pov mariana
cuando fercha se va siempre vuelvo a lo mismo, el estrés la ansiedad y el despertarme a mitad de la noche asustada son mi pan de cada dia, la verdad es que de verdad siento que todos están bien sin mi, incluso fercha porque se que solo soy un saco triste andando por ahi. El dia siguiente a mi cumpleaños fue el dia que no quería que llegara pero que finalmente llego, sono mi telefono a las 11:00 de la mañana.
-ven al hospital mama esta muy mal-dijo llorando un montón
Yo solo colgué la llamada y me fui corriendo a la camioneta acelere y llegue al hospital entre corriendo y lo que vi fue a mi padre hablando con un doctor, el parecia mas perdido que la ultima vez que lo vi el dia antes de mi cumpleaños, me acerque y baby me toco el brazo y me aparto de todos hacia la habitación de mi madre, cuando entré ella estaba en su cama conectada a mi aparatos que la hacían respirar y estaba tosiendo.
-los médicos dicen que no pasará de esta noche así que mejor despídete, caro y yo lo hicimos por la mañana-susurro baby en mi oído y luego se fue
camine hacia la cama de mi madre quien se veía bastante demacrada
-señorita mística milagro en verte hija mía-dijo entrecortadamente
-mamá...-solo eso puede decir antes de ponerme a llorar a su lado
ella me abrazo y nos pusimos a hablar de cuando yo era pequeña y de cuando ella era mas joven, hasta que en uno de esos momentos de risa eufórica me dijo lo siguiente.
-hija este tiempo en el hospital ha sido una tortura y la verdad es que lamento mucho haberte dicho que era una etapa y trate de persuadir que no te gustaran las mujeres pero ahora mismo puedo decirte que nunca me ha importado, porque eh visto como perdias tu esencia poco a poco y en parte me culpaba por pelear contigo por tu orientación sexual, tu puedes amar a quien quieras y si te hace feliz por mi estará bien, solo quiero volver a ver a mi pequeña sonriente-dijo mientras yo solo lloraba
-gracias mama, aun no te vayas por favor, no te vayas justo cuando logramos arreglarnos, si no le veo sentido a la vida sin ti, como sera si te llegas a ir, si te vas llévame contigo por favor, porque la vida sin mi mamita regañona no es vida y vivir extrañandote es aun peor- respondi despues de un rato luchando conmigo misma para poder hablar.
-eso no lo decido yo hijita pero ten por seguro que si me hoy me muero moriré en paz-dijo eso y seguido llego el doctor a decirme que la hora de visitas había culminado
Sali de alli con el corazón queriendo salirse de mi pecho y un vacío incomparable con cualquier otro que haya sentido
-caro sigue llorando es normal sentirse asi hermanita pero seamos fuertes por mama y sobretodo por caro-dijo secandose las lagrimas
-es que esto es muy cruel de verdad porque los últimos días que pase con ella fuera del hospital los arruine por estar triste, tantos momentos hermosos que arruine solo por mi estupidez-dije pegándome en el brazo
Después de eso solo recuerdo a baby diciéndole que no era mi culpa y que la depresión era algo difícil de sobrepasar pero que juntas lo lograriamos, también recuerdo dormirme despues de un rato de llorar sobre los brazos de baby.
sali del hospital cuando mi padre me despertó para decirme que fuera a casa y durmiera para luego regresar. cuando llegue a casi eran las 9:00pm, me meti a la ducha y llore soltando todo lo que tenia, cuando sali de la ducha con mi pijama ya puesta me acosté a dormir y por primera vez no tenia miedo de dormirme porque ya no me importaba si moría o no o si me quedaba atrapada en un estúpido sueño o no, todo lo que me importaba me pesaba y lo unico que me importaba era morir
Hola hola, soy yo de nuevo la verdad no se si esta quedando bien o muy rara la historia pero es mi primera vez escribiendo asi que pues diganme algo que quieran que mejore o que ponga y lo tendré en cuenta gracias por leerme y adios
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llegaste tu
Randomperdida en un mar de confusiones me hago la misma pregunta de por qué ser normal no es parte de mi y por que a veces no lo disfruto yo soy mariana y esta es la historia de como mi cobardía me salvo de la perdición y de nunca encontrarla a ella que...