su pecho estaba frió, jadeaba arrastrándose para poder ponerse de pie, tuvo que patear la cara de Adam para que no le tomara del pie, tenia que correr, se levanto del piso lleno de barro y empezó a correr pasando por el frente de la casa cuando lo vio casi de frente a el, sus ojos desprendían una furia asesina apenas se dio cuenta que ya estaba afuera, en pocos segundos ya lo tenia a menos de un metro de el, le dio un golpe limpio en la mandíbula haciendo que perdiera el equilibrio y cayera, lo tomo del cabello para llevarlo adentro pero antes de poder avanzar si quiera un metro sintió como algo se clavaba en su pierna, un dolor agudo lo hizo gritar y soltarlo, Jason se arrastro y a tropezones se puso de pie para correr con todas las fuerzas que su magullado cuerpo le permitía.
No tenia idea donde estaba, era como una especie de bosque y no lograba ver nada, más de una vez las ramas le cortaron las piernas y las manos, miro atrás para ver si no lo seguía y en un movimiento en falso su pie se torció, haciendo que caiga colina abajo, grito sintiendo como cada parte de el era golpeada contra el suelo hasta que se detuvo casi chocando con un árbol, sin aliento y también sin fuerzas dejo escapar un quejido, escuchaba ruidos y con sus ojos llenos de lagrimas se levanto tomando su abdomen, vio luces no muy lejos de allí... Si no llegaba ahora ahí, estaba seguro que ese seria su fin, entre lamentos fue como pudo hasta ese lugar, el bosque era cada vez menos denso y vio la carretera haciendo que mas lagrimas cayeran de sus ojos — ¡JASON!— lo escucho tan cerca que pensó que seguramente estaba detrás de el,no se giró, solo corrió o al menos eso intento, llego a la carretera y ahí justo al frente había una estación de servicio, una visita escapo de sus fríos labios y lo más rápido que pudo cruzo la carretera, al fin, estaba a salvo, más lagrimas cayeron de sus ojos cuando entro de golpe y un señor en sus 40 lo vio espantado —Disculpe...— reparo en como lo había asustado, seguro pensó que iba a asaltarlo.
Suspiro tratando de calmarse para hablar en lo que miro afuera, y como a lo lejos algo se venia acercando, sus pupilas se encogieron al verlo del otro lado de la carretera —TIENE QUE LLAMAR A LA POLICÍA — se apoyo en el mostrador casi del todo sin poder mantener su propio peso — POR FAVOR... El...El quiere matarme — el pánico que reflejaban sus ojos asustaron más al señor de esa tienda el cual pensaba que quizás ese joven estaba drogado —Oh, Frank no sabia que tenias turno hoy— esa voz... se puso pálido y las piernas le temblaron — Adam, que gusto verte — el señor sonrió amable viendo a su viejo conocido — Si... Pensé que el turno de la noche seria más tranquilo pero al parecer... — miro al joven que parecía estar en shock — Me habían advertido que gente inestable se aparece a estas horas — le tenia miedo a Jason, pensaba que en cualquier momento sacaría un arma — ¿Acaso te esta molestando? — su voz fue seria, nada amigable como hace un momento, dio un paso adelante poniéndose detrás de el haciendo que un quejido casi inaudible escapara de los labios del chico — Algo así, parece completamente fuera de si... — el pobre no se movía, le dio pena — Quizás puedas acercarlo a la ciudad, siempre eres tan amable y creo que este chico necesita ayuda — saco un par de caramelos de un frasco y se los tendió — Parece que se desmayara en cualquier momento ¿No? Lo mejor sera que lo lleve— tomo los caramelos y puso una mano en el hombro de Jason y apretó con mucha fuerza — Vamos chico, aquí solo estas molestando — lo empujo zafándose del agarre —NO ME TOQUES MALDITO —.
Pretendía correr hasta la puerta pero fue frenado por Adam el que lo tomo con mucha fuerza de uno de sus brazos — Voy a llevarlo a la ciudad, buenas noches Frank — salio por la puerta con una sonrisa que se borro casi al instante, Jason solo negaba con la cabeza, estaba en shock murmurando algo entre lagrimas y sollozos.
Al cabo de unos minutos habían llegado de nuevo a la casa y cuando entro azoto la puerta con fuerza para luego hacer lo mismo con el, grito cayendo al piso derrotado —Si que eres un problema... ¿Sabes lo que acabas de hacer?— miro su pierna, la cual apenas había dejado de sangrar —Sabes lo que significa ¿No?— saco una navaja de su bolsillo y se agacho a su altura mirándolo, tomo su rostro con una increíble fuerza y lo apretó — ¡¿SABES QUE NO ME QUEDA MÁS REMEDIO QUE MATARTE?!— clavo con fuerza la navaja en su pierna, un alarido desgarrador salio de Jason el cual se dejo caer hacia adelante gimiendo de dolor —Por favor... Solo hazlo de una vez— Levanto la mirada con el rostro lleno de lagrimas — Matame... Prefiero eso que tener que pasar un día más contigo — cerro los ojos esperando que le diera el golpe de gracia pero no fue así.
— Acabo de venir de ver a Frank y parece que se le metió un drogado a la tienda— estaban en la estación de policía y seguían investigando los casos que tenían pendientes — ¿Aja? Y que hizo? No le robo ¿Verdad?— miraba documentos para entregarle a la oficial Alex — No, solo dijo que estaba perdido, que decía que alguien quería matarlo— el policía se miraba pensativo al igual que su compañero, el cual dejo de poner atención a lo que hacia — ¿Le preguntaste como era? — se apoyo en el respaldar de su silla mirándolo con el ceño fruncido —Tenemos a una persona desaparecida y a un muerto y me cuentas algo así como si nada?— tiro el bolígrafo en la mesa tirando su pelo para atrás —Me dijo que era joven, quizás unos 20 años o más, estaba sucio y pálido — antes de poder continuar el teléfono de la oficina sonó, el policía que estaba enojado con su compañero atendió la llamada.
—Oh hola Frank ¿Como va la noche?—
la cara del policía cambio a una más seria.
— Iremos enseguida—.
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