decir nada más el superintendente tomo al pelinegro del brazo y lo arrastró a su oficina, algunos agentes presenciaron aquello, pero no le prestaron tanta atención. Un rato más tarde los dos ya se encontraban en aquella oficina, la puerta estaba cerrada con seguro cosa que puso un tanto nervioso a Armando, aunque sus nervios aumentaron.

—Armando ¿porque?

—¿De que hablas?

Rápidamente el pelinegro le proporcionó un abrazo a la vez que unió sus labios en un beso cosa que tomo bastante por sorpresa al mecánico, aunque este no se negó ante aquello, Conway coloco su mano sobre la cabeza de Armando con el intento de hacer mas profundo aquel beso,por un instante se separaron.

—¿Y esto que es? —preguntaba Armando con las mejillas completamente pintadas de un color rojo—

—Anda, sólo no digas nada

Continuaron con aquel beso el cual poco a poco se hizo más intenso, el mecánico terminó recostado sobre el escritorio y con Conway encima de el aún besándole.

Complicado. NadanwayDonde viven las historias. Descúbrelo ahora